IRPF

Las motos eléctricas desgravan en la declaración de la renta

La campaña incluye como novedad la deducción del 15% en el IRPF por la compra de un vehículo eléctrico

Los conductores que hayan comprado una moto eléctrica pueden deducirse un 15% del valor de compra.

Los conductores que hayan comprado una moto eléctrica pueden deducirse un 15% del valor de compra.

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P. G.

Este miércoles 3 de abril arranca la campaña de la declaración de la renta para aquellos contribuyentes que opten por presentarla a través de Internet.

Entre las novedades de esta campaña figura una nueva deducción para la compra de vehículos eléctricos y la instalación de postes de recarga, la ampliación de la deducción de maternidad o la extensión de la deducción para actuaciones de eficiencia energética en viviendas.

En el caso de los vehículos eléctricos, aquellos contribuyentes que hayan matriculado un coche o una moto no vinculados a una actividad económica en 2023 podrán deducirse el 15% del valor de compra, incluidos gastos e impuestos y excluyendo los importes de las ayudas públicas que hayan podido percibir por la compra. Eso sí, hay una base máxima de 20.000 euros.

Es decir, si el comprador ha obtenido la ayuda pública del Plan MOVES III, que es compatible, esta deducción del 15% se ve amortiguada al tener que tributar por otro lado dicha ayuda. 

De hecho, la tributación no está vinculada a la recepción efectiva de la ayuda del MOVES, por lo que habrá compradores que tengan que rendir cuentas a Hacienda antes que tener en su bolsillo el dinero que le corresponde como beneficiario del plan.

La marca española Velca estima que los compradores de una moto eléctrica podrían deducirse 675 euros, tomando como referencia un precio de 4.500 euros.

Los plazos de compra son importantes

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No obstante, Velca insiste en la importancia de leer la letra pequeña de esta medida fiscal para que el contribuyente sepa si puede o no acogerse a la deducción. "El conductor podrá disfrutar de ella siempre y cuando haya abonado al menos el 25% del precio antes de que termine 2024, lo que penaliza a las compras que se hagan en el último tramo del año, o bien obliga a amortizar una mayor cantidad antes de que éste concluya", apuntan desde la firma española.

"El otro requisito es terminar de pagar el vehículo en 2026, lo que beneficia a rentas altas, es decir, las que pueden permitirse dar una entrada más cuantiosa", comentan.