Nagorno Karabaj

Sos Avetisyan, embajador armenio en España: "Azerbaiyán dice que somos un tumor canceroso"

"La Corte Internacional de Justicia ya ha dicho de forma muy clara que hay un bloqueo en Stepanakert", asegura.

"Claro que hay peligro de conflicto. El jefe de gobierno de Azerbaiyán lo dijo en su última rueda de prensa".

Sos Avetysian, embajador armenio en Madrid

Sos Avetysian, embajador armenio en Madrid / Cedida

David López Frías

David López Frías

Sos Avetisyan es el embajador armenio más joven que ha pasado por Madrid. Nacido en 1989, se apasionó con España tras estudiar Filología Hispánica en Ereván. Ahora atiende a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA para abordar la situación actual de Nagorno Karabaj. Una región que se disputan su país y Azerbaiyán. En 1994 acabó la primera guerra y salieron vencedores. Autoproclamaron la República de Artsaj, de mayoría armenia. En 2020 concluyó la segunda guerra y perdieron todos los territorios menos la ciudad de Stepanakert, donde ahora, 120.000 compatriotas permanecen bloqueados en el último reducto armenio en la región.

Pregunta: ¿Cuál es la situación actual en Stepanakert?

Respuesta: Ya hace más de 100 días que el Corredor del Lachin permanece bloqueado. La gente está sufriendo. No sólo es el bloqueo de la carretera. También amenazas a agricultores, que son civiles trabajando. O la matanza de tres policías armenios en marzo. Esto es lo cotidiano en Artsaj. Este es el concepto del filósofo Michel Foucault que decía que existen dos tipos de torturas: una es la que conocemos, la que cometes una vez y es una gran tortura. Pero hay otra que funciona lentamente y consiste en hacerte la vida cada día más difícil hasta que tú te vayas. No es una violencia de alto nivel sino una tortura cotidiana.

P: Dice Azerbaiyán que no hay bloqueo...

R: Es evidente que lo hay. Pero eso es algo que no decimos nosotros. Hasta España lo dijo en el Congreso. La Unión Europea y muchos países en occidente lo han dicho de forma muy clara. Azerbaiyán vive en su propia realidad. Peor si tú eres un español, un alemán o un japonés y ves la situación, te das cuenta de que hay un bloqueo. Sólo pueden pasar los convoys de la Cruz Roja. Cualquiera tiene que entender que esa es una situación de bloqueo muy claro, no de normalidad. ¿Dónde aparece la Cruz Roja? En las situaciones de crisis humanitarias. Pero, aunque dejemos a los países al margen, la Corte Internacional de Justicia ha dicho de forma muy clara que hay un bloqueo. Que Azerbaiyán debe desbloquear el corredor y garantizar el paso de vehículos y personas en ambos sentidos. E indican que hay peligro de provocar un perjuicio irreparable. Es un tipo de limpieza étnica.

P: Azerbaiyan sostiene que protestan porque se están cometiendo atrocidades climáticas en Nagorno Karabaj y que sólo quieren monitorear una mina.

R: Es falso todo. Si no me equivoco, ellos han entrado ya en la mina. Ahora dicen que es por la mina, pero hubo agricultores que estaban cultivando la tierra y les dispararon a los tractores. Tres personas que fueron asesinados por francotiradores azerís. No sólo es eso. Provocan constantemente. Meten luces en las casas de la gente, para que no puedas dormir. La mina es una excusa, porque estamos en el siglo XXI y la ecología está de moda. Pero es su forma de actuar. Luego dirán que quieren monitorear la agricultura, luego el agua… Esa es la estrategia de siempre.

P: También les acusan de mantener tratos con Rusia y de estar haciendo reexportación de sus productos.

R: Tampoco es cierto. Armenia está en contacto con todos nuestros socios de occidente, especialmente de la Unión Europea y de Estados Unidos. Y ellos lo saben de manera muy clara. Pero si estamos en campo de acusaciones, destacaré una cosa: el gobierno azerí ha importado gas desde Rusia y lo quieren vender como una alternativa al gas ruso. Este mismo gas que ellos han comprado a los rusos. Ahora la producción de gas de Azerbaiyán es menor, pero exportan mucho más que el año pasado según un estudio de la Unión Europea. Nosotros nada. Estas acusaciones van a ir creciendo, pero la realidad es que Armenia tiene buenísimas relaciones con UE y EEUU. Sólo ellos nos pueden acusar de eso. Lo mío no son acusaciones, son datos.

P: Y por último, de mantener a 10.000 soldados dentro de Stepanakert, cuando en los acuerdos de paz firmados en 2020, Armenia se comprometía a sacar toda su fuerza militar de la región.

R: Armenia no tiene ninguna tropa en Nagorno-Karabaj. Que nos dejen pasar por el Corredor del Lachin a comprobar si eso es verdad, no tenemos ningún problema. Son acusaciones que siempre recibimos de Azerbaiyán. La Corte Internacional de Justicia también dicen que no hay evidencias de eso que dicen de que tenemos un millón de minas antipersonas en el territorio. En Azerbaiyán hay mucha afición por la cifra un millón. Sólo les ha faltado decir que tenemos un millón de soldados. Es todo propaganda. Pero si hablamos de no respetar lo acordado, en el acuerdo de alto el fuego que firmamos ambas partes, Azerbaiyán está violando todas las partes. Hay como 6 o 7 jueces que le sirven al estado para juzgar a organizaciones civiles armenias y a los prisioneros de guerra, saltándose lo pactado. Y están ejerciendo un bloqueo con los presuntos ecoactivistas, que todos sabemos que no lo son.

R: ¿Cuánto más puede aguantar así Stepanakert?

P: Mucho tiempo, porque han aguantado siglos. Es una gente muy dura. Pero eso no significa que la comunidad internacional pueda cerrar los ojos y no haga cumplir la decisión de la Corte Internacional de Justicia. Hay que imponerle a Azerbaiyán que abra el Corredor del Lachin. Esa gente, los armenios de Nagorno-Karabaj, viven allí desde hace siglos. Llevan mucho tiempo aguantando esas torturas cotidianas. Hay familias que están separadas. Hay gente que vino por Navidad y no ha podido regresar a sus casas. La crisis es tremenda. No podemos dejar que 30.000 niños no puedan ir a la escuela. No pueden cortar el gas cuando quieran y eso lo hacen a menudo. No puedes plantear tu vida si no sabes si mañana te van a cortar el gas. Estas son las torturas cotidianas de la que te hablo.

P: Hay gente que está enfadada y dice que el gobierno armenio les ha dejado tirados.

R: El gobierno armenio sigue ayudando con la financiación a Nagorno-Karabaj. Son nuestros compatriotas. Todas las negociaciones las llevamos por ellos. Pero solos no podemos. Es importante que la comunidad internacional nos ayude y que sea un diálogo entre Stepanakert y Bakú. Es importante que se respeten los mecanismos internacionales. Entiendo que se sientan solos, pero no lo están, la comunidad internacional sabe que tenemos la razón.

P: En Stepanakert dicen que saben que tienen la razón, pero que ellos siguen encerrados. ¿Está fallando la diplomacia armenia? Azerbaiyán se mueve bien, se reúne con Alemania, abre embajada en Israel…

R: El único camino es la diplomacia. Lo que hemos hecho bien es internacionalizar el tema; no hay más instancias en el mundo a las que hayamos llamado. Vamos a seguir apoyándolos, ellos tienen el derecho de vivir ahí. Los azerís siempre lanzan provocaciones. Lo único que tenemos nosotros es diplomacia. Ellos buscan una excusa para lanzar un ataque agresivo contra Nagorno-Karabaj y Armenia. A nuestros vecinos les gustaría atacarnos. De hecho dicen que hasta Erevan es una ciudad histórica de Azerbaiyán. Están falseando los datos y la historia, diciendo que esa región es suya, cuando todos sabemos que ahí han vivido los armenios durante siglos. Pero ellos crean propaganda, cierran los ojos y te dicen que te creas que vivimos en otro mundo.

P: Entonces, ¿hay peligro de guerra otra vez?

R: Claro que hay peligro de conflicto. El jefe de gobierno de Azerbaiyán lo dijo en su última rueda de prensa. Ellos siempre dicen que les hemos atacado primero. En estas últimas semanas han dado noticias de que los armenios les estamos atacando. Y es mentira. Nosotros no tenemos ningún interés. Somos 3 millones, hemos salido de la guerra derrotados, no queremos nada. Pero ellos dicen eso. Y cuando dicen eso, significa que nos van a atacar en breve. El gobierno de Azerbaiyán amenaza directamente a la República de Armenia, ocupando nuestro propios territorios dentro del país, 140 kilómetros cuadrados. Las amenazas y la retórica de Bakú no está orientada a buscar la paz en la región, sino a ocupar nuestros territorios. Y a acabar con nosotros. Su gobierno dijo de nosotros hace poco, textualmente, que la diáspora armenia es un tumor canceroso.

P: ¿Y posibilidad de alcanzar la paz?

R: Es lo que estamos intentando. Ahora estamos en negociaciones de paz; hay que seguir negociando aunque la situación sea muy grave. Para firmar un acuerdo hay que respetar lo que pone. Ellos han violado todo lo que han firmado. Los prisioneros de guerra están siendo juzgados por unos jueces corruptos sin ninguna independencia. Cualquier índice de Derechos Humanos te va a decir que no se cumplen los mínimos en Azerbaiyán. Pero no hay mecanismos internacionales de control y siguen violando todos los acuerdos. Ojalá el futuro sea pacífico y que la gente en Nagorno-Karabaj tengan sus derechos protegidos y todas las garantías. Así podremos encontrar una solución pacífica. SI se desbloquease, armenios y azerís podrían convivir pacíficamente, igual que pasa en Georgia. Ojalá que sea así. Porque nos interesa a todos. Armenia podría ser un cruce de caminos entre Turquía, Azerbaiyán, Irán y Georgia. Nos beneficiaría a todos. Pero esto sólo puede existir bajo la soberanía armenia.