TENSIÓN ENTRE CLUBES

Nueva crisis entre Madrid y Barça: Florentino no tiene ganas de ver a Laporta

El presidente blanco no acudirá al palco de Montjuic el sábado tras el tuit en el que un directivo blaugrana cargó contra Vinicius

Florentino Pérez y Joan Laporta.

Florentino Pérez y Joan Laporta.

Marcos López

Ya son dos negativas. Y en un mismo año. Florentino Pérez no quiso venir al Camp Nou (marzo 2023), entonces escarmentado como andaba el Madrid por el caso Negreira, donde se presentó incluso como acusación particular, lo que enervó al Barça. Y ahora (octubre 2023), el presidente blanco tampoco quiere visitar Montjuïc argumentando que el tuit de Mikel Camps, portavoz adjunto de la directiva azulgrana, contra Vinicius no era tolerable.

Además, el silencio posterior de la junta de Joan Laporta ha enfadado todavía más al presidente blanco. Prefiere, por lo tanto, Florentino quedarse en casa, mientras envía, eso sí, una delegación del club blanco a través de la figura de Eduardo Fernández de Blas. nuevo vicepresidente.

No quiere visitar Florentino la casa de alquiler que habita Laporta, el autor de la frase del "madridismo sociológico" que ha dinamitado las relaciones al fusionarse con las críticas a Vinicius, tótem de la lucha contra el racismo que exhibe y pregona Florentino.

Socios en la intimidad

Madrid y Barça tejen, con el paso de los años, una curiosa relación, que se va envenenando. Al menos, en público. Aunque, en realidad, son Florentino y Laporta quienes se entienden mejor de lo que parece en los despachos, pero no fuera.

En la intimidad se entienden, más de lo que parece públicamente cuando muestran posturas divergentes. Es el segundo plantón que recibe el presidente azulgrana de su colega madridista en los siete últimos meses. Laporta sí va al reluciente Bernabéu; Florentino, en cambio, no pisó el viejo y ya derruido Camp Nou. Ni tampoco estará este sábado en Montjuïc.

Cuando no es el caso Negreira es el tuit de Mikel Camps, un directivo cuyo dedo rápido en activar sus mensajes en Twitter ha abierto una nueva crisis entre Barça y Madrid. Crisis que resulta recurrente entre las dos instituciones más poderosas de la Liga española, motores industriales y mediáticos envueltos en varias causas comunes.

Aliados en la Superliga europea

Para empezar, son socios en el proyecto de la Superliga que debía romper las estructuras del fútbol europeo. Socios fieles porque resisten todo, incluido el abandono prematuro de los gigantes ingleses (Manchester City, Manchester United, Liverpool, Arsenal y Tottenham) y resisten juntos, pese a que la Juventus de Agnelli, el único aliado que les quedaba.

Ambos clubs comparten los mismos aliados (Sixth Street y Legends) para la explotación comercial del nuevo Camp Nou y el nuevo Bernabéu

Han ido cayendo, uno a uno, todos los equipos que enarbolaban esta vía del cambio donde aún creen Madrid, lo lidera Florentino, y Barça, le sigue Laporta. No es el único nexo de unión entre ambos dirigentes. Ni mucho menos. El 30% de la explotación comercial del nuevo Bernabéu se ha encomendado a Legends y Sixth Street a cambio de recibir una aportación de 360 millones de euros durante 20 años.

Ese acuerdo fue firmado en el estadio blanco en mayo de 2022. ¿Quién explotará el nuevo Camp Nou, cuya primera fase de obras debe concluirse en noviembre de 2024, aunque sea al 60% de su aforo? Pues, sí. Sixth Street y Legends. Acuerdo firmado en junio 2022, un mes después del suscrito por Florentino. No solo eso.

Sixth Street, el fondo de inversión norteamericano, se convirtió en la primera palanca activada por Laporta al abonar 207,5 millones de euros por el 10% de los derechos de televisión durante los próximos 25 años. Luego (julio 2022), vendió el 15% restante a Sixth Street en lo que era la segunda palanca recibiendo 315 millones adicionales más.

Pero todo se torció con el estallido del caso Negreira cuando una información de SER-Catalunya desveló que el Barça estuvo pagando al exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA) durante casi 18 años abarcando los mandatos de Gaspart, Reyna, Laporta, Rosell y Bartomeu, quienes han escenificado con una cena (sin imagen gráfica alguna) la "cohesión" del barcelonismo.

Disculpas de Rafa Yuste

Al principio, el Madrid guardó silencio. Pero luego, y ante la presión de su afición, Florentino tomó la decisión de personarse como acusación particular, además de visualizar su distanciamiento de Laporta con su negativa de ir al palco del Camp Nou. Negativa que ha repetido ahora, a pesar de que en principio tenía previsto acudir a Montjuïc.

"Si me está oyendo Vinícius Jr: lo de Mikel Camps es un tuit desafortunado y no se va a volver a repetir"

Rafa Yuste

— Vicepresidente deportivo Barça

Pero escribió Camps aquel mensaje ("no es racismo, se merece una colleja por payaso y vacilón, qué representan esas bicicletas innecesarias y sin sentido en el medio del campo"), que borró casi de forma inmediata al comprobar la magnitud que estaba adquiriendo. "Si lo ha borrado nos quedamos con eso. Todo lo que genere tensión no me gusta. Ni que se condicione a los árbitros ni este tuit. No seré yo quien genere tensión", ha afirmado Xavi.

Pero ya era tarde, por mucho que Rafa Yuste, el vicepresidente deportivo azulgrana, matizara el contenido del mismo en una entrevista concedida a Movistar+. "Si me oye Vínicius, lo del tuit no se va a volver a repetir por parte de mi compañero Mikel Camps ni de ningún otro directivo. Aunque sea un desliz, no se tiene que hacer", ha argumentado el dirigente calificando de "desafortunado" el tuit de su colega de junta.

Encendió Camps la mecha del divorcio. Un divorcio entre Barça y Madrid, que se hace todavía más visible porque esa postura común que mantenían contra Javier Tebas, presidente de LaLiga, se ha agrietado en las últimas semanas. El club blanco sigue enfrentado a Tebas; el azulgrana, por ajustarse al fair play salarial, se ha acercado a este.

Aunque Florentino, por una razón u otra, no tiene ganas de volver a ver a Laporta, por muy bien que se lleven en privado. Los negocios son una cosa; las apariencias, otra.