SUMAR

Urtasun reivindica su autonomía para eliminar el Premio Nacional de Tauromaquia sin consultar al PSOE en el Gobierno

El ministro de Cultura, de los Comuns, aprovecha esta causa para señalar las contradicciones del PSC de Salvador Illa

El ministro de Cultura, Ernest Urtasun,la semana pasada en un acto en Barcelona.

El ministro de Cultura, Ernest Urtasun,la semana pasada en un acto en Barcelona. / Enric Fontcuberta

El ministro de Cultura de Sumar, Ernest Urtasun, suprimió el Premio Nacional de Tauromaquia sin consultar al ala socialista del Gobierno de coalición. El dirigente de los Comunes sorprendió con esta decisión la semana pasada, en plena campaña de las elecciones en Cataluña, y lo hizo mediante una orden ministerial que depende en exclusiva de su departamento y que fue aprobada en solitario, sin que tuviera que pasar por el Consejo de Ministros.

Así lo detallan en el entorno de Urtasun, donde reivindican su autonomía para eliminar este premio sin contar con el PSOE, tal como ha sucedido en este caso. Preguntado en rueda de prensa este lunes por si había informado o no a los socialistas, Urtasun se limitó a asegurar que "siempre estamos en contacto con nuestro socio de Gobierno", evitando confirmar la existencia de un aviso previo a las filas socialistas.

En las últimas horas, Urtasun ha convertido la tauromaquia en un caballo de batalla de Comuns Sumar de cara a las elecciones de este domingo, y no ha dudado en aprovechar la división que genera este asunto en las filas socialistas para cargar contra el PSC, un partido al que se fuga un 25% del electorado, según la intención directa de voto reflejada en la última encuesta del CIS este lunes. La candidatura apoyada por Yolanda Díaz retrocedería entre dos y tres escaños, pasando de los ocho diputados actuales a una horquilla de entre cuatro y seis, en función de la encuesta.

Fuentes próximas al ministro, sin embargo, apuntan a que la supresión del Premio Nacional de Tauromaquia se ha precipitado puesto que comenzaba el plazo para sentar las bases de todos los galardones nacionales dependientes del Ministerio de Cultura, enfriando así que la decisión respondiera exclusivamente a la campaña electoral.

DIVISIÓN EN EL PSOE

Lo cierto es que el anuncio del Ministerio de Cultura despertó multitud de reacciones en el PSOE, con críticas de algunos dirigentes destacados como el presidente castellanomanchego, Emiliano García Page, que anunció la puesta en marcha de un premio alternativo a nivel autonómico, o el líder de la federación andaluza, Juan Espadas, que aseguró que "la tauromaquia forma parte de la cultura y la tradición española". También reaccionó el líder del PSC, Salvador Illa, que este mismo lunes cuestionó la decisión y reclamó más "consenso" a la hora de hacer políticas en esta materia, pidiendo contar con todas las partes implicadas.

Poco después, Urtasun aprovechó las consideraciones de Illa para hacer campaña en clave catalana, acusándole de "equidistancia" y advirtiendo que "no se puede estar en dos posiciones a la vez". "Le decimos a Illa y al PSC que no sean equidistantes y nos acompañen en la defensa del bienestar animal", destacó Urtasun, ahondando en la división que despierta la tauromaquia en las filas socialistas.

Y la diversidad de opiniones no sólo está presente en el PSOE. El PSC ya se rompió en el Parlament por este asunto en 2010, a cuenta de la votación sobre la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que pedía prohibir los toros en Cataluña, una prohibición que salió adelante y se hizo efectiva en 2012.

En aquella sesión, Miquel Iceta, entonces jefe de los socialistas catalanes, dio libertad de voto a sus diputados ante el debate que esta cuestión suscitaba. El resultado fue que la mayoría de dirigentes del PSC votaron contra la iniciativa, que finalmente se aprobó con el apoyo mayoritario de CiU, ERC e ICV y los votos en contra de PP, Cs y la mayor parte de los socialistas, entre los que se encontraba el entonces president de la Generalitat, José Montilla.

PACTO PSC-JUNTS

La tauromaquia no es el único frente abierto por Comuns Sumar hacia los socialistas catalanes, a quienes también reprochan su "giro a la derecha". La tesis es que la estrategia del PSC pasa por tratar de captar el voto de Ciudadanos, que tenía seis diputados y que a día de hoy está abocado a la desaparición. Y en este intento, consideran los comunes, el partido de Illa habría experimentado un viraje conservador.

Precisamente este eje discursivo está marcando la recta final de campaña, donde Sumar no ha dudado en acusar al PSC de connivencia con Junts, con quien gobierna en coalición en distintos municipios. En los últimos días, Illa ha evitado aclarar si pactaría con el partido de Carles Puigdemont para la conformación del Gobierno, y este mismo lunes evitó descartar este acuerdo en el debate de La Sexta.

El propio Urtasun azuzó este punto para cuestionar al líder del PSC. "Esto no va de quién quede primero, sino qué tipo de gobierno va a gobernar Cataluña, si de izquierdas o de derechas, tal como ha dejado abierta la puerta a Salvador Illa, que no descarta acuerdos con Junts", insistió el también portavoz de Sumar este lunes en rueda de prensa, que azuzó en este punto: "Abrir la puerta a Junts es abrir la puerta a los herederos de los recortes (...). Garantizar la estabilidad en Cataluña solo puede venir de la mano de las izquierdas".