MADRID

El ala maldita del centro comercial de éxito de Príncipe Pío

Klépierre, la empresa propietaria del centro comercial de Príncipe Pío, busca reformular el "posicionamiento" del mall tras el cierre de más de diez locales en el ala más alejada a la estación

Centro Comercial Principe Pío.

Centro Comercial Principe Pío. / A.A.

Ana Ayuso

Ana Ayuso

El centro comercial de Príncipe Pío, el primero en la capital que abrió sus puertas todos los días del año, comienza a recuperarse de los estragos que causó en sus pasillos la pandemia. De los poco más de 100 locales que ocupan esta galería que antes formaba parte de la Estación del Norte, alrededor de una docena están desocupados. Actualmente, 69 de estas tiendas se dedican a las marcas, principalmente de moda y belleza, y los otros 23 albergan restaurantes y cafeterías.

El próximo que se quedará libre será el que hasta ahora albergaba una peluquería Marco Aldany, que "no sabemos cuándo, pero va a cerrar", dice una de sus trabajadoras. "Pensábamos que nos íbamos el pasado domingo [18 de junio], pero aquí seguimos", añade. Este centro de belleza se encuentra en la zona más afectada del centro comercial, la que se extiende en paralelo a las vías del Cercanías y a la calle de Mozart.

Restauración

"Sí, esta área está mucho más tranquila que la de la entrada", confirma una de las comerciantes. Gran parte de quienes frecuentan este centro comercial se quedan en el área principal, entre la entrada acristalada, junto a los accesos al metro y al tren, y la plaza que ocupa una terraza de Starbucks. A partir de ahí, los clientes se cuentan con los dedos de las manos.

Las principales marcas de ropa y de restauración permanecen al otro lado. El inicio de las rebajas ha congregado en las principales tiendas de ropa del centro comercial a decenas de personas e incluso los stands que se encuentran fuera de los establecimientos están rodeados de consumidores interesados. "Este centro comercial está muy vivo", dice una de las comerciales de un puesto de tratamientos de belleza de lujo.

En esta parte se encuentran también la mayoría de los locales de restauración. "Son muy importantes en este centro comercial, ya que es una zona de paso", explican desde el equipo de Comunicación de Klépierre, la empresa propietaria del centro comercial de Príncipe Pío. Muchos de ellos se ubican tras la puerta de entrada al centro comercial, por lo que los viajeros pueden acceder a ellos con bastante agilidad.

En el ala más deshabitada, en cambio, se localizan comercios más especializados, como Tea Shop, Tramas (de textil del hogar), PlayStation o Citees (para los amantes de las camisetas). Uno de los golpes más duros que ha sufrido este corredor en los últimos años fue el cierre de su establecimiento de Zara, en el que probablemente era el local más grande del centro comercial.

Cierres

Desde Klépierre, expresan que "los cierres se deben al cambio de posicionamiento del centro". "Tras la pandemia se evaluó que tipo de comercios eran más atractivos para el público y se están trabajando en nuevas aperturas en ese sentido", adelantan desde la compañía francesa, la primera europea especializada en centros comerciales.

Confirman que "hay previsión de nuevas y grandes aperturas este año, que remplazaran los locales vacíos", aunque todavía no dan pistas de qué tipo de actividades se van a desarrollar en los espacios libres. Sin embargo, al tratarse de un edificio histórico, "el trámite de licencias de obra para adecuar los locales es un poco más lento de lo normal y lleva su tiempo".

Por ahora, en este centro comercial se multiplican las marcas de ropa, los restaurantes, las tiendas de hogar y cuentan con sus propias salas de cine, los Cinesa Príncipe Pío Isense. Pero aún no han llegado a este centro demasiados espacios de experiencias por los que sí han apostado ya otros establecimientos comerciales. Uno de los pocos locales dedicados a este tipo de actividad es el nuevo gimnasio Fitness Park Madrid, que abrió sus puertas el 6 de mayo.