Blackstone continúa desinvirtiendo en España: vende más de 1.000 inmuebles por 197 millones en 2023

Blackstone continúa desinvirtiendo su cartera de activos residenciales en España. Las diferentes filiales del fondo norteamericano en España cerraron la venta de más de 1.000 inmuebles el pasado año por un precio superior a los 197 millones de euros, según se desprende en las cuentas de las tres compañías propietarias de viviendas, Testa Homes, Fidere Patrimonio y Albirana Properties, consultadas por este periódico.

La gestora norteamericana es el mayor casero de España, por delante de CaixaBank, tras comprar numerosas carteras de inmuebles entre los años 2014 y 2019, las cuales ha ido vendiendo parcialmente en el mercado de forma unitaria en los últimos años. A cierre de 2023, las diferentes filiales tenían en su balance 17.168 viviendas, con un valor superior a los 4.060 millones de euros: 9.743 en Testa Homes, 5.410 en Fidere y 2.015 en Albirana. El alquiler de viviendas es solo una de las patas de inversión de Blackstone en el país, que convive con sus otras dos actividades, la división de compras de carteras de deuda (NPL's y REO's), que adquirió el 51% del 'ladrillo tóxico' de Banco Popular o la cartera hipotecaria de Catalunya Banc, y los fondos de inversión paneuropeos, los cuales también tienen presencia en territorio nacional.

La principal empresa dedicada al alquiler de viviendas es Testa Homes, antigua filial inmobiliaria de Sacyr, comprada por Blackstone a Banco Santander, BBVA, Acciona y Merlin Properties en 2019. Testa cuenta, a cierre de 2023, con 9.743 viviendas y 262 locales valorados en 2.723,7 millones, tras haber vendido 617 pisos no estratégicos durante el último año por 128,63 millones, asumiendo unas pérdidas, con respecto al valor contable de estos activos, de 4,44 millones de euros. La participada del fondo norteamericano aminoró sus desinversiones, con respecto a 2022, cuando vendió activos no estratégicos por valor de 216,68 millones de euros.

Con el dinero obtenido de estas ventas, la empresa amortizó deudas por valor de 101,7 millones correspondientes a varias líneas de financiación. Adicionalmente, con un préstamo de 231,9 millones concedido por Blackstone, se cancelaron otros 179,8 millones, que le permitieron alargar los vencimientos de toda su deuda: en diciembre, Testa cerró la refinananción de todo su pasivo con la firma de un préstamo sindicado de 1.415 millones. Esta deuda se sitúa, una vez más en situación de cash trap, la cual obliga a la empresa a retener todos los ingresos que obtenga de la venta de activos para cancelar pasivos.

Fidere y Albirana

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Las otras de dos compañías propietarias de viviendas de Blackstone son Albirana y Fidere, esta última popularmente conocida por ser la compradora de 1.800 pisos de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo de Madrid, una operación muy controvertida, pero completamente legal, tal y como sentenció la Audiencia Provincial de Madrid en 2022. Fidere, en los últimos doce meses, únicamente se desprendió de inmuebles por valor de 1,19 millones, obteniendo un beneficio de 768.683 euros, frente a los 116,08 millones obtenidos por desinversiones en 2022. A cierre de 2023, esta filial suma 5.410 viviendas, el 94,2% en alquiler. La compañía, al igual que Testa, refinanció su deuda en 2023, obteniendo un crédito de 440 millones de euros de Crédit Agricole, BNP Paribas y CitiBank.

Por su parte, Albirana es la que más está avanzada en la puesta en valor de los activos. En 2023, cerró la venta de 486 inmuebles por 67,85 millones, obteniendo un beneficio de 13,73 millones; mientras, en 2022, hizo lo mismo con 542 unidades por los que recibió 69,92 millones, logrando unas plusvalías de 9,86 millones. La gestión de estos activos y su puesta en el mercado está en manos de Anticipa, la compañía de gestión de Blackstone. Según las cuentas anuales de la sociedad, Albirana tiene en la actualidad 2.015 viviendas, 1.467 de ellas alquiladas, frente a las 3.124 que tenía a finales de 2022.