HOJA DE RUTA

Junts se propone "confrontar" con el PSOE y el PSC sin romper la negociación: "Hay que mantener en tensión los gobiernos"

Los posconvergentes aseguran que su único propósito en el Congreso es "forzar al Estado a detener la represión" y conseguir "una negociación que satisfaga las aspiraciones políticas, sociales y ambientales del pueblo catalán", en cuanto a la autodeterminación

El expresident, Carles Puigdemont, y el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, durante una reunión en Bruselas para abordar la investidura de Pedro Sánchez.

El expresident, Carles Puigdemont, y el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, durante una reunión en Bruselas para abordar la investidura de Pedro Sánchez. / E.P.

Barcelona

Junts considera que las relaciones con el Gobierno son "inevitables" con el "contexto político actual". Sin embargo, el partido defiende que no se siente parte de ninguna "mayoría parlamentaria" y que su estrategia es la de la "confrontación" y la de negociar "pieza a pieza sin atender a los chantajes mediáticos". Así se afirma la nueva hoja de ruta del partido que deberá votarse en el congreso que el partido celebrará el último fin de semana de octubre en Calella. "Es necesario mantener en tensión los gobiernos del Estado y de la Generalitat", añade el texto que actualiza la estrategia de los posconvergentes tras las elecciones catalanas del pasado 12 de mayo.

"Es necesario confrontar políticamente con el PSOE y el PSC, que a la práctica son lo mismo, denunciando sus sistemáticos incumplimientos y falsas promesas", prosigue el documento que se ha enviado esta misma tarde a la militancia y que ahora podrá enmendarlo. Con este planteamiento, la dirección de Junts busca afianzar la negociación establecida con el PSOE desde la investidura de Pedro Sánchez y también lanzarles un aviso.

"Los pactos vinculan a las dos partes y si se rompen unilateralmente o se incumplen de forma reiterada, la única salida lógica es plantarse", advierte la ponencia, que asegura que la formación no se sentirá responsable en ningún caso de una repetición electoral, ya que su objetivo no es "contribuir a la gobernabilidad de España". Sin embargo, los posconvergentes no incluyen en el documento ningún mecanismo para reevaular con la militancia su apoyo a Sánchez, como sí lo hicieron en 2022 con una consulta interna que acabó decidiendo salir del Govern.

Así, el texto también subraya que no van a "rehusar la negociación", pero que tampoco regalaran sus votos a un "Gobierno a Madrid, del signo que sea, a cambio de nada". Con este planteamiento, Junts busca desvincularse de la política de bloque y a pesar de reconoce que el PSOE "actúa de formas más suaves que el PP", también asegura que "aunque su forma de hacer centralista y española sea más sibilina que la del PP y Vox no quiere decir que no actúe en contra de los intereses de Catalunya".

Con todo, los posconvergentes aseguran que su único propósito en el Congreso es "forzar al Estado a detener la represión" y conseguir "una negociación que satisfaga las aspiraciones políticas, sociales y ambientales del pueblo catalán", en cuanto a la autodeterminación. También aspiran a "desenmascarar la estrategia catalanófoba de las élites que controlan y dirigen los poderes del Estado español".

Unidad independentista

Por otra parte, la ponencia estratégica de Junts también hace una cierta autocrítica de los hechos de 2017 y apunta a que la llegada del PSC a la Generalitat, tras la decisión "internamente controvertida" de ERC, obliga a "iniciar una nueva etapa del 'procés' "centrada en la reanudación". De esta manera, el documento señala como un "error" no haber declarado la independencia en los días posteriores al referéndum y "especialmente tras la jornada de huelga general del 3-O", al mismo tiempo que considera necesario trabajar por una nueva unidad y rebajar las hostilidades" entre independentistas.

Así, el texto asegura que "la situación actual exige definir nuevas estrategias, disponer de un partido fuerte, renovar alianzas y ayudar a recuperar la fuerza de la sociedad civil con el objetivo de hacer efectivo el ejercicio del derecho de autodeterminación". En este punto, Junts propone que sea, justamente, la sociedad civil la que cree una nueva "entidad paraguas" para que "partidos, organizaciones y entidades" se agrupen "en forma confederativa para facilitar sinergias y estrategias institucionales compartidas".

La principal tarea de esta entidad, según los posconvergentes, sería promover "el estudio y debate en profundidad de los problemas y retos principales de la sociedad catalana" a través de un "observatorio de pensamiento que trabajara con los mejores expertos del país e internacionales". El objetivo, explicitan, sería "la reconstrucción del movimiento independentista", desde un "espíritu de fraternidad", para "encarar la lucha por el estado propio".

A nivel electoral en Catalunya, proponen "concentrar todos los esfuerzos en derrotar a los partidos españolistas" y lanzarse a buscar el voto abstencionista, que consideran que hace crecer "el nacionalpopulismo con un pensamiento mágico que da soluciones simplistas a realidades complejas", una referencia velada a Aliança Catalana, aunque se evita mencionarla directamente.