CASO DE LOS ERE DE ANDALUCÍA

La cárcel de Sevilla avisa de que "faltan médicos" al valorar el ingreso en prisión de Griñán

El informe alerta de que no existen problemas para trasladar los reclusos a las distintas consultas programadas en los hospitales de Sevilla

Archivo - El ex-presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán

Archivo - El ex-presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán / María José López - Europa Press - Archivo

La Audiencia de Sevilla ha dado cuenta de una documentación emitida por el Centro Penitenciario de Sevilla en torno a la petición del expresidente de la Junta de Andalucía José Antonio Griñán de suspender la ejecución de su pena de seis años y dos días de prisión por malversación en el mecanismo de financiación de los expedientes de regulación de empleo (ERE) fraudulentos, el llamado caso ERE, debido al cáncer de próstata que le ha sido diagnosticado; habilitando un plazo de tres días para que la Fiscalía Anticorrupción y las acusaciones populares, entre las que figura el PP-A, formulen alegaciones.

Así figura en una nueva providencia emitida el pasado viernes por la Sección Primera de la Audiencia de Sevilla, que sigue al auto dictado el pasado 13 de enero, con el que dicha instancia acordó aplazar su decisión sobre el ingreso o no en prisión del expresidente socialista "hasta que concluyan las sesiones de radioterapia" del tratamiento que había comenzado entonces merced al cáncer de próstata que le ha sido diagnosticado.

El informe de instituciones, de cinco páginas, no es concluyente sobre la situación concreta del expresidente andaluz aunque aprovecha para señalar que “la insuficiencia de efectivos sanitarios (especialmente médicos) está generando dificultades en la asistencia sanitaria de las personas privadas de libertad”. El documento, sobre el que la Audiencia fija un plazo para las alegaciones para decidir si el expresidente entra o no en la cárcel por su condena en el caso de los ERE, repasa “los recursos humanos y materiales, organización y funcionamiento de los servicios sanitarios del centro penitenciario de Sevilla”. Hace un repaso sin aludir en ningún caso de forma expresa a la situación del expresidente de la Junta de Andalucía.

La cárcel de Sevilla, recoge el documento, tiene una población reclusa entre 650 u 700 internos distribuidos en tres unidades que disponen de cinco consultas de atención primaria, dos salas de espera, una sala de curas y un almacén de medicamentos, además de un módulo de enfermería, el otro está cerrado por obras, con capacidad para 21 pacientes. La plantilla sanitaria disponible la integran cinco médicos, una farmacéutica, ocho enfermeros, un supervisor de enfermería, cinco auxiliares y tres administrativos.

Los protocolos fijados fijan la derivación de pacientes a los hospitales y centros especializados. El documento alerta de que no existen problemas para trasladar los reclusos a las distintas consultas programadas en los hospitales de Sevilla, con la garantía de disponibilidad de la Policía Nacional para que salgan cada día cinco pacientes. Sí hay “falta de disponibilidad por parte de la Policía Nacional”, reseña el documento, y “falta de recursos” para las salidas urgentes a los hospitales.