El boom del verano de los hoteles: más clientes pero menos estancias que antes de la pandemia

El verano ha confirmado la fuerte reactivación del turismo tras el parón de la pandemia. El sector hotelero español se ha beneficiado de un boom de demanda con una avalancha de viajeros durante la temporada alta estival pero sigue sin alcanzar la recuperación total del negocio previo a la epidemia de coronavirus, ni siquiera en los tres meses de más actividad de todo el año. Este verano hubo más clientes, pero menos pernoctaciones que antes de la pandemia.

Entre julio y septiembre, los hoteles españoles registraron 124,6 millones de pernoctaciones, lo que supone un fortísimo incremento del 44% en relación al verano del año pasado (cuando sólo se alcanzaron los 86,3 millones), pero que aún está por debajo de los registros previos al covid, según los registros del último trimestre del Instituto Nacional de Estadística (INE). En concreto, los establecimientos aún consiguieron 3,1 millones de estancias menos que en el verano de 2019, cuando se alcanzaron las 127,7 millones de pernoctaciones.

Durante los tres meses de verano los hoteles concentraron 36,12 millones clientes, lo que supone elevar en 120.000 el volumen de viajeros alcanzados en 2019, apenas un 0,3% más que antes de la pandemia. En resumen, durante el boom del verano los hoteles recibieron más viajeros que antes de los estragos del covid, pero se alojaron menos noches que antes.

Una de las razones de la caída global de la duración de las estancias durante el verano, según apuntan fuentes hoteleras, es el mayor peso que tiene ahora en el conjunto del negocio del sector el cliente nacional, que realiza de media viajes de menor duración que los viajeros internacionales y más escapadas relativamente cortas. Y es que el negocio ligado al cliente nacional sí supera claramente los niveles prepandemia tanto en viajeros como en pernoctaciones, pero no compensa el descenso de la actividad que aún acumula el segmento de los viajeros extranjeros.

Los hoteles registraron en julio, agosto y septiembre un total de 45,8 millones de pernoctaciones realizadas por 17,7 millones de clientes españoles, lo que supone incrementos de casi 1,3 millones de estancias y de casi 1,4 millones de viajeros nacionales en relación a los niveles del último verano precovid. Sin embargo, en el caso de los clientes internacionales, los establecimientos aún registraron este verano casi 4,5 millones de pernoctaciones menos y 750.000 viajeros foráneos menos que antes del covid (hasta quedarse en 78,7 millones de noches y 18,4 millones de clientes internacionales este verano).

Alza de precios

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Al calor de la reactivación, los hoteles españoles están consiguiendo subir sus tarifas por la mayor demanda y empujados también por el alza de los costes provocada por la escalada de la inflación. Los establecimientos hoteleros subieron sus precios en septiembre un 14% en relación al mismo mes del año pasado, hasta alcanzar unos ingresos medios por cada habitación ocupada de 107,2 euros por noche. El sector ya supera con holgura los precios que 94,2 euros, casi un 14% por debajo del nivel actual.

Un indicador clave en el sector turístico para medir la evolución real del negocio y de la rentabilidad es el ingreso por habitación disponible (RevPar), que sirve para calibrar tanto precios como ocupación. Los hoteles españoles elevaron su RevPar en septiembre hasta los 79, euros, con lo que consiguen elevar un 10% el nivel del 2019 prepandemia y consigue la mayor cota de toda la serie histórica del INE, que arranca en 2008.