Sanidad llama a la policía para desalojar a los médicos encerrados en Madrid

El conflicto entre la Consejería de Sanidad y el sindicato AMYTS a costa de la huelga de médicos y pediatras sube enteros. Crispación máxima entre ambas partes. Diez miembros del comité de huelga permanecen encerrados en la Dirección General de Recursos Humanos del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS), en la calle Sagasta, a la espera de un "interlocutor válido" para desencallar la situación. A las tres de esta tarde, informan desde el sindicato, la Consejería de Sanidad ha llamado a la Policía Nacional para que desalojen las instalaciones y los agentes les han comunicado "amablemente" la posibilidad de detenciones. 

Nueva reunión del comité de huelga de médico y pediatras de Atención Primaria y la Consejería de Sanidad de Madrid y nuevo fracaso. Tras reunirse esta mañana de jueves con la Dirección General de Recursos Humanos del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS) consideran que "no hay propuesta alguna" por parte de la Consejería y el comité ha decidido encerrarse en la Consejería para desencallar la situación y poder llegar a un acuerdo que permita desconvocar los paros. Angela Hernández, secretaria general de AMYTS, sindicato convocante del paro, ha indicado que el encierro continuará hasta que se persone "un interlocutor válido".

Los encierros se repetirán en varios centros de salud de la región por parte del personal sanitario en lo que el sindicato llama "noche blanca" de la Atención Primaria, como el Rosa de Luxemburgo (San Sebastián de Reyes); General Ricardos (Carabanchel); Los Ángeles (Villaverde) o el Centro de Salud General Ricardos. En un receso de la reunión con la Consejería, Ángela Hernández ha señalado que "los planteamientos no se han modificado en absoluto" y avanzó que, desde este mediodía, se encerrarán en esa misma Dirección de Recursos Humanos "hasta que venga alguien que sí que pueda hablar de los problemas y las posibles soluciones de la Atención Primaria madrileña".

Desalojar el edificio

Según ha explicado Ángela Hernández desde el encierro en la Consejería, los diez miembros del comité de huelga han tomado la decisión de permanecer en el edificio "ante la ausencia de comprensión por parte de la Consejería y ante la falta de escucha a los médicos. Es una situación que no nos gusta nada pero creemos que es lo que podemos hacer por todos nuestros compañeros".

A las tres de la tarde de este jueves, tras unas horas de encierro en la sede de Recursos Humanos, en la calle Sagasta de Madrid, la secretaria general de AMYTS comunicaba que la Consejería de Sanidad -sin el consejero, Enrique Ruiz Escudero, y sin el viceconsejero, Fernando Prados, que no han acudido a la reunión- se ha levantado de la mesa y ha llamado a la Policía Nacional. La policía, "amablemente", ha comunicado al comité de huelga la posibilidad de detenciones explicando que se trataba de un edificio público, informa el sindicato. Ellos, a su vez, han explicado que estaban a la espera de "un interlocutor válido para que ponga propuestas veraces para acabar con la huelga de Atención Primaria".

Apoyo de sus compañeros

Antes de llegar a la reunión, varias sociedades científicas mostraban una postura conjunta para arropar a los médicos de Familia y pediatras de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid en huelga indefinida desde el 21 de noviembre, convocada por el sindicato AMYTS. Primera puntualización: la "huelga no reviste de intereses políticos" más allá de la defensa de un sistema asistencial de calidad, aseguran. Las organizaciones reclaman a la Consejería de Sanidad que ponga encima de la mesa de negociación con el comité de huelga "propuestas veraces y garantías de cumplimiento" para salvar la Atención Primaria y desconvocar el paro.

En un comunicado suscrito, entre otras, por entidades como la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap); la Asociación Española de Pediatría (AEP); la Asociación Madrileña de Pediatría de Atención Primaria (AMPap); la Asociación de médicos de Atención Primaria Pediátrica (AMAPED); los directores de centros de salud de Atención Primaria; la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria de Madrid (SEMERGEN Madrid) o los Integrantes de la Mesa de Atención Primaria del Colegio de Médicos de Madrid, las organizaciones dejan claro que no existen fisuras en el conflicto sanitario que se vive en la comunidad.

Han vuelto a pedir, entre otras cuestiones, un "incremento inmediato" del presupuesto de este nivel asistencial hasta, al menos, igualar la media nacional del 15% en 2023 y subidas paulatinas hasta el objetivo del 25% que fija la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2025. Con respecto al reciente comunicado de la Junta Directiva del ICOMEM solicitando la desconvocatoria de la huelga, han mostrado su "total rechazo". Tachan de "lamentable" que, teniendo un 92% de burnout entre los médicos de Familia, un 20% de las consultas sin profesional adscrito y 200 Pediatras menos respecto al año 2019, según datos oficiales de la propia Comunidad de Madrid, "se planteen que debamos seguir así".

Critican a la Consejería de Sanidad por "incumplir" los acuerdos de 2007 sobre "la penosidad del turno de tarde; los acuerdos de septiembre 2020"; la sentencia judicial del Tribunal Superior de Justicia sobre la ausencia de un plan de riesgos laborales; las recomendaciones de la Inspección de Trabajo y "un largo etcétera que supone una violación de nuestros derechos como trabajadores" y censuran que, a pesar de ello, "nuestro colegio profesional no nos defienda".

Más tiempo y presupuesto

Con respecto a la convocatoria de huelga, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, los firmantes del comunicado indican que la Comunidad de Madrid sigue siendo la que menos porcentaje del PIB dedica a la sanidad pública (4,7% frente a la media el 6,9%). Además, continúan Madrid es la comunidad que menos porcentaje del presupuesto sanitario dedica a Atención Primaria (10,7% frente a una media del 13,7% en 2020 y al 25% que recomienda la OMS.

Para los presupuestos de 2023, apuntan, se ha propuesto "un ridículo incremento" hasta el 11,4%, aún lejos de la media nacional del 15% que había en 2020. Tildan de "evidente la falta de liderazgo" de la Consejería de Sanidad, con "un relevo continuo por ceses y abandonos de directivos, sin continuidad y sin renovación de los proyectos desde el Plan de Mejora 2006-2009, aprobado y presupuestado por la Asamblea por unanimidad, que ha derivado en el caos organizativo actual".

400.000 madrileños sin médico familia

Se calcula, continúan los firmantes, que ya hay 400.000 madrileños sin médico de Familia o pediatra, con sus plazas sin ocupar desde hace meses e incluso años. Así las cosas, piden al Gobierno regional y a la Asamblea de la Comunidad de Madrid una serie de recursos para desconvocar la huelga. El antes mencionado del "incremento inmediato" del presupuesto de Atención Primaria o asegurar el tiempo adecuado por paciente con al menos 10 minutos y un máximo de 31 pacientes por jornada en las consultas de medicina de Familia y 21 en Pediatría, con el objetivo de no exceder el 70% de la jornada y poder atender actividades de formación, docencia, organización, investigación, actividades comunitarias y descansos reglamentarios.

Los facultativos reclaman la "cobertura inmediata" de todas las plazas de medicina de Familia y pediatría vacantes con ofertas competitivas para la atracción de talento.

Además, reclaman la "cobertura inmediata" de todas las plazas de medicina de Familia y pediatría vacantes con ofertas competitivas para la atracción de talento; de las ausencias de los médicos titulares del 100%, el cumplimiento de los acuerdos firmados por la Consejería de Sanidad en 2006 y 2020; medidas eficaces para facilitar la conciliación o aumentar la actividad asistencial en horario/turno de mañana y aumentar los espacios disponibles.

Solicitan, también, la desburocratización de la consulta médica; implantar la emisión de partes de baja en hospitales o reconocer las competencias profesionales de enfermería con herramientas que les permitan asumir plenamente la gestión de crónicos y actividades preventivas. Las organizaciones insisten en reclamar a la Consejería que ponga encima de la mesa de negociación "propuestas veraces y garantías de cumplimiento" para salvar la Atención Primaria. Y zanjan: la "huelga no reviste de intereses políticos" más allá de la defensa de un sistema asistencial de calidad.