DANIEL SANCHO

El juicio a Daniel Sancho entra en su fase decisiva con los policías y forenses que examinaron la escena del crimen

Siguen por el tribunal de Koh Samui los testigos llamados por la Fiscalía a la espera de que la próxima semana declaren los de la defensa

El actor Rodolfo Sancho, padre de Daniel.

El actor Rodolfo Sancho, padre de Daniel. / EFE

El juicio contra Daniel Sancho ha entrado en su segunda semana de las cuatro previstas con el desfile de policías y peritoscuitas entre letrados, la cuestión de la traducción aparentemente resuelta y las puertas tan cerradas a la prensa como en la primera. Ha concluido el Songkran o año nuevo budista que emplean los tailandeses en remojarse sin piedad con pistolas de agua y, tras un paréntesis de seis días, el proceso ha continuado su curso.

Siguen por el tribunal de Koh Samui los testigos llamados por la Fiscalía a la espera de que la próxima semana declaren los de la defensa. Los de la anterior (los que alquilaron la moto al acusado, vendieron cuchillos o kayaks, atendieron en los hoteles…) aportaron pocas novedades a un caso seguido con atención entomológica. Las expectativas son mayores en estos días. Son policías y peritos forenses que examinaron la habitación del hotel donde murió y fue descuartizado el cirujano colombiano Edwin Arrieta pocas horas después de haber llegado a la vecina isla de Koh Panghán.

"16 o 17 trozos"

Yuttakan Chenram, jefe de la comisaría provincial de Surat Thani, ha comparecido este miércoles en la vista oral. Meses atrás ya trascendió que, pese a la meticulosa limpieza de Sancho de la escena del crimen, los peritos encontraron restos de sangre y grasa en las cañerías de la habitación. Sancho detalló en la reconstrucción de los hechos frente a la policía cómo había descuartizado el cuerpo del finado “en 17 y 20 trozos” y abierto el chorro del agua caliente de la ducha para evitar que la sangre coagulara.

Del examen de los ocho pedazos encontrados dependerá la sentencia. Ha aparecido la cabeza, con una contusión en la nuca compatible con la muerte accidental que sostiene la defensa. El nudo gordiano es qué ocurrió antes de que Arrieta se golpeara contra el lavamanos. La puñalada que alega la policía no ha podido ser acreditada porque, a pesar de que mostró una camiseta con una incisión, el torso no ha aparecido.  

Refriegas entre letrados

No han trascendido detalles sobre las declaraciones de los peritos. El proceso sigue con el candado ordenado al inicio contra la presencia mediática española, menguada pero fragorosa. El abogado de Sancho y asiduo a los platós, Marcos García-Montes, aún no ha acudido al juicio, atareado en otras causas, mientras el representante de la familia Arrieta y suministrador de migajas informativas, Juan Gonzalo Espina, se acaba de marchar de Tailandia. Las partes desmenuzan el juicio en los medios televisivos, sin más remedio para la prensa que desbrozar sus interesadas declaraciones de lo sustancial.

La jornada dejó otra refriega gremial. García-Montes ya se enzarzó meses atrás con Fernando Oca, titular del bufete con sede en Bangkok que defendió a Sancho en los albores del proceso, hasta que fue despedido. Ahora ha embestido contra Espina, negándole la condición de parte en el proceso. Este ha aludido a los documentos oficiales que le acreditan como coacusación y su constante actividad durante la primera semana del juicio oral.

Renuncia a la traducción al español

Otra cuestión colateral, pero menos irrelevante que el ego de los letrados, es la traducción. Sancho ha renunciado a la intérprete del tailandés al español que le había ayudado en los primeros compases del juicio. La traductora atendía el proceso a distancia a través de videoconferencia y el sistema se reveló como confuso. Esta mañana ha recurrido a una intérprete del tailandés al inglés, un idioma que maneja sin problemas.

Ocurre que su defensa ha impugnado sus primeras autoinculpaciones ante la policía por la ausencia de un traductor al español y por la misma razón pidió y consiguió el retraso del inicio del proceso. La última maniobra fue calificada por fuentes jurídicas como puramente dilatoria y los hechos de esta mañana parecen darle la razón y rebatir aquellas impugnaciones.