En la playa o de festival

El reciclaje también es para el verano

En localidades costeras como Sanxenxo o en Fuengirola han puesto en marcha distintas iniciativas para incrementar la recogida selectiva, así como en distintos eventos musicales

Recogida selectiva en un festival de música en Valencia

Recogida selectiva en un festival de música en Valencia

E. P.

Las vacaciones son un momento de desconexión, de romper con las rutinas, de dejar ir el estrés acumulado… Todo esto es cierto, pero eso no quiere decir que se tengan que olvidar algunos hábitos adquiridos que resultan imprescindibles para el futuro del Planeta. Porque no olvidemos que, desgraciadamente, el cambio climático no se toma ningún día libre. Así que ya sea en invierno o en verano, en anorak o en bermudas, sobre el asfalto o la arena, gestionar correctamente los residuos que generamos es vital para afrontar el reto de reducir las emisiones. 

Y aunque hace unos años pudiera valer la excusa de que los lugares de vacaciones no estaban preparados para afrontar una recogida selectiva eficaz, la situación a día de hoy ha dado un vuelco. Y existen múltiples pruebas. Por ejemplo, en la localidad gallega de Sanxenxo, que en verano prácticamente cuatriplica su población y quintuplica su volumen de residuos, han conseguido mejorar la limpieza y aumentar sus índices de reciclaje gracias a una medida que podía parecer contradictoria: retirar las papeleras de las playas.

Playas más limpias

Una iniciativa pionera puesta en marcha en el 2019, que implicaba la concienciación de la ciudadanía, y que ha tenido un resultado satisfactorio. “Cuando se llenaban las papeleras, la gente dejaba la basura en el suelo, luego venían las gaviotas y la esparcían por la arena y el mar. Así que decidimos cambiar de estrategia: las retiramos y colocamos puntos limpios en los accesos con contenedores de todas las fracciones. Los bañistas solo tienen que guardar sus residuos y, a la salida, depositarlos en el lugar adecuado. Estamos contentos, porque el cambio ha sido notable”, resume Juan Deza, concejal de Medioambiente de Sanxenxo.

Campaña de reciclaje de latas en la playa de Canelas de Sanxenxo (Galicia), el pasado verano.

Campaña de reciclaje de latas en la playa de Canelas de Sanxenxo (Galicia), el pasado verano. / Ayuntamiento de Sanxenxo

Todo ello acompañado de otras acciones, que combinan la sensibilización con la acción de recogida directa. “En verano contamos con un equipo de unas 30 personas que van playa por playa recogiendo residuos, y también hemos participado en iniciativas como 'Circula a túa lata', para concienciar sobre la importancia de depositar las latas en el contenedor amarillo”, comenta Deza.

En la otra punta de España, en Fuengirola (Málaga), han optado por incrementar el número de papeleras y puntos limpios a lo largo de todo su litoral marítimo. Este verano cuentan con hasta 156 papeleras para los envases (azul para el papel y el cartón; amarilla para envases de plástico, latas y bricks; y verde para el vidrio) como puntos limpios con los diferentes contenedores. En este caso, se trata de poner las cosas fáciles.

Gestión sostenible en un festival

Otro de los lugares más concurridos durante las vacaciones son los festivales de música que se organizan a lo largo de toda la geografía española y que requieren una correcta gestión de sostenibilidad. Algo que suele recaer en consultoras externas como Eco Event, que esta temporada asesoran a unos 25 festivales en colaboración con Ecoembes, como el Cruïlla en Barcelona o el FIB en Benicàssim.

Tal y como explica una de sus socias fundadoras, Nuria Díaz, es imprescindible trazar un plan previo en base al programa, asistentes, ubicación y barras para la prevención y recogida de los residuos. “También es fundamental convencer a los organizadores de que la sostenibilidad es algo transversal, que debe implicar a todos los ámbitos”, remarca.

A partir de aquí, hay múltiples estrategias que permiten incrementar la sostenibilidad de un festival, como la utilización de vasos reutilizables, la priorización en las barras del grifo o el granel, la instalación de puntos de agua para evitar botellines y, por supuesto, la ubicación de puntos limpios para facilitar la recogida selectiva. En cualquier caso, sea en la playa o vibrando ante un escenario, ya no quedan excusas para no reciclar.

RECICLOS: un incentivo para reciclar

La Ciutat de les Arts i les Ciències de Valencia recibe 11.000 visitantes diarios en verano, y esto supone un notable aumento de los residuos. Por eso, cuenta con ambiciosos planes de recogida selectiva y ha instalado máquinas RECICLOS –el sistema de devolución y recompensa (SDR) desarollado por Ecoembes– en sus diferentes recintos, como el Museu de les Ciències, el Oceanogràfic y el Umbracle. 

“Se trata de un proyecto innovador que persigue evolucionar el sistema de recogida de envases en contenedor amarillo, e incrementar el porcentaje de recuperación mediante incentivos”, explica Antonio Torres, director general de la Ciutat de les Arts i les Ciències, Antonio Torres. Así, el usuario acumula puntos RECICLOS que pueden ser intercambiados, por ejemplo, por donaciones a entidades sociales y ambientales.