Día Mundial del Reciclaje

El compromiso de la sociedad crece: 4 de cada 5 españoles ya recicla en casa

El 82,9% de los ciudadanos deposita los envases de plástico, metales y ‘briks’ en el contenedor amarillo

Ecoembes

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Lara Bau

Los envases de plástico, los metálicos y los 'briks' al contenedor amarillo y el papel y el cartón al contenedor azul. La separación de nuestros residuos por fracciones es un gesto afortunadamente cada vez más común en nuestro día a día y, aunque pueda parecer algo pequeño por la cantidad de tiempo que supone, el secreto está en la suma de conjunto. De hecho, este hábito ambiental se ha convertido en el más frecuente en España y, gracias al esfuerzo comunitario, permite dar un paso adelante en la sostenibilidad del medioambiente. Hoy se celebran las pequeñas acciones vinculadas con el cuidado de nuestro entorno en el Día Mundial del Reciclaje, una fecha cada vez más importante en nuestro calendario por el significado que adquiere en la lucha global contra la crisis climática.

4 de cada 5 ciudadanos españoles (el 82,9%) afirma reciclar en casa, con cubos, bolsas y espacios para reciclar, especialmente en cuanto al contenedor amarillo. Así lo indica el informe 'Hábitos de la población española ante el reciclaje', que ha llevado a cabo el Instituto Catchment para Ecoembes. Es una cifra que no ha dejado de crecer en los últimos años y que, gracias a la concienciación colectiva, promete seguir siendo una tendencia al alza

En el 2021 se enviaron un total de 1.570.513 toneladas de envases domésticos de plástico, metal, 'brik', papel y cartón a las instalaciones recicladoras homologadas, algo que supone un 5,3% más que en el 2020. Unas cifras que, separadas por materiales, representan 667.096 toneladas de envases plásticos, 637.823 toneladas de papel y cartón, 247.157 toneladas de acero y aluminio y 8.436 toneladas de envases de madera. Más allá del reciclaje en los hogares, estas toneladas de residuos proceden también de las más de 500.000 papeleras y contenedores de reciclaje instalados en oficinas, estaciones de transporte y centros deportivos y de ocio. Asimismo, estos desechos también fueron recuperados de las más de 100 máquinas de devolución y recompensa RECICLOS repartidas por el país, y de distintas plantas de residuos urbanos procedentes del contenedor de resto. Gracias a los millones de envases enviados a reciclar el pasado 2021, logró evitarse la emisión de aproximadamente 2,05 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera. Además, se ahorraron alrededor de 20,50 millones de m3 de agua y 5,27 millones de MWH de energía.

Más concienciación

“Estos datos demuestran que el reciclaje en el contenedor amarillo y azul es un hábito muy asentado en la sociedad española. El incremento de más de un 5% con respecto al año anterior nos indica no solo que cada vez reciclamos más, sino también mejor”, destaca Nieves Rey, directora de Comunicación y Marketing de Ecoembes a la mejora de los hábitos de los españoles. 

No es de extrañar que las cifras sean cada vez más positivas. Año tras año, la sociedad está cambiando sus modelos de producción y de consumo, avanzando hacia una economía circular mucho más sostenible. Y es que, como indican expertos en la materia, el cambio no sería posible sin la colaboración de todos los miembros de la sociedad. En palabras de Sònia Llorens, directora de la catedra de Economia Circular del TecnoCampus (UPF): “Conseguir cambiar depende de trabajar de forma holística y con la cuádruple hélice, donde la administración pública, empresa, academia y sociedad adquieran una visión de cocreación conjunta”. 

Desde pequeños

La concienciación colectiva y el fomento del hábito del reciclaje desde pequeños son factores que explican la mejora de las cifras. “Hay que seguir apostando por la formación e información en los colegios, hogares, etc., pues los datos nos demuestran que la concienciación es creciente. El reciclaje debe tener un foco claro en los hábitos de las personas consumidoras junto con una clara reducción de los residuos buscándolos nuevos usos”, explica Fernando Móner presidente de la Confederación de Consumidores y Usuarios. 

Su experiencia coincide con las impresiones de Cristina Martínez, profesora de primaria, que añade: “Es importante que los niños aprendan que deben reciclar porque así ya adquieren esta costumbre desde pequeños”. Es un hábito que también forma parte de las enseñanzas de Pere Torres, educador social del centro San José de la Montaña, en Barcelona: “Al final, es mucho mejor para ellos, porque les enseñas a cuidar su entorno y, de forma directa, su propio futuro”. Sin duda, ya que estos pequeños pasos son imprescindibles para seguir creciendo como sociedad.