PASAPALABRA

De ganar el bote de Pasapalabra a pasar por la cárcel: la increíble historia de un concursante de televisión

La historia de Pasapalabra abarca protagonistas de los más variopintos, como el caso de este concursante que fue condenado a dos años de prisión

Roberto Leal en 'Pasapalabra'

Roberto Leal en 'Pasapalabra' / Antena 3

Pasapalabra es sinónimo de éxito. El concurso que emite Antena3 es uno de los programas más seguidos y longevos de la televisión nacional. Por su plató han pasado cientos de concursantes, invitados y famosos. Algunos de los cuales, aunque no hayan conseguido llevarse el bote, han dejado una huella imborrable en la historia del formato.

Es el caso de Miguel Rodríguez, el concursante que entró en prisión tras ser condenado a dos años y cuatro meses de cárcel por estafa continuada. El acusado se había apropiado del dinero de un centenar de personas, entre ellas algunos de sus familiares, engañándoles con falsas inversiones en bolsa por las que les garantizaba hasta un 10 % de beneficios al año. Unos beneficios que, por supuesto, nunca llegaron.

Una solución a la desesperada

Miguel Rodríguez acudió a Pasapalabra en 2009 con el objetivo de conseguir el bote para intentar saldar las deudas que tenía con sus víctimas y evitar que estas lo denunciasen y lo enviasen a prisión. Pese a que ganó 240.000 euros en el concurso, el dinero no fue suficiente para cubrir su desfalco y acabó en los tribunales.

Miguel Rodríguez, el exconcursante de Pasapalabra que fue condenado a prisión.

Miguel Rodríguez, el exconcursante de Pasapalabra que fue condenado a prisión. / PASAPALABRA

La estafa comenzó en 2005 y, una década después, Miguel Rodríguez fue sentenciado a dos años y cuatro meses de cárcel, que cumplió en la prisión de Teixeiro, en A Coruña. Fue, sin duda, uno de los ganadores del bote de Pasapalabra al que más le cambió la vida tras su paso por el programa. Eso sí, a peor.

Un bote millonario que espera ganador

El bote que ahora mismo está en juego en Pasapalabra acumula cerca de 1,9 millones de euros y hay dos concursantes, Rafa Castaño y Orestes Barbero, que llevan meses peleando cada tarde por ser el primero en completar correctamente el rosco y embolsarse esta jugosa fortuna. De momento, ninguno de los dos, que ya se encontraron frente a frente cuando el programa se emitía en Telecinco, ha dado con la clave del éxito y ambos siguen intentando llevarse la victoria final.

Sin embargo, no se trata del premio de mayor cuantía entregado por el programa. En 2006, el concursante Eduardo Benito, se llevó nada más y nada menos que 2,19 millones de euros, el premio más alto que se ha dado jamás en el concurso. Y lo mejor de todo es que lo hizo el primer día que participaba en el programa. Una auténtica gesta.