CRISIS DE LA COALICIÓN

Moncloa confía en que Podemos cederá con la ley del sí es sí y no prevé pedir los votos del PP

La parte socialista defiende que no existe otra solución que la propuesta planteada por Justicia y apuran la negociación con Igualdad para registrar el cambio como tarde este viernes

Ni PSOE ni Podemos ven riesgo de ruptura en la coalición aunque finalmente no hubiera acuerdo

Moncloa

Moncloa / Alberto Ortega / Europa Press

Últimas horas de negociación para acordar una reforma de ley del 'sólo sí es sí' en el seno del Gobierno de coalición. Tras más de 300 rebajas de condena a delincuentes sexuales, Pedro Sánchez ha ordenado modificar la ley y hacerlo con el apoyo de Podemos o sin él. A pesar de este ultimátum, se está tratando de cerrar un pacto. Pero el tiempo apremia. El cambio se realizará a través de una proposición de ley del grupo socialista en el Congreso. Y la intención es presentarla como muy tarde este viernes.

A lo largo de este martes se han mantenido negociaciones sobre la base del documento redactado por el Ministerio de Justicia que apuesta por volver al sistema de penas anterior a la ley y subir los años de cárcel cuando exista violencia, intimidación o anulación de la voluntad, un planteamiento que Podemos rechaza porque consideran que significaría recuperar la diferenciación entre abuso y violación y diluir el consentimiento.

Por ahora no ha trascendido que existan avances, aunque desde Igualdad se asegura que ellos "están cediendo por encima de sus posibilidades". Aunque las posiciones siguen muy distanciadas, la sensación de la Moncloa, según distintas fuentes, es que Podemos acabará cediendo. "Habrá solución".

Lo creen porque "no existe otra salida jurídica que la que hemos planteado". "La propuesta de Justicia es rigurosa", señalan, frente a la idea de Podemos de subir las penas "automáticamente", que no es posible abordar sin justificar este aumento. Y porque consideran que Irene Montero "se ha quedado sin camino", en referencia a que ya no cuenta con el respaldo unánime de las familias de Unidas Podemos ni de los grupos que conforman la mayoría parlamentaria del Congreso,

En Moncloa confían en que finalmente la ministra de Igualdad terminará por entender que no existe otra alternativa que volver al sistema de penas anterior y destacan que, a pesar de su persistente rechazo a retocar la ley, al final se ha abierto a la reforma. Un paso que no se ha logrado en dos meses, ya que desde principios de diciembre se han celebrado varias reuniones para pactar la modificación sin éxito. De hecho, lo que la parte socialista trasladaba era que se habían resignado, resguardados sólo en el mensaje de que el Tribunal Supremo unificaría doctrina. Fuentes del Ejecutivo sostienen ahora que siempre han tenido la intención de cambiar la ley.

La voluntad, insisten en Moncloa, es contar con Podemos. "Por nosotros no va a quedar". Pero, avisan que hay que "solucionarlo rápido, con o sin acuerdo". Para favorecerlo, en la parte socialista ha primado la cautela. La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, incidió este martes tras el Consejo de Ministros en que el Ejecutivo "se siente orgulloso" de esta norma y "no se ha planteado tocar el consentimiento ni una coma". Todo con el propósito de empujar a Igualdad a que acepte la reforma y de no tensionar la coalición.

Irene Montero se muestra abierta a "proteger el corazón de la ley" del 'sólo sí es sí'

Agencia ATLAS / Foto: EP

Fuentes socialistas atribuyen las últimas reticencias a que la postura del núcleo del Ministerio ha sido muy extrema y ahora "es complicado bajarse de tan alto". Pero otras fuentes del Gobierno consideran que Podemos está usando su estrategia negociadora habitual y que al final acabará transigiendo con el argumento de que han conseguido que "no se toque el consentimiento". Algo, subrayan, que "está garantizado" en el texto de Justicia.

El propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dio por sentado que se acometerá la modificación, aunque no medie consenso interno, en su intervención en el Senado. "Se trata de una cuestión técnica que no refleja la voluntad ni del Ejecutivo ni tampoco de los ocho grupos parlamentarios que aprobamos esta ley en las Cortes. Esos efectos indeseados los vamos a corregir", dijo. La reforma no acabará con el goteo de reducciones de condenas pero al menos evitará que se beneficien quienes cometan delitos contra la libertad sexual en el futuro.

Este escándalo, junto a la nueva imagen de división que ha dado el Ejecutivo, han servido en bandeja al PP las críticas al Gobierno. Pero Alberto Núñez Feijóo ha querido también jugar su baza de dirigente moderado y ha ofrecido sus votos para aprobar la reforma. Moncloa contempla que la proposición de ley se presente sin acuerdo con Igualdad pero, pese a ello, no hay intención de acudir al PP en busca de su apoyo. "Nadie se va a oponer a hacerlo, porque hay que reparar las consecuencias de la ley", en referencia a que dan por supuesto que contarán con el respaldo necesario.

A pesar de que el paso dado por Sánchez al imponer el cambio en la ley del 'sólo sí es sí' supone una absoluta novedad en el funcionamiento del Ejecutivo porque significa enmendar por primera vez la legislación impulsada por su socio de Gobierno, ni el PSOE ni Podemos piensan que la coalición esté en riesgo. Los socialistas que, han demostrado que ahora no le tienen miedo a la ruptura, no creen que ni Irene Montero ni Ione Belara, la otra ministra morada, estén pensando en dejar el Ejecutivo. Desde Podemos aseguran que ellos tienen "voluntad de acuerdo para salvar el Gobierno".

En medio de ambos se ha quedado la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, quien públicamente este martes defendió que "va a cuidar siempre" el Ejecutivo de coalición y dio a entender que está trabajando para favorecer el acuerdo. Desde la parte socialista se asegura que quien está negociando con Irene Montero es Félix Bolaños. Los socios de Gobierno afrontan así su último choque. Juntos pero separados. Decididos a seguir adelante con acuerdo o sin acuerdo.