Presidencia de la UE

España asume su quinta presidencia semestral de la UE: ¿cómo fueron las anteriores?

Hasta ahora han sido tres los presidentes españoles en liderar una presidencia española de la UE: Felipe González en 1989 y 1995, José María Aznar en 2022 y José Luis Rodríguez Zapatero en 2010

José María Aznar, en un momento de una protesta en Madrid.

José María Aznar, en un momento de una protesta en Madrid.

Silvia Martínez

Silvia Martínez

España asumió este sábado 1 de julio y hasta el 31 de diciembre de 2023, por quinta vez en su historia, la presidencia rotatoria de la Unión Europea. Esto significa que durante seis meses el Gobierno español, con (de momento) Pedro Sánchez a la cabeza será el encargado de coordinar los trabajos del Consejo -el órgano legislativo y de toma de decisiones en el que se reúnen los ministros-, de planificar y de dirigir las negociaciones entre los Veintisiete en un momento políticamente complicado, a las puertas de unas elecciones que podrían llevar a un cambio de gobierno. Hasta ahora han sido tres los presidentes españoles en liderar una presidencia española de la UE: Felipe González en 1989 y 1995, José María Aznar en 2022 y José Luis Rodríguez Zapatero en 2010.

1. 1989: impulso a la integración monetaria

La primera vez en la que España tomó las riendas de la UE, el 1 de enero de 1989, el club -por aquel entonces las Comunidades Europeas- contaba con una docena de Estados miembros y solo habían pasado tres años de la adhesión española, que se había producido en 1986. El Gobierno español asumió el desafío de su falta de experiencia sobre el terreno, en Bruselas, con “entusiasmo y seriedad”, según dijo el entonces presidente del Gobierno Felipe González. El principal hito de ese “primer” semestre fue la decisión de los líderes europeos de dar el pistoletazo de salida a la Unión Económica y Monetaria que llevaría doce años después a la creación del euro. También se adoptaron tres directivas sobre seguridad laboral, se cerró un acuerdo sobre los precios agrícolas, el programa Lingua, se lanzó el primer programa forestal y la idea de la cohesión económica y social que posteriormente daría lugar a la creación de los fondos de cohesión para compensar las diferentes entre los países más ricos y pobres.

2. 1995: Unión por el mediterráneo

Con Felipe González todavía al frente del Gobierno aunque ya más debilitado políticamente (perdió las elecciones generales en marzo de 1996), España volvió a asumir la presidencia de la UE, por segunda vez en su historia, durante el segundo semestre de 1995. Para entonces se habían incorporado otros tres miembros al club -Austria, Suecia y Finlandia- y acababa de entrar en funcionamiento uno de los grandes logros de la construcción europea como ha sido el espacio de libre circulación de Schengen que ha permitido la retirada de controles en asl fronteras interiores y la libre circulación de personas y mercancías. Entre los grandes logros figura el acuerdo, en la cumbre celebrada en Madrid en diciembre de 1995, para bautizar a la moneda común como “euro”, reemplazando al llamado ECU (European Currency Unit). También se firmó la Declaración de Barcelona que sentó las bases a la Unión por el Mediterráneo.

3. 2002: el euro cobra vida

El 1 de enero de 2002, el mismo día en que España asumía su tercera presidencia de la historia, con el ex presidente del PP José María Aznar a la cabeza, el euro hacía entrada en sociedad. Ese día la moneda común empezó a circular en una docena de Estados miembros en los que convivió durante unos meses junto con sus respectivas monedas nacionales como la peseta. Fue además una presidencia muy marcada por los atentados terroristas del 11-S en Estados Unidos y la crisis en materia de seguridad que llevaron a la adopción de medidas como la decisión marco sobre la orden eropea de detención y entrega (euroorden), que sustituyó al anterior sistema de extradición, o la constitución de Eurojust, el órgano de cooperación judicial. También marcó el semestre el proceso de ampliación de la UE hacia el este de Europa, complicada por la negociación de la reforma de la PAC. Aznar también incluyó entre las prioridades de su agenda semestran la inmigración y planteó por primera vez la necesidad de elaborar un plan europeo contra la inmigración ilegal con acuerdos de readmisión y una gestión migratoria.

4. 2010: Nueva arquitectura institucional

La última vez en la que España asumió las riendas de la UE fue con el socialista José Luis Rodríguez Zapatero al frente del gobierno, el 1 de enero de 2010, cuya presidencia fue recibida por la revista ‘The Economist’ con un elocuente titular: “España ahora lidera la Unión Europeapero no con el ejemplo”. Fueron seis meses con un objetivo principal: impulsar la reactivación económica e impulsar la salida de la crisis financiera y económica en la que estaban sumidos los Estados miembros pero a base de recortes y drásticas medidas de ahorro. Fue bajo la presidencia española cuando se acordó, ante la sombra de la suspensión de pagos, el rescate de Grecia que dio el pistoletazo de salida a los rescates posteriores de Irlanda, Portugal, España y Chipre. El semestre de 'Zapatero' fue también el de una presidencia de “transición” ya que coincidió con la entrada en vigor del Tratado de Lisboa que dio un vuelco al funcionamiento de las instituciones europeas y dio más poder de codecisión al Parlamento Europeo. El Tratado creó además nuevas figuras como la del presidente permanente del Consejo Europeo y de alto representante para la política exterior de la UE, dos cargos para los que fueron elegidos el belga Herman van Rompuy y la británica Catherine Ashton, que puso en marcha un nuevo engranaje de cohabitación.