JUICIO

La Fiscalía perfila a Villarejo: "Un policía corrupto con un lenguaje soez, machista y gótico"

El fiscal ha rebatido todos y cada uno de los argumentos con los que excomisario pretende tumbar su causa y tacha de "absolutamente absurdos" sus planteamientos

José Manuel Villarejo.

José Manuel Villarejo. / EFE

Un "funcionario policial corrupto" envuelto en "la bandera del patriota" que busca un "ánimo de lucro permanente" y que practica un continúo "juego de los espejos donde nada es lo que parece". Así ha perfilado la Fiscalía al excomisario José Manuel Villarejo en la recta final del juicio donde se enfrenta a unos 83 años de cárcel.

La Audiencia Nacional ha reanudado este lunes tras el descanso estival la vista oral que sienta en el banquillo a una treintena de acusados, encabezados por Villarejo, por tres presuntos encargos de espionaje en los que se habría servido de medios policiales para acceder a información confidencial.

Una jornada en la que el fiscal Miguel Serrano ha desglosado su informe final, que continuará este martes, en el que ha descrito a un Villarejo "en estado puro": Una persona envuelta "bajo la bandera del patriota que tanto le gusta y bajo el humo de un lenguaje soez, homófobo, machista y si se quiere un poco gótico", que lo que "esconde es al funcionario policial corrupto".

Alguien -ha proseguido- con un "ánimo de lucro permanente, por encima de su condición policial", un ejemplo de "confusión permanente del juego de los espejos donde nada es lo que parece".

Durante unas cinco horas, el fiscal ha rebatido todos y cada uno de los argumentos con los que excomisario pretende tumbar su causa: además de negar que se haya producido ninguna vulneración de derechos ha cuestionado que la empresa Cenyt -tras la que sitúa a Villarejo- fuese una entidad de cobertura para las operaciones de la Policía.

Este planteamiento es, para el fiscal, "absolutamente absurdo" y, con independencia de si Cenyt trabajaba o no para los servicios de inteligencia o para la Policía, Serrano afirma que Villarejo utilizaba esos contactos empresariales "para lucrarse" utilizando además "los medios de la Policía", con la "correspondiente repercusión en el precio" que cobraba por los proyectos.

El fiscal parte de la premisa de que los negocios privados de Villarejo son incompatibles con su actuación policial y "nunca" podrían ser autorizados, aunque éste alegue que sus superiores conocían y aceptaban que tuviese empresas, algo que podría derivar "responsabilidades penales" de esos cargos, pero "nunca" podrían exculpar al excomisario.

Además de descartar de plano la teoría de que este procedimiento haya sido fruto de una investigación "teledirigida" por el CNI o Asuntos Internos contra Villarejo, Serrano ha defendido que sus colaboradores -como su mujer o su socio- y sus clientes sabían de su condición policial y por eso le contrataron. "¿Quién es Villarejo sin estos vínculos policiales? No es nadie", ha señalado de manera contundente el fiscal.

"Villarejo vendió su condición de policía y los clientes la compraron", ha proseguido su compañero, César de Rivas, encargado en esta sesión de exponer la actuación de Villarejo en uno de los tres proyectos por los que le acusan: Land -en torno a la disputa entre las herederas de la urbanización de lujo La Finca, en Pozuelo de Alarcón (Madrid)-.

En relación con sus famosas grabaciones, que continúan saliendo a la luz, Anticorrupción ha considerado un "sinsentido" la versión de Villarejo, que alega que fue el CNI quien grabó las conversaciones y no él, y ha destacado la permisividad de la sala, que le permitió, "hasta la extenuación, hasta el cansancio, hasta el aburrimiento, sin perder la paciencia", formular preguntas ajenas al objeto del juicio.