¿Se te han puesto blandas las zanahorias? No las tires aún

Las zanahorias contienen muchos nutrientes para nuestro cuerpo. Son unas hortalizas que aportan una gran cantidad de beneficios. Son ricas en fósforo y otros nutrientes esenciales, mejoran la vista y tienen un alto contenido de fibra dietética, lo que promueve la salud digestiva y ayuda a mantener niveles de azúcar en la sangre estables.

Asimismo, estas verduras ofrecen una amplia gama de posibilidades culinarias. Pueden disfrutarse crudas, en ensaladas o como bocadillos saludables. También se pueden cocinar al vapor, hervir, asar o saltear, lo que las convierte en una adición sabrosa y nutritiva a sopas, guisos, salteados y platos de acompañamiento.

Además, se pueden usar en la preparación de pasteles, panes, batidos y jugos, agregando un toque de dulzura natural y un color vibrante a las recetas. La versatilidad de las zanahorias las convierte en un ingrediente esencial en la cocina, ofreciendo un sabor único y agradable junto con sus beneficios nutricionales.

¿Cómo recuperar una zanahoria que se ha puesto blanda?

Las zanahorias suelen aguantar bastante tiempo antes de ponerse malas, pero nada es para siempre. Acaba llegando un momento en el que empiezan a dejar de estar tersas y van perdiendo el color. Cuando esto pasa, la reacción habitual es querer tirarlas, pero no debería ser así.

Y es que, por suerte, existen algunos trucos que puedes probar para intentar revivir zanahorias que se han vuelto blandas. Aunque estos métodos no siempre garantizan resultados, vale la pena intentarlos antes de descartar las zanahorias. Aquí tienes algunas sugerencias:

1. Remojo en agua fría: sumerge las zanahorias en agua fría durante aproximadamente 30 minutos. Esto puede ayudar a rehidratar las zanahorias y devolverles cierta firmeza. Luego, sécalas bien antes de usarlas.
2. Corte y remojo en agua helada: si las zanahorias están muy blandas, puedes intentar cortar las partes dañadas y sumergir los trozos en agua fría con cubitos de hielo durante unos minutos. Esto puede ayudar a refrescar y rehidratar las zanahorias.
3. Remojo en agua con sal: prepara una solución de agua fría con sal (1 cucharadita de sal por cada taza de agua) y sumerge las zanahorias en ella durante unos minutos. Esto puede ayudar a restaurar la textura de las zanahorias y hacerlas más firmes.
4. Cocinar las zanahorias: si las zanahorias están demasiado blandas para comer crudas, puedes intentar cocinarlas. Cocinar las zanahorias en sopas, guisos o salteados puede ayudar a mejorar su textura y sabor.