CASA REAL

Estos son los actos que el Rey podrá delegar en su hija Leonor

A partir de este martes la vida de Leonor estará determinada por el deber y por unas obligaciones ajenas al resto de españoles

La princesa con más 'mili' de Europa

Leonor jura el martes la Constitución y se prepara para heredar el trono

La princesa de Asturias, Leonor y el rey Felipe VI, este jueves en el desfile del Día de la Fiesta Nacional en Madrid, presidido por los reyes, en el que participan 4.177 militares, 86 aviones y helicópteros y 142 vehículos terrestres.

La princesa de Asturias, Leonor y el rey Felipe VI, este jueves en el desfile del Día de la Fiesta Nacional en Madrid, presidido por los reyes, en el que participan 4.177 militares, 86 aviones y helicópteros y 142 vehículos terrestres. / EFE/ Daniel González

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Leonor de Borbón y Ortiz será la protagonista de este martes 31 de octubre no sólo por cumplir la mayoría de edad, sino también porque a partir de este momento toda acción de la princesa de Asturias tendrá una trascendencia institucional. La princesa Leonor al cumplir los 18 años jurará la Constitución ante las Cortes Generales, al igual que hizo su padre, Felipe VI, hace 37 años y automáticamente comenzará a asumir una mayor responsabilidad y con ello, a hacerse cargo el desempleo de nuevas funciones.

Más allá de la ceremonia el juramento de la princesa y su renuncia a la minoría de edad para darle la bienvenida a la edad adulta van añadidos de una dimensión jurídica de gran importancia, según confirman los catedráticos de Derecho Constitucional.

La Constitución señala que la figura del rey es el símbolo de la unidad y permanencia del Estado, arbitra y modera el funcionamiento de las instituciones y asume la más alta representación del Estado español en las relaciones internacionales, especialmente con las naciones de su comunidad histórica. De tal modo que las funciones que le atribuye expresamente la Constitución son:

  • Sancionar y promulgar las leyes
  • Convocar y disolver las Cortes Generales y convocar elecciones en los términos previstos en la Constitución
  • Convocar referéndum en los casos previstos en la Constitución
  • Proponer el candidato a presidente del Gobierno y, en su caso, nombrarlo, así como poner fin a sus funciones en los términos previstos en la Constitución
  • Nombrar y separar a los miembros del Gobierno, a propuesta de su presidente
  • Expedir los decretos acordados en el Consejo de Ministros, conferir los empleos civiles y militares y conceder honores y distinciones con arreglo a las leyes
  • Ser informado de los asuntos de Estado y presidir, a estos efectos, las sesiones del Consejo de Ministros, cuando lo estime oportuno, a petición del presidente del Gobierno
  • El mando supremo de las Fuerzas Armadas
  • Ejercer el derecho de gracia con arreglo a la ley, que no podrá autorizar indultos generales
  • El Alto Patronazgo de las Reales Academias
  • Acreditar a los embajadores y otros representantes diplomáticos.
  • Manifestar el consentimiento del Estado para obligarse internacionalmente por medio de tratados, de conformidad con la Constitución y las leyes
  • Declarar la guerra y hacer la paz, previa autorización de las Cortes Generales

Responsabilidad e iniciativa

En este sentido, el rey podrá delegar en Leonor ciertos actos. No obstante, algunos de ellos como la firma de leyes es cometido del rey por lo que no son delegables. Recordamos que la jura es un contrato en el que Leonor se compromete a ser la futura reina. Se trata de un mecanismo que se instauró para evitar que haya conflictos entre posibles herederos y para ello, al ser mayor de edad, se procede a la adquisición de una responsabilidad dentro de la institución de la Casa Real.

A partir de este martes la vida de Leonor estará determinada por el deber y por unas obligaciones ajenas al resto de españoles. Hasta la fecha sus responsabilidades se han centrado en el contexto de su familia, pero una vez jure la Carta Magna dejará de estar jurídicamente bajo la tutela de su familia y su conducta en la proyección pública deberá ir acompañada entre las ideas que tenga ella misma y el rey. Asimismo, la princesa tiene la obligación de mantener una posición neutral en el marco de la Constitución española, según dicen los expertos en materia de Relaciones Internacionales.