Investigación

Investigan la muerte violenta de una mujer de 44 años en Valencia

Un vecino alertó al 112 de que la mujer podría haber sido arrojada al vacío y afirmó haber escuchado una discusión entre ella y su pareja

Acudieron agentes del cuartel de la Guardia CIvil de Vinaròs.

Acudieron agentes del cuartel de la Guardia CIvil de Vinaròs.

La Guardia Civil está investigando la 

muerte violenta de una mujer de 44 años en Vinaròs que esta tarde ha caído desde el balcón de un cuarto piso en la calle Yecla de la localidad.

Ha sido un vecino de la fallecida el que ha alertado a la Guardia Civil a través de una llamada al Servicio de Emergencias 112 en la que ha informado de que la mujer podría haber sido arrojada al vacío dado que afirmó haber escuchado una discusión entre la víctima y su pareja. 

Minutos después acudieron al lugar patrullas tanto de la Guardia Civil como de la Policía Local de Vinaròs. Nada más llegar vieron a la mujer caída en el suelo y requirieron ayuda médica urgente. El Centro de Información y Coordinación de Emergencias CICU envío al lugar un equipo médico del SAMU en una ambulancia de soporte vital avanzado, que, sin embargo, no pudo hacer nada por salvar la vida de la mujer dado que había fallecido en el acto.

Mientra tanto, agentes de la Guardia Civil han subido al piso de la pareja en el cuarto piso del edificio y se han entrevistado con la pareja de la fallecida, cuya identidad no había trascendido al cierre de esta edición. 

Según esa primera versión del compañero sentimental de la mujer fallecida, habrían tenido una discusión por motivos familiares, algo que encajaría con el testimonio del vecino. La pareja afirmó que en un momento determinado la mujer habría ido al balcón y que él habría visto incluso el momento en el que trataba de arrojarse pero que él, afirma, trató de impedirlo sin éxito.

Sin embargo, la llamada de emergencias partió de un vecino.

Incoherencias en la declaración

Dadas las lagunas detectadas por la Guardia Civil en algunos puntos de esta entrevista, los agentes ha optado por precintar la vivienda y realizar en la mañana del lunes una inspección ocular centrada principalmente en le balcón para determinar si la huellas en la barandilla son compatibles con la muerte voluntaria o, si por el contrario, la pareja abría tenido una intervención directa en la muerte.

Al cierre de esta edición, la Guardia Civil no descartaba ninguna hipótesis. Tampoco la que se tratase de un nuevo caso de violencia de género.