TRAS EL NO DE PODEMOS

El PSOE se abre a negociar con ERC la ley de vivienda para atraerles a los Presupuestos

Rufián advirtió que unas cuentas que no van ligadas con esta norma "empiezan mal" | Los socialistas dan por cerradas las conversaciones con Unidas Podemos tras pactar un texto hace un año

El PSOE se abre a negociar con ERC la ley de vivienda para atraerles a los Presupuestos.

El PSOE se abre a negociar con ERC la ley de vivienda para atraerles a los Presupuestos.

Miguel Ángel Rodríguez

Unidas Podemos intentó vincular hasta el último minuto de las negociaciones con el 

PSOE 

el futuro de la 

ley de vivienda

 con el de los 

Presupuestos Generales del Estado para 2023.

Los socialistas se negaron desde el principio y se mantuvieron firmes hasta el final. Aún así, el pacto acabó llegando a primera hora de este martes y sin que la norma, nacida al amparo de las dos últimas negociaciones presupuestarias, formara parte del acuerdo. No obstante, la ley podría volver al centro de las conversaciones presupuestarias, aunque no con los morados, sino con 

ERC 

EH Bildu

 para atraerlos hacia el 'sí' a las cuentas públicas, según explican fuentes del ala socialista del Gobierno.

El pacto de Presupuestos llegó acompañado de alabanzas de uno y otro partido del Gobierno, pero con bastantes críticas por parte de los morados por la cerrazón del PSOE a reactivar la tramitación parlamentaria de la ley de vivienda, bloqueada en el Congreso desde hace seis meses. "Se nos va a juzgar por lo que hagamos en materia de vivienda", llegó a aseverar la vicepresidenta segunda, 

Yolanda Díaz

, después de no haber sido capaz de arrancar a los socialistas el compromiso de reimpulsar la norma, algo que, en principio, resultaba imprescindible para obtener su apoyo.

El ala socialista del Gobierno se negó en rotundo a abrir una negociación con sus socios para introducir cambios. Fuentes de la Moncloa aseguran que ya cerraron un texto con los morados el octubre pasada, cuando Unidas Podemos también ligó esta norma a los Presupuestos Generales del Estado. Hace un año, ambos partidos lograron consensuar un texto, tras más de un año de tiras y aflojas, pero los morados quieren incluir varias enmiendas para endurecer el control de los precios de los alquileres. Para el partido mayoritario del Ejecutivo esa negociación ya se cerró. Al menos, con Unidas Podemos.

Gestos y diálogo

La ley de vivienda se podría volver a situar encima de la mesa en las próximas semanas, aunque cambiando los actores que se sientan a ella. Fuentes del ala socialista del Gobierno apuntan aceptan que se reabran las conversaciones en torno a la norma, pero no en el seno del Ejecutivo, sino en el Congreso y entre el PSOE ERC EH Bildu. Fuentes de la Moncloa admiten que son conscientes de que los republicanos catalanes tratarán de presionar en esta ley a cambio de su voto favorable a los Presupuestos.

"Unos Presupuestos que no contemplen la Ley de Vivienda, directa o indirectamente, empiezan mal", avisó este martes el portavoz de ERC en el Congreso, 

Gabriel Rufiá

n

, tras conocerse el acuerdo entre el PSOE y Unidas Podemos. A renglón seguido, redobló la advertencia: "El voto de ERC se suda". En las negociaciones de las pasadas cuentas públicas, los republicanos catalanes ya aplicaron una dinámica similar, condicionando su 'sí' a la introducción de enmiendas en la ley de comunicación audiovisual para proteger el catalán.

Los socialistas, por tanto, podrían haber evitado ceder a las peticiones de Unidas Podemos para ahora tener un gesto de buena voluntad con ERC y EH Bildu de cara a conseguir su apoyo a las cuentas públicas.

Las exigencias

De haberla, la negociación no será nada sencilla. Desde que PSOE y Unidas Podemos acordaron un texto para la ley de vivienda, ERC y EH Bildu no han dejado de criticar la tibieza de algunas de las medidas. En este sentido, fuentes de la dirección del partido morado sostienen que las propuestas que presentaron a los socialistas en los últimos días están acordadas con catalanes y vascos. Entre ellas, está el endurecimiento de los controles a las subidas de alquiler, de tal forma que los pequeños tenedores de viviendas se vean obligados a bajar los precios en las zonas de mercado tensionadas. En la redacción actual esta medida solo afecta a aquellas personas o empresas que tienen más de 10 inmuebles.

Otra de las cuestiones delicadas será la cuestión competencias. ERC denunció en el Congreso que la norma podría invadir las responsabilidades asignadas a la Generalitat en materia de vivienda y reclamó que se diera seguridad jurídica a la ley de regulación de los precios del alquiler que aprobó el Parlament en septiembre de 2020 y, parte de la cual, fue recurrida por el Gobierno al Tribunal Constitucional, quien terminó anulando parte de la norma.