IGUALDAD

Irene Montero confirma la "coordinación" de Podemos con ERC y Bildu en el 'sí es sí' para presionar a Sánchez

La ministra de Igualdad ensalza la alianza con los partidos nacionalistas, una estrategia opuesta a la de Yolanda Díaz

Irene Montero, en los pasillos del Congreso.

Irene Montero, en los pasillos del Congreso. / EFE

Podemos se alinea con ERC y EH Bildu y presenta enmiendas a la reforma presentada en solitario por el PSOE a la Ley de Garantía Sexual de Libertad Sexual, la llamada ley del sí es sí. La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha defendido "coordinación" del partido morado con los partidos nacionalistas para evitar el "retroceso" en los derechos de las mujeres que se produciría con la iniciativa, que ya se admitió a trámite con los votos de PSOE y PP y que se aprobará en el Congreso de los Diputados el día 20 de abril.

El socio minoritario de coalición ha apurado los plazos para presentar las enmiendas parciales a la reforma, y lo ha hecho después de que el viernes ERC y EH Bildu hicieran lo propio, con una batería de modificaciones que desmontaban la propuesta del PSOE en esta materia. La titular de Igualdad ha defendido este martes en una entrevista en TVE que las enmiendas moradas irán el mismo sentido de las formaciones nacionalistas, y que la alianza estratégica con estas fuerzas va encaminada a "hacer reflexionar al PSOE" para que se avenga a un acuerdo y dé marcha atrás en su reforma.

"El tipo de enmiendas que vamos a plantear van en línea con las que ERC y EH Bildu han planteado", ha asegurado Irene Montero, que ha ensalzado la alianza entre Podemos y las fuerzas nacionalistas. Esta estrategia es uno de los puntos que más discrepancias generan entre Podemos y la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, que es partidaria de marcar distancias con estos partidos. "La mayoría de investidura, que es plurinacional y progresista, pero sobre todo feminista, sabemos que hay que dar una respuesta coordinada", ha advertido Montero.

Gabriel Rufián.

Gabriel Rufián. / efe

"Vamos a hacer propuestas, dentro de la autonomía de cada formación, pero todas en la misma línea", ha adelantado la titular de Igualdad, que ha mostrado su intención de que la unidad de acción "sirva para avanzar y no para retroceder en derechos de las mujeres".

Sin especificar los detalles de las enmiendas, que se registrarán este lunes en el Congreso de los Diputados, ha insistido en que "tenemos claro que el consentimiento tiene que seguir en el centro". En este punto, ha asegurado que "es imposible creer que una reforma pactada entre PSOE y PP es una reforma feminista". 

Montero ha confirmado que no han existido nuevas conversaciones con el partido de Pedro Sánchez en esta materia. "Nosotras no nos hemos levantado de la mesa y siempre le hemos pedido que vuelva a sentarse al PSOE, que es quien se levantó y presento de forma unilateral esa reforma que se está tramitando". "Creemos que estas enmiendas tiene que ser una oportunidad para que el PSOE se lo piense".

"RETRÓGRADO Y MACHISTA"

La coportavoz de Podemos, Isa Serra, también se ha pronunciado sobre este punto en la rueda de prensa habitual de los lunes, donde ha insistido en que "la propuesta del PSOE es una vuelta al modelo anterior", y en que su propuesta va encaminada a "mantener el paradigma basado en el consentimiento". "Antes las pregunta era si te resististe y ahora con la ley del sólo sÍ es sí, la pregunta es si consentiste", ha continuado la también asesora en el Ministerio de Igualdad. 

La dirigente ha criticado que la propuesta de los socialistas, a su juicio, sitúa la responsabilidad de la agresión en la víctima. "Cuando la mayoría de las mujeres se quedan paralizadas ante una agresión sexual, esto no puede suponer una penalización para las mujeres", ha reprochado. "Hay que poner el foco en los agresores. Al poner la responsabilidad en las víctimas estamos reproduciendo el modelo anterior", ha defendido Serra, que ha definido como "retrógrado y machista" este modelo.

LAS ENMIENDAS

El bloque argumental y penal que forman Unidas Podemos, ERC y EH Bildu aboca al PSOE de Pedro Sánchez a apoyarse en el PP si quiere que su proposición salga como está redactada, o al menos, manteniendo su núcleo central.

Socialistas y populares coinciden en la apuesta por graduar la pena en los delitos de agresión sexual en función de si hay violencia, intimidación o anulación de la voluntad, incorporando tales factores como subtipos penales. Esta circunstancia permitiría acotar las penas en función de la gravedad, defienden desde el PSOE, para reducir la discrecionalidad y evitar penas desproporcionadas. Podemos, en cambio, quiere que estas circunstancias sean agravantes, un aspecto que comparten EH Bildu y ERC, tal como reflejan en sus propuestas de modificación.

En las enmiendas presentadas por los independentistas catalanes y vascos, piden por mantener una pena de 2 a 8 años por agresión sexual y de 7 a 15 por violación “cuando para la comisión de la agresión sexual se hubiera empleado violencia o intimidación, o la misma vaya acompañada de actos que revistan carácter particularmente degradante o vejatorio”, según especifican en el texto.