El Papa reaparece apenas unos minutos desde un balcón del Gemelli antes de ser trasladado en coche hasta el Vaticano

El papa se ha asomado este domingo por la ventana de su apartamento en el Policlínico Gemelli de Roma, en su primera aparición pública desde su hospitalización hace 38 días por una grave infección respiratoria, para saludar y bendecir a los fieles antes de regresar al Vaticano, tras recibir el alta médica.

Francisco, de 88 años, apareció en silla de ruedas con buen aspecto y sonriente. "Agradezco a todos", dijo con la voz cansada ante la multitud que abarrotaba desde una hora antes las puertas del centro médico.

La aparición del pontifice ha sido recogida por cámaras de televisión de medio mundo.

Después de más de cinco semanas luchando con una difícil neumonía y en una evidente prueba de que está mejor, el papa Francisco ha recibido el alta este domingo y regresa a su residencia vaticana de Santa Marta. "La buena noticia que imagino que todo el mundo está esperando es que mañana (por hoy) el Santo Padre será dando de alta, mañana vuelve a Santa Marta", afirmaron este sábado los médicos que le atienden.

La razón es que la neumonía bilateral que padecía se ha curado. Aún así, Francisco todavía tendrá que enfrentar un periodo de terapias, rehabilitación y reposo de aproximadamente dos meses, ha añadido el jefe de su equipo médico, Sergio Alfieri. 

Alfieri, cirujano que ya operó a Francisco en dos ocasiones, ha explicado que su paciente, de 88 años, será dado de alta después de haber pasado unas dos semanas "en condiciones estables". Aún así, "la prescripción es continuar con las terapias farmacológicas por vía oral por mucho tiempo y con una recomendación de un periodo de reposo y convalecencia de dos meses", ha puntualizado.

De hecho, si bien Francisco se encuentra mejor, todavía padece de infecciones polimicrobianas por diversas bacterias, por lo que "no podrá inmediatamente retomar todas sus actividades habituales", ha dicho Alfieri. "Se desaconsejan las reuniones con grandes grupos, y los esfuerzos", ha añadido el médico.

Dos veces en peligro

La difícil hospitalización de Francisco también ha sido reconocida por su médico personal, Luigi Carbone. "Su vida ha estado en peligro dos veces", ha confirmado. "Pero nunca fue intubado y siempre ha permanecido consciente", ha añadido Alfieri.  

Ya en la mañana, El Vaticano había ofrecido noticias más positivas, al anunciar que siempre el domingo el Papa se asomará desde su habitación en la décima planta del hospital Gemelli de Roma. "Francisco tiene la intención de asomarse desde el Policlínico Agostino Gemelli de Roma para un saludo y una bendición al final del Ángelus de mañana, que se distribuirá por escrito como en las semanas anteriores", comunicó la oficina de prensa de la Santa Sede.

El anuncio confirmaba así un rumor que había empezado a correr el viernes, después de que algunas personas, entre ellos algunos camarógrafos presentes en el hospital, había notado algunos movimientos en las ventanas de la habitación papal en la estructura sanitaria romana. Aún así, el Vaticano inicialmente no había querido confirmar esta posibilidad, como luego sí hizo. 

Siempre en los últimos días, también el cardenal argentino Víctor Manuel ‘Tucho’ Fernández, prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe y uno de sus colaboradores más cercanos, había confirmado que la salud de Francisco iba mejorando. Aún así, Francisco “necesitará de rehabilitación porque por mucho tiempo tuvo la oxigenación de altos flujos”, había explicado. "Eso te seca todo y uno tiene casi que volver a reaprender a hablar", había concluido Fernández, preguntado el viernes por periodistas. 

Con todo, de acuerdo con el cardenal argentino, es muy probable que el Papa también siga dando de qué hablar en los próximos meses. Tras su alta, "empezará una nueva etapa en la que habrá sorpresas", afirmó Fernández.