INVESTIGACIÓN

Sánchez trata de "recobrar" un crédito que Rajoy concedió a la empresa de armamento ligada al exministro Serra

El Ejecutivo financió con 32 millones a una filial de Everis cuando Serra era vicepresidente de la compañía para hacer negocios en Brasil

Un correo electrónico aportado en juicio laboral apunta que los responsables de la empresa buscaron dinero para "pagar" su deuda con Economía

En la imagen, el exministro Eduardo Serra, presidente de una empresa que recibió un crédito del gobierno Rajoy

En la imagen, el exministro Eduardo Serra, presidente de una empresa que recibió un crédito del gobierno Rajoy / Nacho García

Tono Calleja Flórez / Roberto Bécares / Nacho García / Cristina Gallardo

El Gobierno de Pedro Sánchez trata de recuperar los fondos derivados de dos créditos de 32 millones que fueron concedidos por el Ejecutivo de Mariano Rajoy en 2015 a la empresa brasileña Prosimulador y debían haber sido amortizados en su totalidad en 2020. Prosimulador estaba asociada a Everis Aeroespacial, Defensa y Seguridad (Everis AEDE) que pretendía implantarse también en Brasil. "Se están haciendo las gestiones para el recobro", ha confirmado a preguntas de EL PERIÓDICO DE ESPAÑA un portavoz actual del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

Se da la circunstancia de que Everis AEDE (que aparece como formalmente extinguida) era la filial armamentística de Everis Spain, compañía que cuando se concedieron los mencionados créditos estaba vicepresidida por Eduardo Serra -exministro de Defensa en la 'era Aznar' (1996-2000)- que también ostentaba el cargo de consejero y presidente de la Fundación de la compañía. A partir de 2018 fue nombrado presidente.

Para conocer la información oficial con la que justificó la concesión de los 32 millones, cabe remontarse al momento en que la entonces secretaria de Estado de Comercio, Marisa Poncela, presentó la memoria de actividad de 2016 del Fondo para la Internacionalización de la Empresa (Fiem), en la Comisión de Economía del Congreso. Confirmó que desde dicho Fondo, dependiente en aquellas fechas del Ministerio de Economía, se había otorgado dos créditos a la firma brasileña Prosimulador.

Relató también que este proyecto buscaba apoyar "la implantación estratégica de Everis Aeroespacial, Defensa y Seguridad, en el mercado brasileño de formación vial mediante la utilización de simuladores de conducción de automóviles". El crédito concedido a la sociedad brasileña Prosimulador Tecnología de Tránsito S.A. permitía, por tanto, la adquisición de 4.000 equipos que iban a ser construidos por una compañía asociada a la filial de defensa de la firma presidida desde 2018 por Serra.

La citada secretaria de Estado concretó ante el Parlamento que el importe del crédito ascendía a 32 millones de euros -cuyo montante se elevó en 2016 hasta los 38 millones por los intereses- que iban a ser destinados a empresas españolas, entre ellas varias pymes, que eran las que iban a fabricar los simuladores: "La realización de este proyecto permitirá dar un fuerte impulso a las exportaciones españolas de elevado contenido tecnológico y alto valor añadido, contribuyendo a la imagen tecnológica que hay de nuestro país y al mejor posicionamiento de nuestras empresas", completaba Marisa Poncela en el Congreso.

La deuda con el Ministerio

El negocio en Brasil consistía, en concreto, en la instalación de simuladores de conducción en las autoescuelas de todo el país mediante un modelo de cobro por uso de un sistema tecnológico que resultaba obligatorio para obtener el permiso de conducir. Sin embargo, el ultraderechista Jair Bolsonaro, que fue nombrado el 1 de enero de 2019 presidente de Brasil, cambió la ley y estableció que esta tecnología española ya no era obligatoria. La decisión política de Bolsonaro provocó el fracaso del negocio impulsado por la filial de defensa de la compañía presidida por Eduardo Serra.

Un informe de auditoría de cuentas de 9 de julio de 2019, elaborado por KPMG, constata el agujero que se provocó en el pretendido negocio de Everis AEDE con las autoescuelas brasileñas. El documento advertía de que entre los mayores riesgos de incorrección material de las cuentas de la empresa estaban "los créditos y cuentas a cobrar por un importe de 76.979.214 euros con un tercero, cuyo negocio principal consiste en la instalación de simuladores de conducción en autoescuelas en Brasil mediante un modelo de cobro por uso que resultaba obligatorio".

Años después, el despido de varios directivos de Everis AEDE por parte de su empresa matriz acabó en los tribunales. Durante el contencioso laboral fue aportado un correo electrónico en el que se señala que varios de los despedidos querían, con la ayuda económica de un competidor, Amper, obtener financiación para conseguir 12 millones de euros en efectivo "y así pagar la deuda del Ministerio de Economía (Mineco)". También buscaban otro millón de euros para saldar una deuda "con Santander Brasil y 12-15 millones de efectivo adicional", especifica el mensaje, al que tuvo acceso este diario.

70 millones perdidos

Tal y como adelantó este periódico y tras el fallido negocio en Brasil, la compañía tomó en 2020 la decisión de interrumpir gran parte de las actividades que desarrollaba: “Esta decisión ha motivado que la sociedad haya reconocido deterioros y pérdidas por bajas de inmovilizado intangible y material por importe de 19.374 miles de euros, pérdidas en inversiones financieras a largo y corto plazo por importe de 40.726 miles de euros, así como pérdidas y deterioros por operaciones comerciales por importe de 10.600 miles de euros”, subraya un informe de KPMG que cifra la suma total de pérdidas de Everis AEDE en 2020 en 70,6 millones de euros.

Vinculado a Everis AEDE desde 2005, Eduardo Serra fue aupado a la presidencia de la misma en 2018. En el mundo de la política este empresario, que fue ministro de Defensa en el Gobierno de José María Aznar, también fue responsable de la Subsecretaría de Defensa durante el mandato de UCD (1979-1982) y de la Secretaría de Estado de Defensa con el PSOE (1984-1987).

Tanto Everis Spain, que ahora se denomina NTT Data Spain, como los directivos expulsados no han querido contestar a las reiteradas preguntas hechas y enviadas por escrito por esta redacción, al mismo tiempo que tampoco han accedido a contar su versión de los hechos. Los representantes de la participada NTGS han declinado responder a las preguntas de EL PERIÓDICO DE ESPAÑA.