Espectacular imagen

Este es Yingliang, el embrión de bebé-dinosaurio mejor conservado hasta la fecha

El dinosaurio que ya no nacerá jamás lleva 70 millones de años en su cáscara

Recreación del dinosaurio

Recreación del dinosaurio / Lida Xing

Ana I. Montañez

A simple vista, parece el esqueleto de un pájaro dentro de un huevo que no ha llegado a eclosionar. Pero lo cierto es que no es una especie aviar y, ni mucho menos, corresponde a la época actual. Es el conocido como ‘bebé Yingliang’ y se trata del mejor ejemplar de un embrión de dinosaurio terópodo oviraptórido in ovo (dentro del huevo) mejor conservado hasta la fecha.

Pertenece a la formación Hekou del Cretácico superior de China y fue encontrado en el Parque industrial Shane, en la ciudad de Ganzhou, en la provincia de Jiangxi. Gracias a su “exquisito” estado de conservación, se ha convertido en una rica fuente de información en cuanto a la anatomía y la osteología (estudio del sistema óseo) de esta especie extinguida e incluso permite generar hipótesis sobre el comportamiento del embrión previo a la eclosión, que en este caso, nunca llegó a producirse.

Imagen del esqueleto fosilizado

Imagen del esqueleto fosilizado / iScience

Según explicó una de las científicas, Fion Ma Wai-sum, al periódico hongkonés South China Morning Post en unas declaraciones recogidas por Efe, el embrión tenía unos 17 días de vida y hubiese nacido a los 21 días. No fue así y ahora este huevo de 16,7 cm de largo y 7,6 cm de ancho escrupulosamente conservado tiene alrededor de 70 millones de años.

“Este espécimen articulado es uno de los embriones más completos de dinosaurios no aviares jamás descubiertos, lo que permite un estudio anatómico detallado y una mirada sin precedentes a la osteología de un dinosaurio terópodo in ovo parecido a un pájaro, pero no aviar”, señala el artículo publicado en la revista iScience.

“Vemos que los embriones oviraptóridos parecen asumir posturas plegables similares a las de las aves, y proponemos que este comportamiento previo a la eclosión evolucionó antes del origen de los pájaros”.

La postura en que quedó fosilizada esta criatura es prácticamente idéntica a la de un polluelo listo para romper el cascarón: muy acurrucado, con la espalda curvada y plegada hacia su pecho y con la cabeza hacia abajo, cubierta a ambos lados por las patas. En las aves, estas posturas son críticas para garantizar el éxito de la eclosión y, además, están relacionadas con el control del sistema nervioso central.

Comparación con la gestación de una gallina

Imagen y dibujo del huevo / iScience

Esto sugiere al equipo de investigadores -compuesto por científicos chinos, canadienses y británicos- que lleva analizando el hallazgo durante tres años, que estos dinosaurios, pese a no ser aves, adoptaban una postura similar a la de los embriones de las especies modernas de pájaros cuando están ya en un estado de gestación tardío. Por tanto, un comportamiento que hasta ahora se asociaba con exclusividad a las aves, podría haberse originado entre los tetrápodos no avianos.

Esta muestra está registrada en el instituto público Yingliang Stone Nature History Museum y está disponible para la investigación. Los investigadores han anunciado que seguirán los análisis del ejemplar y que se incluirán otras técnicas de rayos X para ahondar en la anatomía del embrión.

El huevo fue adquirido en el año 2000 y pasó una década almacenado hasta que se comenzó a investigar con motivo de la fundación del Museo de Historia Natural de la Piedra en la ciudad suroriental china de Xiamen, de cuya colección forma parte.

Artículo de referencia: 

https://doi.org/10.1016/j.isci.2021.103516