MÉTODOS DE PAGO

El gasto con tarjetas repunta en los dos últimos meses tras tocar fondo en noviembre

Los pagos de los consumidores se dispararon a final de diciembre impulsados por la mejora de la confianza y el fin del descuento de 20 céntimos en los carburantes

Consumidores durante la campaña de rebajas, en Barcelona.

Consumidores durante la campaña de rebajas, en Barcelona.

4
Se lee en minutos

Tras la vuelta del verano, familias y empresas volvieron a la actividad con el corazón encogido en medio de oscuros augurios para la economía que hablaban de recesión en Europa y también en España. A partir de finales de octubre, sin embargo, los datos económicos empezaron a mostrar mejor cara de lo esperado: el precio del gas comenzó a moderarse; se alejó el riesgo de racionamiento en el consumo de energía en Europa; la factura eléctrica empezó a ceder; la inflación siguió encadenando meses a la baja y los datos de empleo volvían a mostrar su resistencia. Sin llegar a entrar en tono optimista, el índice de confianza de los consumidores españoles empezó a mejorar en noviembre y tras tocar suelo en ese mes, el gasto con tarjetas de crédito repuntó con fuerza en diciembre y ha seguido incrementado su impulso en las primeras semanas de enero.

Así se desprende del análisis construido por el servicio de estudios Caixabank Research a partir de los datos anonimizados sobre el uso de sus aparatos 'tpv' (terminal de punto de venta) en establecimientos comerciales. En septiembre, el gasto en España con tarjetas -españolas y extranjeras- aún crecía a un ritmo anual del 14%. En octubre el impulso bajó al 9% y en noviembre tocó fondo con un crecimiento del gasto del 7%. A mediados de ese mes, sin embargo, empezó a descartarse la 'catástrofe' en la economía europea y en la española. El frenazo en seco de la economía era evidente pero el miedo a la recesión empezó a desvanecerse y ello coincidió con un repunte en el gasto con tarjetas de pago: en diciembre el crecimiento se fue acelerando hasta lograr un avance del 15% en la última semana, impulsado, sin ninguna duda por el acopio de carburantes en las estaciones de servicio antes de que el día 1 de enero desapareciera la bonificación del Gobierno de 20 céntimos por litro de combustible. En particular los pagos en la categoría de 'transportes' subieron en 20% en esa semana después de haber encadenado tasas negativas desde mitad del año.

El tono de recuperación del gasto en tarjetas se ha mantenido a lo largo del mes de enero, con incrementos interanuales de hasta el 19% en la segunda semana del mes. En media el gasto en tarjetas creció el 13% en enero (frente a la media del 10% de diciembre). Aunque la comparación con el año pasado está condicionada por los efectos de la variable ómicrom del virus del covid el año pasado, la conclusión para Caixabank Research es clara: "El indicador apunta a que el consumo está resistiendo mejor de lo esperado teniendo en cuenta el complicado entorno macroeconómico en el que nos encontramos, marcado por la incertidumbre geopolítica, la elevada inflación y el aumento de los tipos de interés", se afirma en el informe Monitor de consumo publicado este viernes por el servicio de estudios. "La mejora del consumo doméstico se explica por un mayor dinamismo en los tres canales de pago: los pagos con tarjeta presenciales, los reintegros y, principalmente, el e-commerce", se subraya.

Indicador adelantado

Noticias relacionadas

El seguimiento del gasto con tarjetas de pago (de débito o de crédito) constituye un indicador adelantado que puede resultar útil para anticipar un diagnóstico sobre la coyuntura económica. El dato de crecimiento del PIB de la economía española en el primer trimestre del año se conocerá hasta el 28 de abril, cuando el Instituto Nacional de Estadística (INE) publique un primer avance del dato. Sin embargo, algunos indicadores adelantados ya sirven para ir tomando la temperatura a la actividad económica. Es el caso de los que se refieren al uso de las tarjetas de crédito o a la confianza de los agentes económicos. Los datos mensuales de afiliación a la Seguridad Social, por su parte, anticipan que "el año arrancó mejor de lo esperado", abunda Caixabank Research.

De esta suerte, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal, Airef, anticipa ahora que el Producto Interior Bruto (PIB) podría estar creciendo el 0,3% en el primer trimestre del año respecto al cuarto periodo de 2022, cuando aumentó el 0,2%. En tasa anual, el modelo de predicción de la Airef anticipa una tasa del 3% (frente al 2,7% del cuarto trimestre del año pasado). A finales de octubre, la Airef pronosticaba que la economía española iba a incurrir en recesión técnica con tasas negativas de variación del PIB en el cuarto trimestre de 2022 y primero de 2023. Ahora, se constata que la economía está en franca desaceleración, pero no tanto como se pronosticaba hace unos meses. Todos los servicios de estudio han revisado al alza sus previsiones. En media, la veintena de servicios de estudios que integran el panel de previsiones de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) sitúa ahora su previsión de crecimiento para 2023 en el 1,3%, dos décima por encima que lo que se estimaba hace dos meses.