LALIGA

El Barça estrena Montjuïc con un triunfo de persistencia ante un rocoso Cádiz

El conjunto azulgrana se adjudicó la primera victoria de la temporada gracias a los goles de Pedri y Ferran Torres

Los culés tumbaron el muro gaditano en los últimos instantes de un encuentro poco fluido. Ledesma, con una exhibición bajo palos, evitó la goleada

Fede San Emeterio disputa un balón ante Pedri.

Fede San Emeterio disputa un balón ante Pedri. / EFE/Toni Albir

Jordi Carné

Máster de paciencia y temple del FC Barcelona para sumar la primera victoria de la temporada e inaugurar el Estadi Olímpic Lluís Companys de Montjuïc con un triunfo. Después de la ‘guerra’ contra el Getafe, el Cádiz volvió a poner a prueba la inspiración, la mentalidad y el empaque del equipo de Xavi Hernández. Esta vez, el final sí que fue feliz. La primera conexión de la prometedora sociedad Gündogan-Pedri premió la insistencia barcelonista en los últimos instantes de un compromiso poco fluido. Ferran Torres remató la faena en el descuento.

Xavi tenía que tomar dos decisiones muy importantes. En primer lugar, debía encontrar un sustituto de garantías para Araujo, lesionado. La apuesta del egarense fue atrevida: volvió a ubicar a Jules Koundé en banda derecha y retrasó a Frenkie de Jong, que compartió eje de la zaga con Christensen. El gran beneficiado de este movimiento fue Gavi, que disfrutó de su primera titularidad al lado de Oriol Romeu, Gündogan y Pedri en la sala de máquinas. El míster catalán, sin embargo, aún exhibió más valentía al escoger a Lamine Yamal, un ‘chaval’ de 16 años recién cumplidos, como acompañante de Robert Lewandowski en ataque. El canterano pasó por delante de Abde, Ferran Torres y Ansu Fati en el ‘casting’ para relevar a Raphinha, sancionado.

Era el estreno de la nueva casa culé y, después de empezar la defensa del título de Liga con un empate ante el Getafe, el equipo tenía que trasladar la osadía de su entrenador al terreno de juego. Ofrecer una cara convincente frente a otro equipo rocoso, de los que solo se pueden batir con paciencia e inspiración en los últimos metros. Todo un reto tras la mejorable versión mostrada en el Coliseum Alfonso Pérez la semana pasada. El Cádiz empezó con dos tímidas aproximaciones que la retaguardia blaugrana solventó sin problemas. Fue un espejismo: el cuadro dirigido por Sergio González planteó una propuesta muy defensiva. Bloque muy bajo, pocos espacios y dominio absoluto del ‘otro fútbol’ con el beneplácito, nuevamente, de un colegiado permisivo.

Lamine Yamal, que quería vivir la gran tarde con el primer equipo que tantas veces ha soñado, fue el jugador que más estimuló a un Barça plano en la primera mitad. Los culés no fueron capaces de imponer un ritmo rápido de juego y el Cádiz vivió relativamente cómodo. Los defensas visitantes tuvieron mucho trabajo, pero poco exigente para veteranos de guerra como Fali, Luis Hernández y compañía. Un disparo lejano y desviado de Oriol Romeu, un remate suave de cabeza de Lewandowski, un mal servicio de Pedri al polaco tras un ‘caramelo’ de Lamine… Las acciones de peligro locales fueron tímidas hasta la media hora de juego. Ledesma, sin embargo, tuvo que aparecer con dos magníficas intervenciones, la primera a Yamal y la segunda a Koundé, para frustrar el primer tanto de la etapa en Montjuïc.

Ter Stegen también tuvo que realizar una aparición providencial para evitar la diana del Cádiz antes del descanso. Se hizo enorme en un mano a mano con Roger Martí y restó importancia a la grave pérdida de un impreciso Balde. El guardameta alemán demostró, por si había algún escéptico pese a su extraordinario rendimiento el curso pasado, que sigue a un nivel excelente.

Perseverancia culé

Se le hizo de noche a Lewandowski en la primera acción de la segunda mitad. Después de una nueva parada de Ledesma a Lamine Yamal, el polaco no pudo controlar el esférico dentro del área en una jugada que evidenció la falta de confianza del ariete e inició, por otra parte, la ofensiva definitiva del Barça en busca del primer triunfo de la campaña. Gavi estrelló un testarazo contra el larguero, Oriol Romeu pudo aprovechar un balón muerto en una acción de estrategia… El gol se hizo de rogar. El Cádiz reaccionó frenando el partido e intentando frustrar a los de Xavi. Y no solo lo lograron, sino que acariciaron el tanto en una excursión de Chris Ramos. Desde la grada, Xavi ordenó que Ansu Fati y Abde ingresaran al ‘verde’ para zarandear el encuentro. Para que pasaran cosas.

"Va a llegar", se pudo escuchar en la arenga del Barça durante la pausa para la hidratación de la reanudación. Ledesma desvió a córner un potente chut de Abde para dar continuidad a su exhibición particular, pero no pudo evitar la victoria local. Pedri, tras un gran pase en profundidad de Gündogan, batió al arquero argentino con una gloriosa estirada para impactar el esférico. El canario allanó el camino y, en el descuento, Ferran Torres –que había sustituido a un ovacionado Lamine Yamal– sentenció el partido con una transición letal.