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Black Alien dice adiós a su proyecto: "Ya no quiero tocar mi cuerpo, ni quitar ni poner nada"

El joven francés ha estado varios años modificando su cuerpo a niveles extremos para parecerse a un alienígena, pero ahora cree que "ha perdido su sentido"

Anthony Loffredo, conocido como Black Alien, en Barcelona en 2021.

Anthony Loffredo, conocido como Black Alien, en Barcelona en 2021. / JORDI OTIX

Anthony Loffredo es influencer, acumula más de 1,5 millones de seguidores en Instagram y su último paso ha sido intentar dar el salto a la plataforma erótica OnlyFans. Hasta aquí, un perfil cada vez más común en las redes sociales, aunque en este caso hay una serie de características que le alejan del resto: una lengua bífída y de colores, tatuajes hasta en los ojos, nariz y orejas cortadas a ras de piel, implantes en la cara e incluso algunos dedos amputados en sus manos.

Todo ello con el cuerpo casi completamente cubierto por tatuajes y cicatrices. Y es que Loffredo es el joven francés tras The Black Alien Project, una de las ideas más extremas que han triunfado en las redes sociales. En resumen, el objetivo era transformar su cuerpo mediante todo tipo de modificaciones, implantes o amputaciones para convertirse en algo similar a un alienígena.

Una idea que ha puesto en marcha durante los últimos años, llegando a trasladar su residencia a México para someterse a operaciones quirúrgicas clandestinas a las que no podría acceder en otros países, como amputarse dedos de las manos. A mediados de 2022 dejó caer que un "sueño" para continuar la evolución de su proyecto sería "quitar" una de sus piernas, pero no siguió adelante con ello. "Para mí esto no es mutilar. Para mí es una evolución. Es mi evolución. Para mí es algo… estético. Porque al final, yo me encuentro mejor", aseguraba en una entrevista con El Periódico de Catalunya en 2021. 

Dos años después, con el proyecto al 65% según el progreso que publica en su Instagram, The Black Alien ha decidido poner fin a estos cambios corporales. Considera que este proyecto "ha perdido su sentido con el paso de los años, no esperaba que tuviera tanto impacto en el mundo como para ser conocido y no supe gestionarlo".

"Ya no quiero tocar mi cuerpo, ni quitar ni poner nada. Estoy poniendo fin a la modificación de mi cuerpo [...] ya no me gusta este mundo, voy a terminar mi full black [cubrir todo el cuerpo con tatuaje oscuro] y terminar por el momento así. Adiós modificación corporal", ha explicado en una publicación.

En otros mensajes recientes en sus redes sociales había comentado algunas dificultades que le supone su aspecto, incluso a la hora de verificar su identidad para su cuenta de Onlyfans: "Todos los intentos de análisis biómetrico fallan debido a mis modificaciones físicas". "Quiero pedir un Uber y el Uber no para, se va. En el restaurante también, no puedo entrar", contaba en un vídeo publicado hace unos meses en YouTube.

Especialistas en diferentes ámbitos preguntados por casos como el de Black Alien o la británica Lepht Anonym, que se autoinstaló 50 implantes bajo su piel para ganar ‘capacidades’, apuntaban a problemas de autoestima, necesidad de destacar o incluso dismorfia corporal, pero reseñando que hay que analizar caso por caso. 

"Son personas que no reconocen sus propios cuerpos como propios. Aquí hay personas con problemas de autoestima, que no se sienten cómodas consigo mismas y que viven una fantasía de que cambiando su aspecto exterior se sentirán de otra forma", explicaba Enric Soler, profesor de los estudios de Psicología y Educación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), en declaraciones a Faro de Vigo.

"La cuestión es compleja", opinaba una neuropsicóloga gallega que prefería no ser identificada, "cada caso debe evaluarse de forma individual, para analizar su conducta de forma exhaustiva, lo que implica identificar su morfología y, aún más importante, su funcionalidad". "No obstante, el reforzamiento social que reciban a través de redes sociales, solo incrementa la conducta y les anima a continuar haciendo lo que hacen".