ELECCIONES

'Charito', candidata a alcaldesa a sus 99 años: "Si me eligen por un milagro, pondré derecho el pueblo"

En las elecciones de 2019 consiguió una concejala con Abuelas por Patones, y ahora se vuelve a presentar porque "el alcalde no ha hecho nada de nada"

El punto estrella de su programa, construir un aparcamiento subterráneo para que siga viniendo el turismo: "Quiero hacer algo que quede para siempre; yo no ganaría un real"

'Charito' sonríe mientras posa para la fotógrafa en su casa de Patones.

'Charito' sonríe mientras posa para la fotógrafa en su casa de Patones. / Alba Vigaray

María del Rosario Testa -Charito como quiere que la llamen- disfruta del sol del mediodía en la terraza de su casa, arriba del todo, casi pegado a las eras, con una mantita sobre los hombros, que aquí por la sierra de repente te viene un aire y te da un escalofrío. Tiene los mismos ojos brillantes que hace cuatro años, cuando se presentó a alcaldesa de Patones (Madrid) a sus 95 años, medio siglo después de que llegara con su marido al pueblo en un cuatro latas con sus hijos y de que se enamorara tanto de sus casas de pizarra y sus cuestas empinadas que decidiera quedarse aquí a vivir. Los mismos ojos brillantes, sí, aunque ha perdido un poco de agilidad física -camina ayudada por dos bastones-, que no verbal. Cuatro años después de obtener una concejala con su partido, Abuelas por Patones, con 49 votos de 536 censados, ella vuelve a la carga. ¿Por qué? “Es que el alcalde no ha hecho nada de nada”.

Estamos en Patones de Arriba, sin duda uno de los pueblos más bonitos de España. La circunscripción electoral engloba el pueblo de abajo, donde vive el grueso de la población, y el de arriba, donde hay censadas 55 personas, y cuya actividad principal es el turismo, ya que hay 13 restaurantes. Para subir al pueblo turístico, al que en fin de semana llegan cientos, acaso miles de personas, hay que recorrer una sinuosa carretera en la que hay tramos que no pueden cruzarse dos coches a la vez. Una vez llegado al pueblo, hay que buscarse la vida además por una pista de montaña donde si te descuidas caes precipicio abajo.

Charito muestra las flores de su patio en Patones. 

Charito muestra las flores de su patio en Patones.  / Alba Vigaray

Autobuses

La situación de colapso llevó al Ayuntamiento, en la actualidad gobernado por el PSOE, a prohibir el acceso al pueblo de arriba sábados y domingos. Los turistas deben dejar el coche en un aparcamiento de tierra abajo, pagar tres euros y coger uno de los dos autobuses sufragados por los restaurantes. “Si es que ya no se puede ni subir al pueblo”, protesta Charito, cuya familia no tiene restaurante propio, pero es muy “amiga” de los dueños de los establecimientos. Tanto los habitantes particulares como los hosteleros han hecho frente común contra el actual regidor. “Si es que los de abajo nos consideran extranjeros”, explica la mujer, que lleva un bonito vestido floreado y tiene el pelo de blanco algodón. Le acompaña uno de sus hijos, Enrique, y una joven que hace las funciones de cuidadora.

Para solucionar el problema, 'Charito' presentó ya hace cuatro años un minucioso proyecto de aparcamiento subterráneo -bajo una de las lomas circundantes-, que generaría “beneficio” al pueblo y no un sobrecoste como el que han planteado desde el PSOE. “Hay que hacer un parking bien hecho, no esa porquería a la española que hay abajo. Yo he ido en Alemania en taxis [sic] y cuando han aparcado he bajado del coche y no golpeaba la puerta con el de al lado. Sería un proyecto muy bien hecho, con baños y todo, que quedaría para siempre”.

Detrás de la problemática está que en cuanto los restaurantes “no paguen los autobuses se estropeará el negocio”. “Quieren arruinar al pueblo, si asfixias a los restaurantes algunos se tendrán que marchar… yo no gano un real con todo esto, pero me gusta tanto Patones que quiero que siga adelante. El turismo trae dinero para todos”, asegura la abuela, que ha renovado su lista con mujeres de entre 70 y 80 años. “Tienen muy buena facha”, presume sonriendo frente al geranio que le regalaron el pasado 23 de abril, cuando celebró que cumplía 99 primaveras.

Díaz Ayuso

Ella es consciente de que tiene muy complicado ganar porque siempre prevalecerá el deseo del pueblo más habitado, que es el de abajo. “Es que ellos no me pueden votar jamás porque nadie quiere que vengan a mandar a su casa”. Aun así, aprovecha el revuelo mediático para meter presión y que se oiga su demanda, de la que ya tiene constancia la actual presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata a la reelección por el PP, Isabel Díaz Ayuso: "Escribí una carta a Ayuso para reunirme con ella para contarle el proyecto, y un año después me dijeron que lo iba a mirar alguien de los suyos y ya no supe más. Un día vino a poner una primera piedra en Patones de Abajo, y cogí del brazo a cada uno, al alcalde y a Ayuso, para hablar del tema del aparcamiento, pero cada uno miraba a un lado y parecía que no querían tratarse".

Charito, en su casa de Patones, municipio del que se enamoró hace más de 50 años. 

Charito, en su casa de Patones, municipio del que se enamoró hace más de 50 años.  / ALBA VIGARAY

Todavía recuerda 'Charito' sorprendida como el día de las pasadas elecciones de 2019 llegaron hasta siete televisiones a entrevistarla, y le dio rabia porque “una radio de EEUU” trató de entrevistarla pero no fue posible. Una de sus seis nietas, que está en aquel país viviendo, sí que la vio por la tele. “Pero, mira, ¿qué hace mi abuela en la tele de aquí?”. Dice que tras la legislatura vivida en la oposición no le queda otra que presentarse, porque “lo único que ha hecho el alcalde es poner dos columpios”.

- El alcalde no nos ha hecho ni caso, nada de nada. Hace tres años leímos que nos daban un dinero para Patones de Arriba para embellecer el pueblo y le pregunté que cuándo llegaba eso. Me dijo que en cuanto llegara el dinero quitarían los cables de la luz y el teléfono que hacen feo al pueblo y los pasarían bajo tierra, pero han pasado los cuatro años y no ha llegado el dinero.

Sobre la política nacional actual prefiere no opinar porque es “muy difícil gobernar para todos los españoles”, pero sí le admite la “buena planta” a Pedro Sánchez. Dice que seguirá la noche electoral por la televisión, en casa, pero que para votar preferirá estar tranquila, por eso hará el voto por correo. ¿Y si gana? “Si salgo de alcaldesa por un milagro pues te diría que iba a poner derecho el pueblo, fijate, a mis años... pero es que veo mucha injusticia”.