Estas son las obligaciones de las personas que cobran el paro

Actualmente, 2.739.110 personas están cobrando algún subsidio o paro en España por parte del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), según los datos publicados del mes de mayo que se han informado desde el Ministerio de Trabajo y Economía Social. Los ciudadanos que cobran esta prestación, al mismo tiempo que se benefician de esta cobertura social, deben asumir una serie de obligaciones.

El paro es un derecho reconocido a aquellas personas que pudiendo y queriendo trabajar pierden involuntariamente su empleo de forma temporal o definitiva o ven reducida de forma temporal su jornada ordinaria de trabajo entre un 10 y un 70%. Pero, pese a ser un derecho, también comporta obligaciones. En primer lugar, los perceptores del paro deben cumplir igualmente con las obligaciones fiscales, aunque ya no perciban salario y se hayan quedado en una situación legal de desempleo.

El compromiso de actividad, la 'letra pequeña' del paro

El primer paso para recibir el paro, una vez se ha producido el despido y habiendo generado el derecho a esta prestación contributiva por desempleo, es dirigirse a las oficinas de empleo para solicitarla. En ese proceso, el ciudadano asume una serie de compromisos, cuyo incumplimiento conlleva sanción. Es la 'letra pequeña' que figura en el dorso de los documentos del paro y que nadie suele leer.

Se trata del 'compromiso de actividad' que, tal y como explica el SEPE), es el compromiso que adquiere el solicitante o persona beneficiaria de las prestaciones de "buscar activamente empleo, aceptar una colocación adecuada y participar en acciones específicas de motivación, información, orientación, formación, reconversión o inserción profesional, para aumentar las posibilidades de obtener un puesto de trabajo, obligándose a cumplir todas aquellas obligaciones previstas en las normas que regulan las prestaciones por desempleo".

Rechazar un empleo puede conllevar la anulación de la prestación o una penalización temporal. Eso sí, el empleo debe ser acorde al solicitado por el demandante y con un sueldo superior al SMI estipulado.

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Pero, además de cumplir con esta obligación, el compromiso de actividad también conlleva la participación del beneficiario en "acciones específicas de motivación, información, orientación, formación, reconversión o inserción profesional", explican la web del SEPE, con el objetivo de que así aumenten sus posibilidades de conseguir un nuevo puesto de trabajo. No acogerse a este tipo de iniciativas será motivo de una sanción leve.

."No obstante", matiza el SEPE, "la participación en acciones de mejora de las posibilidades de encontrar un puesto de trabajo, será voluntaria para las personas beneficiarias de prestaciones contributivas durante los 30 primeros días en que perciben la prestación". Además, se tiene en cuenta la condición de víctima de violencia de género, "a efectos de suavizar, en caso necesario, el cumplimiento" de estas obligaciones.