ENTREVISTA | PERIODISTA Y FUNDADOR DE QSD GLOBAL

Paco Lobatón: "Las familias sienten que hay desaparecidos de primera y de segunda"

Se cumplen 30 años de 'Quién sabe dónde'. Su mítico presentador ha cambiado los focos por unas botas para batir terrenos al lado de las familias que sufren la ausencia de un ser querido

El periodista Paco Lobatón.  / DAVID CASTRO

El periodista Paco Lobatón. / DAVID CASTRO / DAVID CASTRO

Es cara, voz, de los desaparecidos. Guía de muchas familias. Se trata de Paco Lobatón, periodista, buscador, en la profesión le llaman 'maestro'. Su camino empieza en la radio, con solo 16 años. Perdió su acento andaluz al llegar a ella porque por entonces no gustaba, pero en su círculo íntimo deja caer ese deje -siempre algo queda- de su Jerez de la Frontera (Cádiz).

Pocos saben que su primera búsqueda, en la pequeña pantalla, fue para tratar de encontrar un corazón sano para una chica cuya vida dependía de un trasplante. No ha olvidado aquel reportaje, que tituló: "¿Dónde estás, corazón?". Cercano, riguroso, recuerda con CASO ABIERTO el camino que ha recorrido cuando se cumplen 30 años, en octubre, desde que iniciara el proyecto que marcaría su vida: 'Quién sabe dónde'.

Tranquilo, templado, siempre activo, sigue 'por y para' una causa: las familias de los desaparecidos. El último paso de su fundación, QSDglobal, editar un libro, '22 años de ausencia: María Teresa Fernández. Entre la espera y la esperanza", un resorte contra el olvido de la joven desaparecida en Motril hace dos décadas.

Toda una vida buscando personas desaparecidas, pero lo suyo llegó por casualidad, no estaba en sus planes...

Llegó en 1992, cuando me ofrecieron hacerme cargo de la conducción de 'Quién sabe dónde'. Se había emitido en TVE 2, pero iba a pasar a la primera cadena con un equipo nuevo. Yo no conocía hasta ese momento la realidad de las desapariciones más que como una noticia esporádica. No tenía ni idea de su amplitud, ni de la profundidad del sufrimiento que comporta para las familias.

De no haber llegado esa llamada, ¿quién sería hoy Paco Lobatón? ¿Trabajaría en la sección de Deporte, Política...?

En mí siempre hubo una vocación, yo diría que espontánea, por los temas sociales. Quizá, porque siempre he entendido que el periodismo tiene sentido como una actividad que resulte realmente útil. Que no solo lo sea para el profesional, sino para la sociedad.

"Como si fuéramos cirujanos, tratamos de operar con toda la información con la mayor precisión, para no añadir ningún sufrimiento al que ya tienen las familias previamente"

Hay un precedente, con una gran carga emocional… Creo que fue en 1987 o 1988. Estando yo en los telediarios de la primera, damos una noticia que habla de una paisana mía, una chica andaluza llamada Paqui Miranda. Estudiante del mismo instituto en el que yo había ido, el Instituto Padre Luis Coloma (Jerez de la Frontera).

Ella está ingresada en el Hospital Puerta de Hierro de Madrid, a la espera de un trasplante de corazón. Se había hecho un llamamiento para encontrar un donante a través de diferentes vías, incluido el propio telediario, pero no había respuesta. Entonces, pedí permiso a la redacción de 'Informe Semanal' para hacer un reportaje. Lo hice y, al final, cuando iba a hacer la entrevista a Paqui, ella falleció. La emisión de ese reportaje tuvo una respuesta social impresionante que permitió conseguir, la semana siguiente, el mayor número de trasplantes en España hasta entonces.

El reportaje hizo que me dieran una distinción del Ministerio de Sanidad, un premio, pero sobre todo permitió un número muy importante de trasplantes tanto de corazón como de hígado. Entre ellos, el que recibió un niño extremeño que se llamaba Juan Carlos Delgado.

Aquella fue su primera búsqueda.

Digamos que sí, fue un precedente. En este caso, lo que buscábamos era un órgano sano, pero aquel fue el principio de la búsquedas, ¿no? El reportaje, curiosamente, se llamaba: '¿Dónde estás, corazón?'. Nunca lo he olvidado.

En 2015 creó la Fundación QSDglobal, con las mismas siglas que el programa que le marcó.

En 2015 creó la Fundación QSDglobal, con las mismas siglas que el programa que le marcó.

Después llega 'Quién sabe dónde' y ya no puede mirar para otro lado.

Yo creo que me ocurre a mí y a todo el equipo. Vamos tomando una conciencia más profunda del problema. No es la simple empatía con la que inicialmente pudimos trabajar con los casos del programa, es una progresión que hace que pase del punto de vista periodístico; se convierte en una causa. Íbamos viendo la singularidad de cada caso, sí, pero en común todos tenían una profundidad tremenda en término de sufrimiento humano. Ahí no podíamos mirar para otro lado. El gran descubrimiento para mí fue ese sentimiento de incertidumbre que sienten todas las familias que tienen un ser querido desaparecido y que determina sus vidas de una manera brutal.

El equipo de 'Quién sabe dónde' contaba con dos psicólogos, una trabajadora social, un abogado y un asesor policial, Esteban Gándara, que era policía nacional"

Abordasteis unas 2.500 desapariciones. Se resolvió el 70% de los casos. ¿Cuál fue la clave?

La audiencia. Su respuesta. Es decir, no solo el programa lo ve mucha gente, sino que mucha de esa gente lo ve para ayudar y ayuda. Llegan pistas y eso a su vez genera una dinámica. Saber que tienes posibilidad de resolver casos te anima a seguir resolviendo. Retroalimenta la expectativa de la propia gente y empiezan a llegar cada vez más casos hasta sumar 20.000 peticiones de búsqueda en el histórico del programa.

Otra de las claves fue el cuidado con el que se trabajó. Disponer de un equipo como nunca había existido antes y puede que nunca haya existido después. Éramos 68 personas y la gran singularidad fue sumar profesionales ajenos al periodismo y a la televisión. Incorporé a dos psicólogos, una trabajadora social, un abogado y a un asesor policial, Esteban Gándara, un policía nacional que fue clave en el tratamiento que hacíamos de los casos.

'Quién sabe dónde' se emitió durante seis años en TVE.

'Quién sabe dónde' se emitió durante seis años en TVE 1.

Después de tantos años en pantalla, seguro que guarda muchas anécdotas.

Muchísimas... Algunas de ellas ha tenido proyección en redes sociales años después. Sonada, la de Gregorio Cobo Burguillo (sonríe), un desaparecido que llamó al programa para pedir que dejaran de buscarle, pero por su voz no parecía ser él, hablaba con un timbre muy agudo... (en aquel programa, Lobatón pensó que quien llamaba era una mujer). En 2018 pude conocerle. El encuentro fue muy bueno. Él me disculpó el que yo no le hubiera identificado y que, después, hubiera circulado la sospecha de que esa voz, tan atiplada, pudiera corresponder a un cambio de identidad sexual. Nada que ver, su desaparición fue fruto de una desavenencia que en ese momento tuvo con una de sus hermanas.

Otros recuerdos, por el contrario, son menos felices. ¿Alguno que le haya marcado especialmente?

Me han marcado muchos y me siguen marcando. Diría, incluso, que ahora más. Durante el programa tenía la posibilidad de compartirlo con un equipo mucho más amplio, ahora en la fundación es más pequeño, todo se vive con una cercanía infinitamente mayor y, por tanto, llega todo más, incluido el sufrimiento. Compartir las expectativas, los momentos duros, crudos… Esa capacidad casi infinita de resiliencia que tienen las familias pasa por momentos de caída.

"He llorado, pero de manera privada. He tenido siempre claro que mis sentimientos nunca deben sobreponerse ni interferir en el mensaje de los propios familiares"

Supongo que es inevitable que no le afecte…

Durante el tiempo del programa llevaba una carga emocional muy importante porque trataba un alto número de casos. Lo afrontaba con el mayor grado de información posible para tratar de responder con el mayor grado de profesionalidad. Supongo que es igual que un cirujano, ante el trance de operar a vida o muerte a un ser humano. Lo que tratamos de hacer era operar con toda la información, con la mayor precisión, para no añadir ningún sufrimiento al que ya tenían las familias previamente.

¿Cómo consigue recomponerse?

Creo que tengo que tener muy claro cuál es mi papel, estar muy cerca de las víctimas, pero también contar con la capacidad de tener perspectiva, horizonte, porque es la forma en la que puedes ayudar.

¿Ha llorado?

De manera muy privada, sí... He tenido siempre claro que la expresión de los sentimientos nunca debe sobreponerse ni interferir en el mensaje de los propios familiares, sobre todo en lo que se refiere al trabajo en televisión, pero en el plano privado claro que sí. Uno no puede evitar, en un momento dado, que te desborde el sentimiento que estás compartiendo con otra familia.

Al histórico de 'Quién sabe dónde' llegaron 20.000 peticiones de búsqueda.

Al histórico de 'Quién sabe dónde' llegaron 20.000 peticiones de búsqueda.

'Quien sabe dónde' marcó una época, y le marcó a usted. Ya sin focos ni cámaras, en 2015 usa esas mismas siglas, QSD, para crear la Fundación Europea por las Personas Desaparecidas. ¿Por qué?

Porque yo estaba constatando, incluso te diría que con rabia, que el trabajo de las asociaciones de familiares era considerado de manera muy desigual. Hacían un esfuerzo titánico, pero tenían unas dificultades enormes para ser escuchados en ámbitos administrativos, en las instancias del gobierno donde se fraguan las decisiones. La fundación tenía que ser, y es, un espacio abierto para que entren todas las sensibilidades, para que no haya ningún tipo de prejuicio de ninguna asociación. Nuestro objetivo es avanzar en la atención social y policial de las desapariciones.

QSDglobal

En 2015 nace la Fundación Europea por las personas desaparecidas QSDglobal. Fundada por Paco Lobatón, actualmente presidida por José Antonio Lorente, catedrático de Medicina Legal. Curtido en el FBI norteamericano ha analizado los restos de Cristóbal Colón para descubrir su origen. Dirige el programa DNA Pro-kids, para localizar a niños desaparecidos e identificar huesos de fosas comunes.

La unión hace la fuerza. Para una persona que tiene a su hijo, hermano, madre... desaparecido ¿es clave hablar con alguien que esté pasando o haya pasado por lo mismo?

Lo es. Otra preocupación y otro motivo que impulsó la creación de la fundación era constatar cómo pasaban los años y no existían encuentros regulares entre las familias. Que se unan ha permitido conformar la 'Carta de Derechos y Demandas', que está en la base de lo que esperemos que sea pronto un 'Estatuto de la Persona Desaparecida', una ley que ordene y ampare los derechos familiares.

Paco Lobatón con familiares de personas desaparecidas en una de los encuentros de su fundación.

Paco Lobatón con familiares de personas desaparecidas en uno de los encuentros de su fundación.

Con la fundación, usted pasó de presentador, y narrador, a ponerse las botas y batir terrenos.

Tengo en mi memoria todas las batidas que se organizaron por Ángeles Zurera (Córdoba), Manuela Chavero y Francisca Cadenas (Extremadura). Hemos intentado promover otras en puntos como Cataluña, con Caroline del Valle… pero creo que la labor de la fundación es intentar que los recursos del Estado, de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, se ocupen de manera eficiente de esas búsquedas.

En 2016 Qsdglobal y más de 300 vecinos formaron parte del operativo de búsqueda de Manuela Chavero.

En 2016 Qsdglobal y más de 300 vecinos formaron parte del operativo de búsqueda de Manuela Chavero.

Tenemos la ayuda de las nuevas tecnologías, nuevos protocolos, pero continúa habiendo muchos casos sin resolver, muchas familias que sienten que no se busca lo suficiente, desapariciones de larga duración… ¿Qué está fallando?

No se ha hecho todo, ni se está haciendo todo lo que se debería hacer, pero, dicho eso, yo añadiría que hay, ahora mismo, herramientas para que no siga ocurriendo eso, para ir subsanando esas carencias. En el Plan Estratégico aprobado por el Ministerio del Interior en marzo hay, entre otras cosas, un apartado específico referido a los casos de larga duración y a la necesidad de abordarlos. Para hacer una revisión, una investigación que permita avanzar, llegar a algún término. Las familias necesitan respuestas, el derecho a saber les asiste.

Salir de ese punto muerto.

El hecho de que una búsqueda se quede en un punto muerto no puede ser contemplado con resignación, como una fatalidad, sino como un objetivo para seguir trabajando. El plan de Interior tiene una dotación económica y unos tiempos marcados: está vigente hasta 2024. No quiere decir que de aquí a 2024 se vayan a resolver todos los casos, pero sí tienen que cumplir los compromisos que están contemplados. Vamos a estar vigilantes y atentos a que así sea.

"Algunas familias tienen el sentimiento que yo llamo de 'Km 0'. Cuando su caso no se resuelve, tienen la sensación de que no se ha hecho nada por encontrar a su ser querido"

Hay varias quejas y reivindicaciones que se repiten en muchas familias. La primera: que hay desaparecidos de primera y de segunda. Es decir, muchos sienten que se han empleado más recursos para buscar a Marta del Castillo, Diana Quer y las niñas de Tenerife, Anna y Olivia, por ejemplo, que a sus seres queridos.

No puedes hacer tabla rasa de un sentimiento. Creo que la percepción de las familias es innegable. Ese sentimiento existe, sienten que hay desaparecidos de primera y de segunda. Igual que existe el que yo llamo sentimiento de 'Km 0', que se da cuando tu caso no se resuelve. Entonces, lo que prevalece en el familiar es la sensación no solo de que se ha hecho poco por encontrar a su ser querido, sino de que no se ha hecho nada. Un sentimiento de desamparo.

A ese sentimiento hay que contraponer acciones que sean tangibles, reconocibles, por la familias. La comunicación de los investigadores con los afectados, por ejemplo, es importante.

Los medios de comunicación, ¿suman o restan?

Depende, como diría Pau Donés. ¿Y de qué depende? De que las historias de desaparición no sean historias de usar y olvidar, sino que sean consideradas como lo que son: situaciones humanas que están rodeadas de sufrimiento y a las que hay que atender con sentido y sensibilidad. Que no se caiga en la tentación de la espectacularización, de convertir en la mercancía de un 'minuto de oro' un relato cuyo trasfondo es tremendamente doloroso para la familia que lo está sufriendo.

Lobatón en una foto compartida en redes sociales.

Lobatón en la Casa Museo José Saramago, 'A Casa'.

El título de su libro 'Te buscaré mientras viva' se ha convertido en un lema para muchas familias. Mari Sánchez Moya (Valladolid), Cristina Bergua (Cornellá), David Guerrero (Málaga), Juan Antonio Gómez Alarcón (Mijas), los hermanos Orrit (Manresa), Borja Lázaro (Colombia), Malén (Mallorca), Andrés Mora (Valencia), Paco Molina (Córdoba)… Son desapariciones de larga duración. Esa incertidumbre constante, ¿cómo se combate?

Estando a su lado. Que sepan que estamos ahí, que estamos haciendo lo que toca. Si ha habido alguna información que abre alguna perspectiva, acompañarles en esa esperanza renovada y, si no, seguir batallando en objetivos a largo plazo.

Acaban de editar un nuevo libro, centrado en Mari Tere, cuyo rastro se perdió en Motril:  '22 años de ausencia: María Teresa Fernández. Entre la espera y la esperanza'.

'Te buscaré mientras viva' lo hice por encargo de la fundación, sin ánimo de lucro, pero con ánimo de logro. El logro precisamente es que no se olvide. Que quede el relato directo de las familias, de las catorce que forman ese libro. El nuevo que edita QSDglobal, el de María Teresa, pretende conseguir lo mismo: ser un resorte contra el olvido.

Tiene tres TP de Oro al Mejor Programa de Documentales y Debate... También le dieron la Cruz al Mérito Policial. De todos sus premios, ¿de cuál se siente más orgulloso?

Mi premio es cuando alguien me dice: "gracias por estar con nosotros". Saber que no se sienten abandonadas ni solas esas familias que han sido golpeadas por situaciones tan dolorosas. También me conmueve cuando gente anónima, que no tiene ningún caso de desaparición, me para por la calle, a pesar de que ha transcurrido tanto tiempo y hemos cambiado tanto de aspecto (ríe) y me dice: "gracias por su labor, siga adelante".

Paco Lobatón en una foto de su álbum personal.

Paco Lobatón en una foto de su álbum personal.

Tiene 70 años... ¿Paco Lobatón piensa en jubilarse?

¡No! (ríe). Tengo edad de jubilado, pero no lo estoy. En breve vamos a presentar iniciativas nuevas con la fundación. Además, sigo demandando que haya un espacio en la televisión publica, de ámbito estatal, para las personas desparecidas y familiares. Para luchar contra el olvido y para darle a los ciudadanos la posibilidad de que sigan ejerciendo la solidaridad como siempre lo han hecho con estos casos. En RNE seguiremos contando con los espacios 'Servicio de Búsquedas' y 'Diario de Ausencias'.

¿Usted no descansa?

No me lo planteo a nivel profesional y, a nivel personal, nunca dejaré de abrazar ni a las familias de desaparecidos ni su causa.