TRANSPORTES

El Gobierno rescata a Raül Blanco para presidir Renfe tras la dimisión de Táboas por la crisis de los trenes

También ha dimitido la secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera, que será sustituida por David Lucas

El nuevo presidente de Renfe, Raül Blanco.

El nuevo presidente de Renfe, Raül Blanco.

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El Consejo de Ministros aprobará este martes el nombramiento del hasta diciembre secretario general de Industria y Pyme, Raül Blanco, como presidente de Renfe, tras la dimisión forzada de Isaías Táboas, tras los errores en el ancho de los trenes de Cercanías que no cabían por algunos de los túneles de Cantabria y Asturias. El denominado 'Fevemocho' le ha costado el cargo también a la secretaria de Estado del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana -anterior presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera--, que será sustituida por el actual secretario general de Vivienda, David Lucas, encargado hasta ahora de las negociaciones con Unidas Podemos sobre la Ley de Vivienda.

Blanco recala en la empresa pública después de su salida por la puerta de atrás del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo que dirige Reyes Maroto en el mes de diciembre. Fue la cabeza de turco tras el desastre en la asignación de los fondos europeos del primer gran proyecto estratégico español, el denominado PERTE de la automoción que había estado diseñando y desarrollando en los últimos dos años. Con un perfil bajo, siempre a la sombra de la ministra Reyes Maroto, Blanco fue también una de las figuras principales en las negociaciones del Gobierno con las empresas españolas para desarrollar nuevas capacidades industriales con las que fabricar mascarillas y otros materiales en un momento de escasez global.

Tras su fulminante y sorpresiva salida de Industria, Blanco recaló en la Dirección General de la Fundación Escuela de Organización Industrial que ahora le toca dejar para asumir las funciones directivas de la empresa pública española.

Cadena de errores

Los anuncios se han producido momentos antes de que la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, se reuniera con los presidentes de Asturias y CantabriaAdrián Barbón y Miguel Ángel Revilla, respectivamente, para explicar la cadena de errores en los trenes contratados. "Desde el primer día he dado la cara, hemos pedido disculpas, hemos reconocido el error, depurado responsabilidades y constituido una auditoría interna y grupo de trabajo", ha comenzado diciendo Raquel Sánchez. La ministra ha descartado que hubiera "ningún tren fabricado", sino que el problema ha salido a relucir en la "fase inicial" de diseño, que precede a la fabricación, cuando se advirtió por parte de los técnicos de que "hay una incompatibilidad que dio paso a la búsqueda de una solución que termina siendo la utilización de ese método comparativo".

Renfe había licitado hace cuatro años (febrero de 2019) la fabricación de 31 trenes de ancho métrico para renovar la flota que presta servicio de Cercanías y Media Distancia en Asturias y Cantabria. La fabricación se le adjudicó a CAF en 2020 pero con medidas erróneas incompatibles con las dimensiones de algunos túneles de Asturias y Cantabria. Detectado el problema, se empezaron a buscar soluciones y finalmente se optó por el denominado "método comparativo" que consiste en utilizar como base un tren que actualmente circula por las líneas de ancho métrico como referencia. "El error se detectó en febrero de 2021 y se ha tratado demasiado tiempo en corregir", ha advertido Sánchez sobre los motivos del cese de Táboas y Pardo de Vera. No obstante, ha añadido, "no ha existido mala fe. No se ha malgastado ni un solo euro de dinero público y no ha habido ninguna situación irreversible porque no se ha fabricado ningún tren".

Gratuidad del tren

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"Depuradas responsabilidades, en esta reunión nos quedaban las compensaciones", decía a su salida de la reunión Adrián Barbón. El resultado ha sido un calendario sobre el inicio de la construcción --finales de este año y principios de 2024-- y de la entrega de los primeros convoyes --en los primeros meses de 2026--, así como una partida presupuestaria para que ambas comunidades puedan ofrecer la gratuidad de los servicios de Cercanías y FEVE para cántabros y asturianos hasta la entrega de la totalidad de los trenes previstos en el contrato. El contrato firmado por el ministro Íñigo de la Serna, se había acordado la construcción de 21 trenes para Cantabria y 10 para Asturias, con una posible ampliación a 7 trenes más que se irán a Asturias para "reequilibrar" las cuantías.

"Eso es lo que hemos firmado. Y hemos nombrado a un comisionado (una persona persona concreta) para que haga seguimiento del cumplimiento del acuerdo", ha reiterado Miguel Ángel Revilla tras afirmar que "una chapuza de este calibre" no la había visto el presidente cántabro "en 40 años". El Gobierno también se ha comprometido a un "proceso de acondicionamiento" de los trenes actuales para que puedan prestar un mejor servicio, en términos de accesibilidad, interior del tren, etc. además de realizar una licitación adicional para ampliar los trenes que actualmente funcionan por la red.