CONFLICTO SANITARIO

10 minutos por paciente, el "grito de auxilio" de los médicos de familia

Los médicos llevan años clamando para poder dedicar, al menos, 10 minutos a cada paciente que entra en su consulta de Atención Primaria pero, la sobrecarga de trabajo que tienen, lo convierte en un imposible.

Antonio Fernández-Pro Ledesma, presidente de la SEMG, habla de un tiempo "casi simbólico" y de la resaca emocional que tienen los médicos y, lo que de verdad le preocupa, es "la falta de empatía de los políticos".

Puerta de un centro de salud madrileño

Puerta de un centro de salud madrileño / EUROPA PRESS

Nieves Salinas

Nieves Salinas

Años llevan los médicos de familia pidiendo, al menos, 10 minutos para poder atender en condiciones a cada paciente que entra en su consulta en un centro de salud.

Es, además de una ya viejísima reclamación, un tiempo simbólico. Casi un "grito de socorro", admite a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA el doctor Antonio Fernández-Pro Ledesma, presidente de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG). Porque, si se mide en minutos la atención que necesita cada persona que acude a ver a su médico, los hay que necesitan cinco y, otros, media hora.

Detrás del casi lema '10 minutos por paciente' -lo que en estos días, en huelga, reclaman los facultativos de Atención Primaria de Madrid- hay mucho más: "Que liberen tiempo médico, por favor, para que lo podamos dedicar a nuestros pacientes y atenderles en condiciones".

El doctor Fernández-Pro Ledesma habla con este diario en un escenario de enorme convulsión en la profesión. Sus compañeros de Atención Primaria de Madrid arrancaban este lunes una huelga en la que piden, entre otras cuestiones, acotar las agendas y tiempo para sus pacientes.

El sindicato AMYTS solicita un máximo de 31 pacientes por consulta de Medicina Familiar y Comunitaria y 21 para Pediatría. Y un mínimo de 10 minutos por persona. Además, establecer "una única agenda por médico nominal y sin tener que atender pacientes de otras agendas, tal y como está sucediendo actualmente" y la "consolidación de horarios que permitan la conciliación y que es uno de los principales motivos que empujan a nuestros profesionales a abandonar la Atención Primaria".

El presidente de la sociedad científica explica que, cuando los médicos plantearon contar con, por lo menos, 10 minutos por cita, se planteó como una media de tiempo que les permitía planificar sus agendas, esas que siempre tienen desbordadas. "De eso a lo que realmente tenemos, hay un abismo. Evidentemente, lo que planteamos, y bajo la situación que tenemos, de tanta falta de profesionales, lo que decimos es: "Dennos tiempo para hacer medicina, no para hacer papeles y burocracia".

Los 10 minutos de Madrid

Precisamente en Madrid, el pasado julio, los cinco sindicatos de la Mesa Sectorial de Sanidad (SATSE, CCOO, AMYTS, CSIT-UP Y UGT) consiguieron, tras un año de negociación en el seno del Grupo de Mediación de Riesgos psicosociales -creado en 2021-, llegar a un acuerdo con la Gerencia de Atención Primaria para establecer en las agendas profesionales, límites de tiempo por paciente en las consultas tanto las citadas como las no demorables.

Se trataba de llegar a un primer consenso sobre la carga de trabajo y continuar en reuniones de mediación posteriores. Tras tres meses de espera a la firma definitiva por parte de la Administración, en octubre 2022, la Consejería de Sanidad comunicó su negativa a firmar el acuerdo.

Marcha por la sanidad pública en Madrid.

Marcha por la sanidad pública en Madrid. / N.S.

El acuerdo establecía un tiempo mínimo para pacientes sin cita de 10 minutos, limitaba los tiempos respecto a repartos en caso de ausencias a 10 minutos/paciente, a partir de las 48h de ausencia; fijaba un tiempo mínimo para atención domiciliaria de 30 minutos o consolidaba la agenda asistencial en un máximo del 70% de la jornada laboral (300 minutos).

El documento tenía su origen "en la gran preocupación" de las organizaciones por la falta de medidas preventivas frente a los importantes riesgos psicosociales a los que se enfrentan los profesionales en los centros de salud de Atención Primaria, preocupación que se ha visto acrecentada por los recientes acontecimientos", indican desde estas organizaciones.

El pasado mes de junio de 2021, la Inspección de Trabajo propuso el inicio de una mediación con la Comunidad de Madrid, "ante la inexistencia de un cronograma de implantación de medidas preventivas".

Se estableció, como primer objetivo, abordar la carga de trabajo y "determinar unos ratios permanentes y límites que no deberían nunca ser superados, trabajando toda la información disponible". Ahora, denuncian esos sindicatos que ya en verano pedían limitar la carga de trabajo, la Consejería de Sanidad, se niega a hacerlo.

La presión emocional

"Yo también pienso que no se ha sido muy consciente del punto emocional, crítico, de presión, que está viviendo el profesional sanitario después de dos años y medio de pandemia. Esa presión emocional termina con cualquier equilibrio. Que con la que está cayendo no haya un diálogo fluido, como persona y como profesional, me cuesta muchísimo entenderlo", señala desde la SEMG su presidente.

"Se habla de la prevención de salud mental, de suicidio, de salud pública...pero eso necesita tiempo. ¿Cómo lo vas a tener con 70/80 pacientes diarios?. Eso es imposible", dice el presidente de la SEMG

"Se habla de la prevención de salud mental, de suicidio, de salud pública... Pero todo eso necesita tiempo. ¿Y cómo lo vas a tener si tienes que ver 70/80 pacientes diarios? Eso es imposible", añade. Y, cuando se le plantea que, por qué en este momento se vuelve a vivir semejante agitación en la escena sanitaria, asegura que "la voluntad política de solucionar las cosas está en los presupuestos y como realmente no ha habido ninguna modificación, no ha habido ninguna solución. Esto es la consecuencia, otra vez más, porque esto es como las olas epidémicas, de lo que se está viviendo", insiste el médico.

"Hay que sentarse y resolver esto si, entre todos, queremos dejar una sanidad pública resolutiva", zanja el doctor Fernández-Pro.

Recuerda que el último "gran colapso de la Primaria en la pandemia fueron las bajas laborales con procedimientos meramente administrativos". Con lo cual, vuelve a esa legítima aspiración de contar con 10 minutos, es decir, que les liberen del papeleo y les dejen ocuparse del acto médico.

¿Por qué vuelve a ponerse ahora sobre la mesa esta reclamación que tantos años llevan planteando? "Porque la situación es francamente mala. Es increíble que necesitemos 10/15 días para tener una consulta cuando se solicita al médico y, realmente, no pongamos medidas", indica el doctor

Para el presidente de la SEMG "el gran drama de todo esto es la angustia que viven los profesionales y quien, pierde, es el ciudadano. El que menos sufre es el que tiene medios económicos para refugiarse en la medicina privada, que es legítimo por otra parte. Yo soy optimista, creo en la profesión, en las personas, pero hay que sentarse y resolver esto si, entre todos, queremos dejar una sanidad pública resolutiva, de calidad y eficiente", zanja.