Ciencias de la Tierra / Oceanografía

Un campo hidrotermal es una verdadera "ciudad perdida" en lo profundo del océano

Esconde los misterios del origen de la vida en la Tierra primitiva y sería similar a un antiguo Marte

La Ciudad Perdida tiene numerosos respiraderos hidrotermales de carbonato, incluida esta brida de color blanco tiza.

La Ciudad Perdida tiene numerosos respiraderos hidrotermales de carbonato, incluida esta brida de color blanco tiza. / Créditos: National Science Foundation (University of Washington/Woods Hole Oceanographic Institution).

Pablo Javier Piacente

Cerca de la cima de una montaña submarina, al oeste de la Cordillera del Atlántico Medio, un paisaje irregular de torres se eleva desde la penumbra: se trata de un campo hidrotermal conocido como la Ciudad Perdida. Es el entorno de ventilación más longevo que se conoce en el océano: nunca se ha encontrado nada igual. Las formaciones creadas poseen como mínimo unos 120.000 años de antigüedad: descubiertas en 2000, los científicos claman por su preservación y declaración como Patrimonio de la Humanidad.

A más de 700 metros de profundidad, el campo hidrotermal conocido como la Ciudad Perdida

es el ecosistema más antiguo en su tipo descubierto hasta el momento en el fondo del océano. Se ubica en el Océano Atlántico Norte, en la montaña del lecho marino Atlantis Massif. Dada su importancia para el entendimiento de las condiciones que permitieron el origen de la vida, distintos especialistas están reclamado que sea declarada Patrimonio de la Humanidad, un pedido que motivó incluso un estudio científico publicado en 2019 en la revista Marine Policy.

Mapa de la Ciudad Perdida en el Macizo de la Atlántida.

Mapa de la Ciudad Perdida en el Macizo de la Atlántida. / Créditos: NOAA Photo Library/ Wikimedia Commons/Flickr.

Otro mundo bajo el mar

En las grietas que conforman los respiraderos del campo hidrotermal, los hidrocarburos alimentan nuevas comunidades microbianas, incluso sin la presencia de oxígeno. Lo vienen haciendo desde hace más de 120.000 años, generando un ecosistema que sería muy similar al existente en los inicios de la Tierra, y que fue la expresión primaria de la enorme diversidad vital que hoy conocemos. Según los científicos, Marte también habría contado con esta clase de ambientes en algún momento de su pasado.

Las chimeneas que arrojan gases a temperaturas de hasta 40 grados Celsius protegen a una gran cantidad de caracoles y crustáceos, incluyendo a algunos pocos cangrejos, camarones, erizos de mar y anguilas de enorme tamaño, que muestran dimensiones sorprendentes para lo esperado en estas especies en la actualidad. Las alargadas chimeneas pueden llegar hasta un máximo de 60 metros de altura.

Un enorme cangrejo madre en Ciudad Perdida, sobre un afloramiento de peridotita serpentinizada.

Un enorme cangrejo madre en Ciudad Perdida, sobre un afloramiento de peridotita serpentinizada. / Créditos: NOAA, IFE, URI-IAO, Universidad de Washington, Lost City Research.

Revelando el origen de la vida

De acuerdo a un

artículo

publicado en Science Alert, los hidrocarburos producidos por los respiraderos de la Ciudad Perdida no se formaron mediante el dióxido de carbono atmosférico o la luz solar, sino por reacciones químicas en el lecho marino profundo. Si tenemos en cuenta que los hidrocarburos son los componentes básicos de la vida, diversas teorías sostienen que la vida pudo haberse originado en un hábitat similar, hace aproximadamente entre 4.000 y 3.500 millones de años.

Sin embargo, es posible que esto no haya sucedido únicamente en la Tierra primitiva o en el pasado marciano. El

campo hidrotermal

Ciudad Perdida sería un ejemplo de un tipo de ecosistema que podría estar activo en Encelado o Europa en este mismo momento, en referencia a las lunas de Saturno y Júpiter, respectivamente, que destacan entre los mundos que podrían

albergar vida

dentro del Sistema Solar. 

¿En peligro?

Todas estas condiciones marcan la importancia del campo hidrotermal Ciudad Perdida para el estudio de las

condiciones bioquímicas

del origen de la vida en nuestro planeta y posiblemente en otros mundos.

Descubierta en 2000

, preocupa a los científicos que la explotación del mar en los alrededores pueda derivar en daños irreparables a las estructuras y al ecosistema de Ciudad Perdida. Frente a esto, distintos expertos están solicitando que sea catalogada como Patrimonio de la Humanidad, aunque ya ha sido protegida por algunas instancias judiciales y políticas que, al parecer, no resultan suficientes. 

Referencia

Protecting the lost city hydrothermal vent system: All is not lost, or is it?

David Edward Johnson. Marine Policy (2019). DOI:

https://doi.org/10.1016/j.marpol.2019.103593