Automoción

Ford Almussafes, la planta española de coches que más producción pierde en 2023

La fabricación de vehículos en la factoría valenciana cae un 10,57 % el año pasado frente al aumento medio del sector en España del 10,95 %

Salida de trabajadores de la factoría de Almussafes en un cambio de turno.

Salida de trabajadores de la factoría de Almussafes en un cambio de turno. / FRANCISCO CALABUIG

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Ramón Ferrando

Ford Almussafes es la factoría de automóviles española que más producción perdió en 2023 con un recorte del 10,57 % y cerca de 26.000 vehículos menos. Los datos de la planta valenciana contrastan con los del resto de factorías de automóviles de España que el año pasado aumentaron de media su producción un 10,95 % una vez que se superó la crisis de los microchips. La factoría española de Ford perdió el año pasado dos de sus cuatro modelos (el S-Max y el Galaxy) y se prepara para decir adiós a la Transit antes de que acabe este primer cuatrimestre de 2024, situación que ha generado la incertidumbre en los trabajadores ante la falta de carga de trabajo.

España recuperó el año pasado el octavo puesto como productor mundial de automóviles después de que las factorías ensamblaran 2.462.604 unidades (un 10,95 % más), según un informe realizado por el medio especializado 'La Tribuna de la Automoción'. Ocho de las factorías españolas aumentaron la producción el año pasado y tres la rebajaron: Ford Almussafes (-10,57 %), Volkswagen Navarra (-5,2 %) y Stellantis Zaragoza (-1,81 %).

Crisis de los microchips

Almussafes produjo el año pasado cerca de 220.000 vehículos. Es el segundo peor año productivo de la planta española de las tres últimas décadas (el peor fue 2021 por la crisis de microchips). El dato del año pasado es un 10,57 % inferior al de 2022, cuando la compañía estadounidense produjo en sus instalaciones de Almussafes 245.560 vehículos. Y no solo eso. Está considerablemente alejada de los datos prepandemia (en 2019 se produjeron 345.560 unidades en la factoría valenciana) y de la buena evolución de la mayoría de los centros de producción de automóviles de España. La fabricación de vehículos aumentó un 35,7 % en la planta de Setellantis Vigo (con 531.732 unidades), un 30 % en Renault Palencia (con 130.000) y un 29 % en Stellantis Madrid (105.830), según el informe.

A la espera de los eléctricos

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A falta de la llegada de los vehículos eléctricos, el único modelo superviviente confirmado a día de hoy en la factoría de Almussafes es el Kuga, un automóvil que representa dos de cada tres unidades producidas, pero cuyas ventas no están siendo tan solventes como lo fueron las de otros modelos estrella de épocas pasadas como el Fiesta o el Focus. El pasado mes de abril dijeron adiós el S-Max y el Galaxy y en pocos meses dejará de fabricarse la Transit. O lo que es lo mismo, una furgoneta que en el pasado 2023 supuso 65.299 de las 219.594 unidades fabricadas en Almussafes (cerca del 30 %).

Dependencia del Kuga

El pasado 22 de diciembre, las líneas de fabricación de la planta valenciana dieron el adiós definitivo a la versión americana de la Transit Connect, el inicio del camino que conducirá en abril al fin de la producción de su homónima para el mercado europeo. La factoría de Almussafes ha producido más de 950.000 unidades de la Transit desde 2013. A partir de primavera, la fábrica se quedará con el Kuga como único modelo, una situación de producción productiva que no se veía desde hace más de cuatro décadas. Hay que remontarse hasta 1980 -cuando en la factoría triunfaba el Fiesta- para encontrar un momento en el que los empleados de la fábrica solo hacían un modelo. Un año después se sumó el Escort y tres años más tarde llegó el Orion.