Neurociencias / Genética

Un fragmento de "ADN basura" podría eliminar el miedo y los recuerdos traumáticos

Serviría para desarrollar nuevos tratamientos contra trastornos psicológicos

Un sector del llamado “ADN basura” tendría la capacidad de controlar nuestros recuerdos traumáticos y las sensaciones ligadas al miedo.

Un sector del llamado “ADN basura” tendría la capacidad de controlar nuestros recuerdos traumáticos y las sensaciones ligadas al miedo. / Crédito: Verne Ho en Unsplash.

Pablo Javier Piacente

Según un nuevo estudio, un fragmento de "ADN basura" podría ser la clave para extinguir los recuerdos relacionados con el miedo o las experiencias traumáticas en las personas, por ejemplo en los casos como el trastorno de estrés postraumático o las fobias.

Una investigación internacional liderada por la Universidad de Queensland, en Australia, ha identificado un área de “ADN basura” que podría utilizarse para controlar y eliminar los recuerdos ligados a experiencias negativas, o que generan sensaciones de miedo a un nivel patológico. Al parecer, estos fragmentos de ADN no codificante proporcionan un "puente" que vincula las señales ambientales dinámicas con los mecanismos que controlan la forma en que nuestros cerebros responden al miedo.

Los científicos llamaron “ADN basura” a los segmentos de ADN que no contienen información que permita codificar proteínas. Al no tener la capacidad de codificar, se pensó que estos fragmentos no tendrían ninguna función y que serían inútiles. Sin embargo, cada vez más estudios e investigaciones están revalorizando esta porción del ADN, ya que su importancia está oculta.

Sin aplicar las tecnologías necesarias, la actividad de estos fragmentos pasa inadvertida dentro del genoma. En términos técnicos, parte del ADN (ácido desoxirribonucleico) no codificante o “ADN basura” se transcribe en moléculas de ARN (ácido ribonucleico) largo no codificantes que sí realizan funciones específicas.

¿Genes para suprimir recuerdos?

Ahora, un nuevo estudio publicado recientemente en la revista Cell Reports indica que algunos fragmentos de ADN no codificante podrían ser la llave para suprimir la creación de los recuerdos traumáticos, que derivan en cuadros como las fobias o el trastorno de estrés postraumático. Según una

nota de prensa

, se trata del primer esfuerzo científico para comprender estos genes o cómo podrían influir en las funciones cerebrales relacionadas con el aprendizaje y la memoria.

El

miedo

, tal como se entiende en su concepción extrema, que aparece en algunos trastornos psicosociales, está íntimamente ligado a la memoria y a conductas aprendidas, que muchas veces son originadas por recuerdos de experiencias negativas. En otras palabras, la persona que sufre esta clase de trastornos “aprende” a relacionarse frente a determinadas situaciones bajo el tamiz de un universo de recuerdos altamente condicionantes.

Aunque gran parte de estos recuerdos tienen que ver con vivencias individuales o sociales y no con aspectos genéticos, al mismo tiempo existe un andamiaje genético que estimula la formación de una estructura neuronal capaz de reducir o de potenciar estos recuerdos traumáticos. Usando un nuevo y poderoso enfoque tecnológico de secuenciación genética, el equipo de investigadores dirigido por el Dr. Timothy Bredy identificó 433 ARN largos no codificantes de regiones relativamente desconocidas del genoma humano.

Nuevas terapias

Entre ellos, los científicos descubrieron un nuevo gen denominado ADRAM, que al mismo tiempo que actúa como un “andamio” para las moléculas dentro de la célula, también colabora en la coordinación y formación de la memoria de extinción del miedo. Esto quiere decir que al manipularse puede propiciar la supresión de los recuerdos que activan las sensaciones de

miedo

y potencian los trastornos psicológicos.

A partir de esta nueva comprensión de la actividad de los genes, los investigadores intentarán desarrollar herramientas para apuntar selectivamente a los ARN largos no codificantes en el cerebro que modifican directamente la memoria y, de esta manera, desarrollar nuevas terapias para las fobias, el trastorno de estrés postraumático y otras patologías relacionadas.

Referencia

ADRAM is an experience-dependent long noncoding RNA that drives fear extinction through a direct interaction with the chaperone protein 14-3-3

. Timothy Bredy, Wei Wei et al. Cell Reports (2022). DOI:

https://doi.org/10.1016/j.celrep.2022.110546