GGCare: De la cosmética de la vanidad a la de la necesidad

Un equipo de cinco mujeres, liderado por Glòria García, empezó a trabajar en 2017 en una línea de cosméticos para pacientes oncológicos. García había trabajado con asesores de imagen -Lluís Llongueras, Lluís Pons, Carmen Cazcarra- con los que aterrizó en el sector. Después de 25 años diseñando productos de belleza, las últimas líneas con base de aceite de oliva, uno de los dermatólogos con los que trabajaba la empujó a elaborar juntos productos que dieran respuesta a las necesidades de las mujeres que han pasado o deben pasar por alguno de los tratamientos para curar el cáncer.

"Estas pacientes viven un proceso que les afecta mucho emocionalmente. Necesitan sentirse guapas, pero, al mismo tiempo, la piel queda muy dañada, seca, incluso quemada en ocasiones, generalmente con muchos picores que hay que tratar de aliviar en lo posible y con un envejecimiento prematuro", detalla García.

Después de dos años de estudios, asesoramiento de especialistas, testeo con pacientes oncológicos, cambios en los principios activos para ser más efectivos y una inversión de 300.000 euros, en la primavera de 2019 nació GGcare, "una línea cosmética que pasa de la vanidad de sentirse guapa a la necesidad de aliviar y sentirse bien", explica su fundadora.

La producción se lleva a cabo desde Molins de Rei donde se ubica Laboratorios Coper, que realizan la mezcla y el envasado de los productos. "Escoger un buen partner ha sido fundamental para el proyecto", afirma la empresaria.

La llegada de la pandemia de coronavirus en marzo de 2020, semanas después de su puesta en funcionamiento, no facilitó el arranque. Pero poco a poco fueron abriendo mercado en hospitales y clínicas. Con el tiempo han comprobado que las propiedades de sus productos son efectivas para otras afecciones como psoriasis, cicatrices, pieles atópicas e incluso sequedad vaginal.

Activos probióticos

Noticias relacionadas

Una ingeniera de cosmética de lujo

Revolución cosmética a golpe de clic

De hecho, García indica que, en estos momentos, están participando en un estudio con la Clínica Puigvert para testear la efectividad de uno de sus aceites en nuevas dolencias. "En el último año y medio, hemos conseguido evolucionar de una cosmética oncológica a una cosmética clínica con principios activos naturales y probióticos, así como precios de venta al público muy asequibles", subraya. Actualmente, "se comercializa a través de la página web de GGcare y del circuito de mayoristas farmacéutico y clínico". 

García adelanta que trabajan en una ronda de financiación de 300.000 euros "para poder crecer más rápido y más cómodamente", y que ya se han puesto en contacto con ellos desde lugares tan dispares como Omán, México y Marruecos para empezar a comercializar su línea cosmética en esos países. El volumen de negocio se situará este año cerca de los 250.000 euros. "Aunque el objetivo es que, si se cierran los acuerdos internacionales, se multiplique rápidamente en los próximos ejercicios", concluye.