El ocaso de la constructora castellonense de los 'Fórmula 1' del mar

Acontecimientos como la Copa América de vela confirmaron el movimiento económico que generan las competiciones en el mar. Un deporte que ha generado numerosas alegrías en la historia del olimpismo español. Algunas de las embarcaciones más punteras tenían como origen Castellón, gracias a la labor de una firma, Longitud Cero, que desde en año 2005 se labró un nombre en el sector.

Lamentablemente, este camino quedó truncado hace dos años, con la apertura de un procedimiento concursal, al que le ha seguido un proceso de liquidación. En estos momentos, sus naves de Castelló están sin actividad, y en proceso de subasta.

Origen

Según señala la página web de la empresa, todavía activa, "nuestra principal meta es la de fabricar barcos de regata competitivos trabajando con los más avanzados sistemas y materiales compuestos". Construía los fórmula 1 del mar. La compañía nació en Burriana, de la mano de Ximo López, que procedía de una extensa carrera en el campo de la construcción de barcos. La lista de clientes fue extensa, como también la de sus triunfos.

Uno de los más recientes fue hace tan solo unos años, cuando el barco Ichi Ban (número uno en japonés), construido en sus astilleros, se proclamó ganador de la carrera Sydney Hobart, considerada como una de las más exigentes del mundo.

Dificultades

En el 2017, la sede social cambió de Burriana a una nave de más de 2.000 metros cuadrados, ubicada en la partida Estepar de Castelló. Tan solo cuatro años más tarde, el 8 de noviembre del 2021, se publica la declaración del concurso de acreedores. Unas semanas más tarde se disuelve la sociedad, mientras que el 15 de julio del 2022 se aprobó el plan de liquidación.

López señala a este diario que "la empresa cerró porque resultaba inviable por los efectos de la pandemia" y puso en valor los logros alcanzados con la compañía con sede en Castellón, que le llevaron a ser puntera en el sector.

Ahora, las instalaciones se encuentran en proceso de subasta. Un edicto del juzgado de lo mercantil de Castellón ha dado a conocer la subasta de los bienes. Las instalaciones de Castelló salen por un precio inicial de 120.240,07 euros, aunque con cargas: una hipoteca a favor de Bankinter y sendos embargos a favor del Estado y de la Tesorería General de la Seguridad Social.

Según señala el portal de subastas encargado de esta gestión, las instalaciones se encuentran sobre un solar de 4.880 metros cuadrados, de los que se encuentran construidos 2.856, y el resto destinado a parte descubierta para ensanches y rodadura. La subasta finalizará el 20 de julio a las 12.00 horas.

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Más allá de la situación de la empresa, su impulsor, Ximo López, deja claro que continúa vinculado a la construcción de barcos de regata: "Mis conocimientos siguen estando y me siguen llamando para hacer barcos, pues la gente sabe que quien quiera uno para un campeonato me puede llamar", sostiene, detallando que se encuentra en proceso de reestructuración por el cierre de la firma.

Otros casos

No es el único caso de estas características en la provincia. La empresa azulejera Badiart se encuentra también en proceso de subasta de los bienes, el objetivo que se persigue es que haya una inversor interesado en recuperar la actividad productiva en la factoría, por lo que pone en venta sus activos inmobiliarios. Según detalla la empresa de subastas encargada de este proceso, confían en la "posibilidad de retomar la actividad azulejera en unas instalaciones "preparadas para comenzar a producir". Un hecho parecido es el de la empresa citrícola Peris Agost, de Almassora, que después del cierre de actividad tiene en marcha el proceso de subasta.