El "caso Cuarteles" continúa en el Congreso: acudirá el número dos de Marlaska

No acudirá la directora de la Guardia Civil el jueves que viene, como en un principio solicitó el Gobierno. María Gámez ya no está en el cargo después de que trascendiera una serie de contratos presuntamente irregulares de su marido con la Junta de Andalucía. Su sucesora es Mercedes González, quien tomará posesión del cargo esta misma semana. No tiene sentido, y es de hecho perjudicial, que la más alta autoridad del instituto armado vaya a una cita exigente del Congreso con sólo 48 horas de bagaje en el puesto.

El Gobierno registró en su lugar la comparecencia del secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, número dos de Interior, persona de confianza de Fernando Grande-Marlaska. Ello anticipa una sesión áspera, como la que protagonizó este lunes el titular de la cartera. Como hiciera en un pleno anterior, el ministro acusó a los anteriores gobiernos del PP de no investigar el caso Cuarteles en 2017 a pesar de que había indicios de contrataciones irregulares para acometer una serie de obras en diferentes comandancias.

Según afirmó este lunes, "es un caso de corrupción más del Partido Popular", lo que desairó a la representante del grupo de Cuca Gamarra en la Comisión, Ana Belén Vázquez.

Para el PP, este empeño del Gobierno por aclarar el llamado "caso Cuarteles", destapado por EL PERIÓDICO DE ESPAÑA y otros periódicos de Prensa Ibérica, no es más que in intento de desplazar o diluir otra trama de presunta corrupción, la del "caso Mediador" o caso del "Tito Berni", en alusión al exdiputado del PSOE Juan Bernardo Fuentes Curbelo. Se basa el PP en una decisión reciente de la Junta de Portavoces, en la que el grupo de Patxi López, junto con ERC y EH Bildu, logró despejar la amenaza de una comisión de investigación al respecto, y en su lugar, rellenar la agenda de la Comisión de Interior con el "caso Cuarteles".

La semana pasada, el Gobierno registró las peticiones de comparecencia de Marlaska, de la directora de la Guardia Civil y del teniente general Mando de Apoyo, Arturo Espejo. Casi al miso tiempo que la Mesa del Congreso calificaba las solicitudes, las debatió la Comisión de Interior, lo que enfadó al PP. También molestó que entre los comparecientes figurase un funcionario de alto rango de la Guardia Civil, lo que no es habitual.

Fuentes parlamentarias señalaron a este medio que la labor de control del Gobierno no se ejerce sobre personal de la administración. Del mismo modo que la Comisión de Defensa no fiscaliza la actuación de representantes de las Fuerzas Armadas, la Comisión de Interior deja al margen a cargos de las fuerzas de seguridad del Estado.

Pero la mayoría de la Mesa de la Comisión de Interior, a pesar de la ausencia en esa reunión del representante de Unidas Podemos, el diputado Joan Mena, aprobó el calendario. Marlaska acudió este lunes; el jueves harán lo propio el secretario de Estado de Seguridad y el teniente general de la Guardia Civil. El "caso Cuarteles" sigue.