CINE ESPAÑOL

El tesoro que Pedro Almodóvar regaló y compran ahora coleccionistas por 500 euros

El director manchego pidió imprimir unos 1.000 ejemplares de un libro de atrezo prácticamente en blanco que salió en varias escenas de 'La flor de mi secreto'

Portada de la 'Antología de Amanda Gris', uno de los ejemplares de atrezo de 'La flor de mi secreto'.

Portada de la 'Antología de Amanda Gris', uno de los ejemplares de atrezo de 'La flor de mi secreto'. / Alba Vigaray

Es 1995. Una mujer sube la calle Preciados y, casi a la altura de la plaza de Callao, se detiene para mirar el escaparate de Fnac. En él cuelga el ejemplar de la antología de una escritora de la que nunca había oído hablar, Amanda Gris. La portada de este libro de tapa dura le llama la atención: una mano femenina adornada por un brazalete de brillantes y un anillo sostiene con delicadeza una rosa, ante un cielo azul con nubes y junto a otras flores de la misma especie. "Amanda Gris", en dorado, y "antología", en rosa, son las únicas pistas que esta curiosa puede seguir para entender qué pasa.

Entra a la tienda y pregunta por el libro. Se lo entregan y, al abrirlo, encuentra con dos ilustraciones casi eróticas en las guardas, la página con los datos de edición e impresión del ejemplar y una dedicatoria. "Gracias por abrir este libro. Como puedes comprobar, después de esta página, no hay nada escrito. Tienes en tus manos la novela de tu vida y esa sólo puedes escribirla tú. Sé que no puedo obligarte, pero me gustaría que lo compraras. Por si te ayuda a decidirte, el libro fue utilizado como atrezo en mi película 'La flor de mi secreto'. Está hecho con papel ecológico y de gramaje muy alto. En cualquier caso, recibe un beso en la boca (tal vez un beso negro), un abrazo, un apretón de manos o lo que más te apetezca de Pedro Almodóvar". Completan el libro hojas en blanco y los títulos de las obras de la tal Amanda Gris editados por Fascinación en la contraportada, entre ellos, Esclava sin amo, Me pliego a tus deseos o Casado y drag queen.

Guardas del ejemplar de atrezo de 'La flor de mi secreto' que posee Enrique Aparicio.

Guardas del ejemplar de atrezo de 'La flor de mi secreto' que posee Enrique Aparicio. / ALBA VIGARAY

La mujer no entiende nada, pero decide invertir 1.000 pesetas en el extraño ejemplar, cinco veces menos que lo que la protagonista de este filme de 1995, Leo Macías, interpretada por Marisa Paredes, le pagó al hijo drogadicto de su editora por intentar quitarle unos botines en la plaza de Los Carros. Si la mujer que entró a la tienda de Fnac en Callao hubiera sido real, ahora podría vender esta joya almodovariana por cientos de euros. Los únicos dos ejemplares que actualmente aparecen a la venta en Wallapop se venden por 499 y 550 euros. Desde el equipo del director manchego recuerdan que se imprimieron unos mil ejemplares de la Antología de Amanda Gris, "un palé entero", el mismo que cargaba en la película la segunda edición de este libro.

"Estos libros se han ido regalando", dicen, pero no recuerdan a quién, porque "no llevamos lista de ello". Otros 300 ejemplares se pusieron a la venta en Fnac, según recoge un artículo de El País de la época. "Los que quedan están archivados en nuestras oficinas", sostienen. Prácticamente nadie entendía por qué estaban esos libros a la venta o por qué se mantuvo colgada de la fachada que da a la plaza de Callao durante dos semanas una pancarta de 38 metros de alto por nueve de ancho que promocionaba el libro y que se ve en la película desde la casa del personaje que interpreta Juan Echanove. El propio Pedro Almodóvar tuvo que aclararlo: "Se trata de material de atrezo de mi película La flor de mi secreto. Amanda Gris es el seudónimo de Leo, la protagonista", desveló mientras el equipo se preparaba para rodar una escena.

El periodista y podcaster Enrique Aparicio guarda uno en su casa, entre otros cientos de libros y objetos de colección. "Podría quedar muy bien diciendo que sabía que esto existía y que llevaba años buscándolo, pero no es verdad. Para mí fue una sorpresa que hubiesen editado la Antología de Amanda Gris y, cuando supe de su existencia, fui como una tarántula a buscar en todos mis sitios habituales si estaba". Y lo encontró, aunque tuvo que regatear. "Al principio, lo tenían a 250 euros y lo saqué por menos de la mitad", reconoce.

"El próximo se venderá más caro"

Este coleccionista de "gustos barateros", que tiene colgados en sus paredes dibujos de Ocaña, una foto de Raphael y un póster de Sara Montiel, resume que "la gracia [de que pusieran el libro a la venta] era que no se avisaba". "Como tenían que rodar escenas de la película en la Fnac de Callao, montaron todo el tinglado, editaron el libro, porque realmente les hacía falta para el atrezo, y, ya que iba a estar allí, lo vendieron. A mí me parece una genialidad", sostiene.

Desde que Aparicio publicó un vídeo en sus redes sociales en el que daba a conocer la existencia de este tesoro del universo Almodóvar, le ha escrito "un montón de gente que me dice que tiene esto en busca y captura", por lo que apuesta porque "el próximo se venda más caro de lo que yo lo compré". "Hablar de estas cosas, les sube el precio y yo al final me doy cuenta de que se lo estoy poniendo más difícil a quien venga después, pero el coleccionismo funciona así: las cosas valen lo que alguien esté dispuesto a pagar por ellas. Con este objeto, creo que hay mucha gente que está dispuesta a pagar mucho dinero y, cuando dentro de muchos años, espero, muera Almodóvar, se le añadirá un cero a todo", dice este periodista, que prefiere no desvelar cómo consiguió su Antología de Amanda Gris.

Guarda su ejemplar en el espacio dedicado en la estantería de su salón al director manchego, que "no ha generado tanto merchandising" de sus películas. "Yo no tengo un apego a las cosas como para que me entierren como los faraones y podría venderlo, si me veo en un apuro, aunque me costaría porque soy mitómano y, como diríamos en mi pueblo manchego, me luce muchísimo tener esto", señala Enrique Aparicio, que presume de otras reliquias como el VHS porno de Carmen de Mairena, "que dejó de circular", o las muñecas de acción de Las chicas de oro que le enviaron desde Estados Unidos.

Enrique Aparicio rebusca en la parte de su estantería dedicada a Almodóvar.

Enrique Aparicio rebusca en la parte de su estantería dedicada a Almodóvar. / ALBA VIGARAY

La flor de mi secreto es, junto a Volver y Qué he hecho yo para merecer esto, una de las películas favoritas de este periodista, en parte porque "es muy manchega y eso a mí me apela mucho". "Que Chus Lampreave le diga a Marisa Paredes un 'me lo estaba figurando', es como me lo diría mi madre a mí. O 'estás como vaca sin cencerro'. Eso lo he oído yo en mi casa toda la vida", reconoce Enrique Aparicio, que considera que este filme se posiciona como "la obra maestra más desconocida de Almodóvar".