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Un tren japonés funciona con combustible a base de sopa de ramen

La locomotora que se puso en marcha por primera vez el uno de agosto funciona a base de biodiesel

Un tren.

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EPE

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Un tren turístico en Japón se hace viral por la forma en la que funciona. Si bien pensábamos que no nos podíamos sorprender más, llega este nuevo invento mientras hablamos de la gran contaminación que estamos viviendo.

El protagonista es un tren turístico que viaja por las islas Kyushu llevando a turistas para recorrerla y funciona con un nuevo combustible. Después de que los ciudadanos se enteraran de como funciona este tren se ha convertido en el tema de conversación de la ciudad por la fuente de la que obtiene la energía.

Combustible a base de sopa de Ramen

El tipo de combustible que usa este tren sale a la luz en un momento en el que las preocupaciones ambientales son bastante grandes. Es un combustible biodiesel derivado de la sopa de Ramen.

La idea de este biodiesel nació de la mano de Masumi Nishida, fundador también de Nishida Shoun. Usan la manteca de cerdo extraída de la sopa de ramen desechada y el aceite de cocina usado que ahora lo aprovechan para alimentar a esta locomotora turística.

Consiste en mezclar aceite de tempura, manteca de cerdo, un tipo de caldo de hueso de cerdo y la famosa sopa de Ramen. Esta mezcla se somete después a un proceso químico, convirtiéndose en combustible siendo capaz de hacer funcionar el motor del tren.

Después de varias pruebas, la propia compañía se dio cuenta que el motor no tenía problemas para obtener energía del biodiesel. Teniendo un añadido, y es que comprobaron que el combustible a base de sopa de Ramen ya no producía humo negro ni el fuerte olor que generalmente sigue a la quema del diésel convencional.

El 1 de agosto pusieron en marcha el primer viaje de la locomotora. La empresa compra residuos de aceite de cocina de 2000 restaurantes y logra producir 3000 litros de combustible cada día.

Con esta invención la compañía resolvió el problema de desechar el aceite de cocina que solía costar dinero.