Eroski se suma a una de las modas más repetidas en todos los centros comerciales y arrasa con este nuevo servicio

Eroski es una de las cadenas de supermercados más conocidas del país. Sobre todo, para que negarlo, en el País Vasco, en donde cuenta con una gran cuota de mercado. Además de los comercios en los que vende alimentación y productos frescos en los últimos años también se ha expandido hacia otro tipo de negocios como por ejemplo los viajes, montando varias agencias en todo el país. Eroski S. Coop es en realidad una cooperativa de la Corporación Mondragón que tiene su sede en Elorrio.

Se fundó en el año 1969 y a día de hoy, según fuentes como la Wikipedia es una de las empresas de distribución más importantes de toda España. Como muestra se puede hablar por ejemplo de un dato más que llamativo: su plantilla supera los 35.000 trabajadores que están repartidos por todo el país y que además de los hipermercados Eroski también trabajan en los supermercados de confianza y cercanía Center y City que son otras dos marcas de la misma matriz.

Hace varios meses la cadena perdió gran parte de su potencial con la venta de algunos de los supermercados que tenía en nuestro país a Carrefour. El grupo de origen francés consiguió, de esta manera, expandirse en zonas a las que hasta ese momento no llega.

Pero si algo tienen los nuevos supermercados es que cada vez tienen que innovar más. Y hacerlo de acuerdo con las necesidades del consumidor. Por eso Eroski ha empezado a abrir en muchos de sus centros comerciales (lo hemos visto sobre todo en Galicia) algunos espacios de comida ya hecha para llevar. Se trata de que el cliente ahorre tiempo y coma sano. Dos grandes preocupaciones a las que las grandes marcas han sabido poner cifras. No en vano hay ingresos millonarios detrás de las estanterías de “listo para comer”. Algo que ya vieron cadenas como Lidl o Mercadona y que ahora están probando e sitios como Eroski.

Además lo que permiten este tipo de servicios es una fidelidad del consumidor y que cuando el cliente entre por la puerta siempre encuentre una solución a sus necesidades. Y eso es cada vez más valorado entre los pequeños compradores. También permite que los clientes vayan más a menudo a comprar y que (al hacer menos comida en casa) dependan más de la marca que les da de comer.