UN AÑO DE LA CRISIS DEL PP

Feijóo descarta contar con Casado: "Es incompatible con su actividad profesional"

El líder del PP afirma que el expresidente le trasladó que "está enfocado" en su vida profesional y no se implicará en ningún acto del partido "al menos por un tiempo"

Feijóo asegura que "no hay ninguna mala conciencia ni cuestión pendiente" y que por eso comieron "con normalidad"

Feijóo y Casado

Feijóo y Casado / EFE

Paloma Esteban

Paloma Esteban

No habrá rehabilitación institucional de Pablo Casado. El actual líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que almorzó con él ayer en un mítico restaurante madrileño en uno de los laterales del Teatro Real junto a la plaza de Oriente, aseguró que el expresidente del partido "está enfocado y centrado en una actividad profesional que no es compatible con la actividad política". Así se lo "trasladó" y, por eso, Feijóo descarta que pueda participar "al menos durante un tiempo" en actos del PP en este año electoral.

El encuentro, dijo Feijóo, se enmarcó "en la normalidad de ir a comer con un compañero de partido". "En mi partido hablar con todos los exdirigentes no está prohibido si quieren mantener contacto conmigo y a mí me parece oportuno. Como no hay mala conciencia con nadie, nada que ocultar, no hay cuestión pendiente... Pues comemos", afirmó el líder del PP precisamente el día que se cumple formalmente el aniversario de la caída de Casado. Justo hace un año se celebraba en Génova la reunión de barones autonómicos que terminó con la dimisión del entonces presidente, que se comprometió a marcharse en el congreso de abril.

Sobre esa comida también se ha rponunciado Isabel Díaz Ayuso después de reunir a su consejo de Gobierno. En la Puerta del Sol ya insistían ayer en que no entrarían al asunto: "Yo las cuestiones del Partido Popular las trato en el Partido Popular, tengo poco que decir en Consejo de Gobierno", zanjó la presidenta.

En el entorno de Casado ya insistían también este miércoles, tras el almuerzo, que su intención es continuar con su nueva vida, que seguirá en la esfera privada, con el silencio que le ha caracterizado en este tiempo, y que si Feijóo le llama a comer, como fue el caso, acudirá. Las personas de la confianza del expresidente aseguran que tampoco él tiene intención de acercarse a la política. Feijóo insistió en que eso fue exactamente lo que Casado le trasladó.

Y que, si más adelante las cosas cambian y hay compatibilidad, "irá donde los dirigentes del partido le inviten". "Nosotros sólo vamos a los sitios donde se nos invita", zanjó tras su visita a la empresa García Carrión en Ciudad Real, acompañado del presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez.

"AHORA NO SUMA Y ÉL NO QUIERE"

Las conversaciones sobre Casado dentro del PP volvieron a la primera linea hace dos semanas con la foto de unidad entre Jose María Aznar y Mariano Rajoy en la intermunicipal de Valencia. Era una imagen muy esperada en años y enterraba las discrepancias públicas más evidentes de los expresidentes. El partido justificó la ausencia de Casado porque se trataba, dijeron, de un acto en el que se ponían en valor las experiencias de gobiernos. Pero en el entorno de Casado no sentó nada bien no recibir ni siquiera una llamada de aviso.

Además, las fechas coincidían con el aniversario de la marcha del exlíder popular. Y el mensaje oficialista apuntaba a que no se contemplaba ninguna rehabilitación a corto o medio plazo de Casado pensando en las elecciones autonómicas y municipales. Dirigentes de la cúpula afirman que en este momento el exlíder "no suma" y que solo podría agitar a activos fundamentales "que ahora hay que proteger" como Ayuso, que en mayo afronta el reto de alcanzar la mayoría absoluta o, como mínimo, acercarse mucho.

Pero además, en el propio entorno de Casado niegan que él esté ahora pensando en participar en actos de ese tipo. En Génova también avalan esa idea: "No es solo que no contemos con él, es que quizá él tampoco quiere", zanjan.