Crisis de Atención Primaria

Las listas de espera se desbocan: tres semanas para ver al médico de familia

Las demoras para visitar al médico o pediatra se sitúan entre 15 y 20 días en unos centros de salud que, critican las organizaciones sindicales, están ‘tocados’ y no se encuentran preparados para recuperar la normalidad tras la pandemia

Sanitarios andaluces en una concentración en Sevilla

Sanitarios andaluces en una concentración en Sevilla / EFE/ Raúl Caro

Nieves Salinas

Nieves Salinas

La Atención Primaria española se asfixia cada día un poco más: ya acumula listas de espera de hasta tres semanas para ver al médico de familia. Las quejas se suceden desde todas las comunidades autónomas. Ni el descenso de casos de coronavirus por el avance de la vacunación ha conseguido aliviar la extrema tensión, histórica, que viven los centros de salud. Tras más de un año y medio de pandemia y pese a los planes para su rescate, la “triste realidad” es que ya no dan más de sí, se quejan los sanitarios a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA.

Bajo el lema “Salvemos entre todos la Atención Primaria”, hasta cincuenta organizaciones -desde la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), pasando por la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO, UGT, la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SEMFyC) o Medicusmundi- presentan este miércoles sus propuestas para superar “la situación crítica por la que atraviesa este pilar básico del sistema público de salud”.

Según avanzan a este diario algunas de las organizaciones convocantes, en el manifiesto que harán público darán a conocer una serie de medidas a adoptar para, precisamente, acabar con esas demoras. Entre otras, en época post-covid, recuperar la actividad presencial en los centros de salud -unos 3.000 y 10.000 consultorios en toda España- poniendo especial énfasis en la dificultad de los más mayores para acceder a su médico de forma telemática y acabar así con la “inequidad” que se está dando entre las comunidades autónomas ya que no todas han recuperado esa atención al cien por cien.

Recuperar la normalidad

Un tanteo hecho por la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) entre las diferentes regiones sitúa entre 15 y 20 días las demoras para acceder al médico en unos centros de salud que, critican, se han quedado ‘tocados’ y no se encuentran preparados para recuperar la normalidad tras la pandemia. Afrontan la reanudación de las citas presenciales y la vacunación en precario, insisten, y, en el horizonte, aparece el fin de aproximadamente 50.000 contratos de refuerzo (por la covid-19) que, previsiblemente, finalizarán a final de año.

"Esto no se puede recuperar sino se adoptan medidas excepcionales” señala el responsable de Sanidad de CSIF

“¿Cómo se les ocurre despedirlos?. Esto no se puede recuperar sino se adoptan medidas excepcionales” señala a este diario el responsable de Sanidad de CSIF, Fernando Hontangas, quien, además, llama la atención sobre, también, el aumento de las listas de espera diagnósticas o quirúrgicas tras la crisis sanitaria. “Ha habido un parón absoluto en pruebas y quirófanos”, afirma.

Plantillas deficitarias

La Atención Primaria es donde se solucionan el 90% de todas las patologías de los enfermos que acuden a la sanidad pública, por tanto, "por definición, no debería tener nunca retrasos, ni demora para ver al médico o al pediatra pero es la “triste realidad”, dice desde Murcia María José Campillo, secretaria de Finanzas y Servicios de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) en la región.

El Ministerio de Sanidad destinará 176 millones al desarrollo del marco estratégico de Atención Primaria y Comunitaria y 44 millones para ampliar los servicios de salud bucodental. Es una de las partidas más importantes dentro del proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el próximo año. Pero, ni a las organizaciones sindicales ni a las sociedades científicas, les convence ese refuerzo. Tampoco los planes autonómicos para salvar un nivel sanitario que ya antes de la pandemia estaba muy tocado.

Si el médico no está, por baja o vacaciones, se reparte el resto de cupo de pacientes entre otros compañeros lo que genera retrasos

Campillo explica, por ejemplo, que, como en otras comunidades, las plantillas que hay actualmente en los ambulatorios murcianos son deficitarias, no pensadas “para cubrir incidencias” -como cuando los sanitarios están de vacaciones o de baja por enfermedad, puntualiza- con sustitutos, que, por cierto, no hay, apostilla. Una precariedad que, indica, provoca situaciones como las vividas este verano en la comunidad con centros que sólo contaban con un 30% de su plantilla, lo que “es un disparate”.

Si el médico no está, indica, se reparte el resto de cupo de pacientes entre otros compañeros lo que, inmediatamente, genera retrasos y listas de espera. La solución que aporta el Sindicato Médico de Murcia para bajar esas listas de espera pasa por establecer módulos de actividad en horario de tarde como los que hay en Atención Hospitalaria para que, de forma voluntaria, los facultativos que quieran hacer horas extra, remuneradas, puedan apuntarse.

"Necesitamos personal de forma acuciante"

Desde Galicia, Matilde Maceiras, médico de familia y delegada de CESM en esta comunidad para Atención Primaria, señala que las esperas en la comunidad para visitar o tener cita telefónica varían en función de las provincias. La situación, explica, igual de asfixiante que en otras comunidades. “Necesitamos personal de modo acuciante”, resume.

En Galicia, organizaciones sindicales con representación en la Mesa sectorial de Sanidade (como CIG, CCOO, UGT, CSIF y Satse) ya han comenzado a movilizarse para exigir una solución. Mientras, hace apenas unos días, el titular del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, anunciaba que el Plan de Infraestructuras Sanitarias de Atención Primaria de la comunidad contempla la puesta en marcha de 37 nuevos centros de salud y la ampliación y reforma de otros 14.

Una sanidad infrafinanciada

Desde Sevilla, el presidente del Sindicato Médico, Rafael Ojeda, llama la atención a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA sobre la “infrafinanciación” de la sanidad andaluza. El colectivo de médicos, aseguran, lleva años sometido al “maltrato” de la administración. Piden la negociación de un Plan de Actuación y, sobre la mesa, ponen la escasez de médicos, la imposibilidad de atender a los pacientes en plazos de tiempo razonables y la realidad de que muchos médicos deben prolongar su jornada ordinaria para seguir atendiendo a sus pacientes.

“No se ha hecho nada. Anuncios, propaganda...Pero sin nada sustancial”, critican desde el Sindicato Médico de Sevilla

“Todas las administraciones tienden a dulcificar las estadísticas”, opina Ojeda. Y aún así, los datos no son “buenos”, agrega. Además, como sus compañeros, recuerda que el sistema andaluz ya tenía una lista de espera crónica a la que se ha sumado la pandemia: “No se ha hecho nada. Anuncios, propaganda...Pero sin nada sustancial”. Las demoras en Atención Primaria pueden llegar hasta los doce días en algunos centros de salud y hay médicos que atienden hasta 60 pacientes -a veces hasta 80- en una misma jornada.

El agravio de los sueldos

Critican, además, que las retribuciones de los médicos de este nivel son inferiores a las de los facultativos de Atención Hospitalaria: la diferencia bruta anual entre un médico de hospital y uno de Primaria es de 8.487 euros al año. Los profesionales andaluces ponen como ejemplo la Comunidad de Madrid que, explican, se ha comprometido a igualar esos salarios. En esta región, detallan, la diferencia retributiva es de 5.757 euros, inferior a la de su comunidad.

En Madrid se contempla una inversión de 200 millones para reforzar los centros de salud durante los próximos dos años

En Madrid, la Comunidad ha puesto en marcha el Plan Integral de Mejora de la Atención Primaria, que contempla una inversión de 200 millones de euros para reforzar la atención en los centros de salud durante los próximos dos años. Entre otras medidas, se contempla la creación de 1.200 plazas de distintas categorías, mejoras salariales, digitalización de consultas y la construcción de nuevos centros.

Sin embargo, los cinco sindicatos de la Mesa Sectorial de Sanidad ya han advertido de que esta medida -que dudan que llegue a aplicarse porque, señalan, no sería la primera vez que algo se anuncia y luego no se cumple- no llegará ni al 8% de los profesionales y, además, no ataja las carencias que tienen los ambulatorios. Recuerdan, de paso, que todos los SUAP (Servicio de Urgencias de Atención Primaria), continúan cerrados.

Un presupuesto insuficiente

Con este escenario, según señalaba recientemente a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, el doctor Salvador Tranche, presidente de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC), el presupuesto designado por el Ministerio de Sanidad para reflotar Primaria, los mencionados 176 millones, "se queda corto".

Según la sociedad científica, esa partida presupuestaria irá a parar a la compra de tecnología para los ambulatorios. Una cantidad a la que habría que sumar una cifra similar que aportarían entre todas las comunidades y que también estaría destinada a dotar a los centros de salud de nuevo equipamiento tecnológico, tal y como acordaron Gobierno y comunidades cuando anunciaron el nuevo plan de refuerzo que quieren tener terminado antes de finalizar 2021.