Tensión en la izquierda

Podemos supedita sumar con IU en las municipales andaluzas al cumplimiento del pacto en el Parlamento

Podemos exige que su portavoz pueda preguntar en la sesión de control, volver a la Mesa, que se cumpla el reparto de recursos económicos y asesores y que Más País pierda espacio en la Cámara

Yolanda Díaz junto a Alberto Garzón, Inmaculada Nieto y Juan Antonio Delgado, entre otros.

Yolanda Díaz junto a Alberto Garzón, Inmaculada Nieto y Juan Antonio Delgado, entre otros. / EFE

Las negociaciones en la izquierda andaluza están abiertas para concurrir en las elecciones municipales del próximo mayo pero la situación es muy tensa en Andalucía. Desde Podemos dejan claro que hay dos condiciones para volver a cerrar una coalición electoral con Izquierda Unida como la que se formuló para las elecciones autonómicas y que ha acabado en un grupo parlamentario fracturado y lleno de tensiones. La primera condición es que el nombre de Podemos aparezca en todas las papeletas municipales, lo exigen de manera formal, y la segunda precisamente que se cumpla el acuerdo andaluz, que hace unos meses, en el inicio efectivo de la legislatura, saltó por los aires. IU no reconoce el pacto en el funcionamiento del grupo parlamentario.

Fuentes de Podemos en Andalucía dejan muy claro que ambas negociaciones están ligadas. Señalan que es imposible volver a suscribir un pacto si no se cumple el que se firmó para las autonómicas. Exigen cinco puntos de ese acuerdo que ahora mismo están incumpliéndose. El reparto de recursos económicos y asesores del grupo parlamentario (60% para Podemos y 40% para IU), el turno rotatorio en las preguntas al presidente en la sesión de control al presidente del Gobierno, ahora solo las formula IU, la vuelta de la diputada de Podemos a la Mesa del Parlamento, la destitución de Más País de la portavocía adjunta y el protagonismo para los ‘morados’ en el debate del Estado de la comunidad. Todo esto figura en el pacto a dos que Podemos e IU firmaron, con todo lujo de detalles, ‘in extremis’ antes de registrar la coalición electoral. Tan al límite que el acuerdo no llegó a tiempo al registro oficial. Bueno, o que "IU no lo formalizó porque no quiso", vienen deslizando desde hace meses desde Podemos.

Diálogo abierto

La negociación no ha existido durante semanas, los puentes estaban volados, pero ahora sí hay diálogo, admiten fuentes de Podemos. El objetivo es concurrir en unos 80 municipios andaluces, el 10% de las localidades aunque al ser grandes ciudades representa el 58% del censo, unos cinco millones de andaluces, ya que la mitad (2,5 millones) está en las capitales. IU se ha encargado de ir tejiendo sus alianzas con el resto de fuerzas de Por Andalucía, negociando al margen de Podemos, que se mantenía aislado. Ahora sí hay diálogo abierto para que vuelvan a integrarse en las candidaturas municipales aunque los morados ponen sus condiciones.

“Se celebró un acto municipalista en Mollina (Málaga) de Podemos y allí quedó una cosa clara, en la papeleta tiene que estar el nombre de Podemos, la marca de Podemos es conocida, tiene que estar en la papeleta y lógicamente si usted quiere que vayamos juntos los acuerdos se tienen que respetar. Es muy difícil pactar o confiar en quien no respeta los acuerdos que se han firmado”, señaló el portavoz de Podemos, Juan Antonio Delgado en una entrevista en ‘Acento Andaluz’ de 7TV Andalucía. “Me he mojado, en la papeleta tiene que ir el nombre de Podemos y los acuerdos se tienen que respetar”, zanjó con claridad.

Avances en Sevilla

Según confirmaron fuentes de IU, ya habría un principio de acuerdo entre las seis fuerzas que integran Por Andalucía para confluir de forma conjunta en la provincia de Sevilla para las municipales. No concreta en qué municipios ni cómo se traduce esto en la práctica pero sí suscriben un primer pacto de intenciones. En otras provincias como en Málaga, como informó ‘Infolibre’, esa negociación está cerca de descarrilar y van al choque de trenes. En el resto de provincias de Andalucía, salvo Cádiz que tras la marcha de José María González ‘Kichi’ dibuja un mapa particular, las negociaciones están abiertas sin más, ni buenos horizontes ni posiciones enconadas. Todo, admiten, puede pasar. Las negociaciones se celebran en cada provincia pero por encima hay líneas rojas que ponen unos y otros, incluso desde Madrid.

Después de las elecciones, este contrato detallado entre los dos partidos sobre cómo repartir el juego político en el Parlamento andaluz se retomó al constituir el grupo parlamentario. IU sostenía que ese acuerdo era papel mojado puesto que nunca se registró formalmente y además esgrimía que Por Andalucía, marca con la que concurrieron a las autonómicas, era una coalición a seis, que incluía también a Más País, Equo, Alianza Verde e Iniciativa del Pueblo Andaluz. El coordinador general de IU en Andalucía, Toni Valero, calificó ese acuerdo como “trágala” pero lo cierto es que ese pacto volvió a estar sobre la mesa cuando, en junio, había que constituir el grupo parlamentario. Se fueron de vacaciones de nuevo con el grupo Por Andalucía registrado al límite, el 16 de julio. Una vez que eso ocurrió, Podemos denuncia que volvieron a incumplir lo negociado.

El compromiso de IU fue cumplir el papel firmado a dos: el asiento de la Mesa del Parlamento era para Podemos así como la portavocía adjunta. El 31 de agosto, IU incluyó un último punto en la Mesa para proponer a Esperanza Gómez (Más País) como portavoz adjunta. Un documento oficial así lo acredita. IU dice que no era para quitar a Juan Antonio Delgado (Podemos) sino para sumar una viceportavocía más. El papel pone exactamente “portavoz adjunta”.

Recelos con Más País

La fractura se agravó porque Podemos se tomó la revancha por su cuenta y la diputada miembro de la Mesa del Parlamento, Alejandra Durán, registró a espaldas de IU un reglamento sobre el funcionamiento del grupo, que volvía a recoger todo lo acordado. Esa última maniobra acabó con la expulsión de esa diputada por parte de la portavoz de Por Andalucía, Inma Nieto (IU), que decidió darle el asiento del órgano también a la diputada de Más País Esperanza Gómez. Eso ocurrió a comienzos de septiembre. La tensión dentro del grupo parlamentario de Por Andalucía, con tres diputados de Podemos por un lado y las dos de IU y Más País por otro, ha ido a más. Como la portavocía la tiene IU, el Reglamento les da potestad para tomar todas las decisiones relevantes sobre el funcionamiento del grupo. Podemos advierte ahora de que el acuerdo andaluz tiene que cumplirse antes de sellar más acuerdos municipales. Si no, irán por libre.