Un fondo británico propone a Daniel Lacalle y Paulina Beato para renovar el consejo de Enel, dueña de Endesa

Covalis Capital ha planteado una lista alternativa para renovar el consejo de Enel en el que incluye al economista Daniel Lacalle, que participó en las listas de Pablo Casado para las elecciones al Congreso de España en 2019 y colaboró en la redacción del programa económico del partido, y la economista española Paulina Beato, que se forjó como asesora económica en los gobiernos de Felipe González en los años 80 y ha sido presidenta de Red Eléctrica y consejera de Repsol. El fondo británico ha propuesto una lista de candidatos para sustituir al consejo de Enel en la junta prevista para el próximo 10 de mayo. El cese de Francesco Starace por parte del Gobierno italiano abre un conflicto entre los fondos y el Tesoro italiano por la dirección de la empresa. El Ejecutivo controla un 23% de Enel y propuso la semana pasado un cambio total en el consejo, incluido el relevo de su primer ejecutivo, Francesco Starace.

El movimiento de Covalis abre una guerra por el control de la cúpula de la empresa que también afectará a Endesa, puesto que Enel controla un 70% de la compañía energética española. Starace ha sido el vicepresidente de Endesa desde su llegada a Enel en 2014, la próxima junta del 28 de abril será la última como responsable de Enel.

Covalis ha señalado su desacuerdo con el sistema que ha propuesto el Gobierno italiano para renovar el consejo de Enel en un comunicado que recoge el diario Corriere de la Sera. "Socava la confianza de los inversores, erosiona el valor y está fuera de línea con las normas internacionales de las mejores prácticas en la democracia de los accionistas", expone el fondo británico, que controla un 3% de Enel, aún insuficiente para imponer sus candidatos en el consejo de administración por encima del Gobierno italiano. Pero la clave está en la posición que tomen el resto de fondos que componen el accionario del grupo y que podría torcer los planes gubernamentales.

Revolución en el consejo de administración

El nuevo Gobierno italiano, comandado por Giorgia Meloni, revolucionó la semana pasada las cúpulas de los grandes grupos de titularidad estatal con nuevos nombres. La criba emprendida por la primera ministra afectó a la petrolera Eni, al grupo de defensa Leonardo y la compañía de correos Poste, y también conlleva la salida de Francesco Starace como consejero delegado de Enel, una de las mayores energéticas europeas y dueña de la eléctrica española Endesa, que que pierde al inspirador de sus planes de futuro.

El Ejecutivo italiano eligió como nuevo consejero delegado de Enel a Flavio Cattaneo, actual máximo responsable de la empresa ferroviaria Italo-Nuevo Transporto Viaggiatori y con un amplio currículo en grupos públicos del país, y como presidente no ejecutivo a Paolo Scaroni, antiguo consejero delegado de la propia Enel hace dos décadas y actual vicepresidente de Rothschild Italia y presidente del club de fútbol AC Milan.

Los cambios en la cúpula de Enel pueden acabar afectando al futuro de Endesa, de la que el grupo italiano controla un 70% del capital. Starace ha sido el artífice e inspirador último de la estrategia de la compañía como responsable de la estrategia de la matriz italiana y de todas sus filiales.

Noticias relacionadas

La Reserva Federal de EEUU mantiene los tipos de interés y aplaza un posible recorte en espera de una menor inflación

Holaluz sostiene haber cubierto sus expectativas de Ebitda normalizado pese a un 2023 "turbulento"

Endesa presentó hace apenas cinco meses una versión actualizada de su plan estratégico hasta 2025, y la intención es mantenerla sin cambios hasta que a finales de este año se presente la habitual revisión anual. La actual hoja de ruta contempla acumular beneficios de hasta 7.700 millones de euros en cuatro años, confirma su política de dividendos para repartir casi 5.400 millones en este periodo y promete un mayor esfuerzo inversor de hasta 8.600 millones para crecer en renovables y electrificación.

En esa apuesta por impulsar las energías 'verdes', destinará la mitad de esa inversión, unos 4.300 millones a renovables, un 39% más que en el plan previo, con el objetivo de sumar 4.400 megavatios (MW) de nueva potencia verde -3.000 MW de potencia solar y 1.400 MW de eólica-, para alcanzar un parque al final del periodo los 13.900 MW.