ALERTA DE LOS SANITARIOS

Crecen un 22% las denuncias por intrusismo en la fisioterapia madrileña

Con datos del Colegio Profesional de Fisioterapeutas, un 21% de esas denuncias llegaron a motivar una inspección por parte del Ministerio de Sanidad o el de Consumo

Sesión de fisioterapia

Sesión de fisioterapia / EPE

Nieves Salinas

Nieves Salinas

El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (CPFCM) ha alertado este jueves del aumento de casos de intrusismo durante el pasado año. Con datos del colegio profesional, el número de denuncias presentadas aumentó un 21,6% y un 21,1% de esas denuncias, llegaron a motivar una inspección, bien por parte del Ministerio de Sanidad o por parte del Ministerio de Consumo, muy por encima del 10,8% del año 2021. De ese porcentaje, a un 6,25% de los casos se les impuso una sanción económica.

El CPFCM se refiere al intrusismo como un problema que afecta a los profesionales y a los ciudadanos, porque conlleva "un elevado riesgo" para la salud de la población. Recuerdan: sólo un profesional sanitario "formado, capacitado y colegiado" puede valorar, tratar, supervisar o prevenir lesiones y patologías, cada uno en el ámbito de sus competencias. Pablo Herrera, vicedecano del Colegio, explica que, desde la pandemia, han visto cómo aumentaban los casos. También se ha detectado en el entorno de los preparadores deportivos, nutricionistas, etc., apunta.

Es un problema creciente, añade el vicedecano del CPFCM, alimentado por la mayor necesidad de tratamientos "por el empeoramiento de la salud de muchos ciudadanos" (enfermos de coronavirus, mayores con restricción de movilidad, etc.) y "por las dificultades económicas que empujan al paciente a buscar servicios baratos y a otros profesionales a encontrar un hueco para trabajar".

En las redes sociales

Herrera abunda: "otro foco de atención en donde se ha percibido un aumento de intrusismo son las redes sociales. Están proliferando los perfiles que publican contenidos sobre terapias y tratamientos para determinadas patologías, pero detrás de muchos de ellos no hay especialistas sanitarios". Este ámbito, subraya, tiene relevancia "por su gran repercusión entre la población y la rapidez en que se viralizan los contenidos, y puede llevar a difundir información errónea que contribuye a la confusión y el perjuicio de la salud".

"No todos los problemas hay que tratarlos ni requieren tratamientos largos", advierten los fisioterapeutas

Como ejemplos, cita: un profesional puede ser "habilidoso" para dar un masaje, pero si no es fisioterapeuta titulado, no puede proporcionar un diagnóstico o una valoración de la patología del paciente ni pautar un tratamiento. De igual manera, sin el tratamiento adecuado, no sólo puede que un problema no se cure, sino que empeore. En pacientes neurológicos, añade este experto, por ejemplo, no tratar de forma correcta y a tiempo una patología puede suponer que el paciente no recupere toda la funcionalidad. Hay tratamientos en donde la intervención temprana es primordial, reseña.

Otro riesgo es "un exceso de tratamiento, porque no todos los problemas hay que tratarlos ni requieren tratamientos largos: el código deontológico protege al paciente en este sentido", enumera Pablo Herrera quien explica cómo desde el CPFCM han colocado al intrusismo en el foco de sus actuaciones. En Colegio existe una comisión de trabajo sobre este asunto. Uno de sus objetivos prioritarios ha sido, justamente, animar a los fisioterapeutas a detectar y denunciar los casos que encuentren. Asegura la entidad que están consiguiendo que se retiren publicidades engañosas y que los casos lleguen a sanción, "aunque muchas veces son bastante complejos".