PRINCIPAL REFERENTE DE ABASCAL

El auge de Meloni en Italia da alas a Vox tras sus horas más bajas

La ultraderecha italiana, "partido hermano" de Vox en palabras de Abascal, encabeza todas las encuestas en Italia, que irá a votar el 25 de septiembre

Tras el fiasco de las elecciones andaluzas y el PP de Feijóo en cabeza en todos los sondeos, Vox había perdido foco e iniciativa política

Las posibilidades de Fratelli d'Italia devuelven protagonismo a Vox, que considera al partido de Meloni su principal "referente internacional" por delante del de Marine Le Pen. Comparten el discurso ideológico más duro

Giorgia Meloni junto a Abascal y Olona en la campaña andaluza.

Giorgia Meloni junto a Abascal y Olona en la campaña andaluza. / EUROPA PRESS.

Paloma Esteban

Paloma Esteban

La dimisión de Mario Draghi y las nuevas elecciones en Italia el 25 de septiembre han generado una nueva ola de incertidumbre en toda Europa, que se suma a la crisis energética y el temor de que Rusia pueda cortar el grifo del gas el próximo otoño, y a los nubarrones económicos que se precipitan también tras el verano por culpa de una inflación totalmente desbocada. A las incógnitas acumuladas se añade ahora la de quién estará en el próximo gobierno de una de las principales potencias europeas que tiene mucho que decir en las grandes decisiones de la Unión. Y todas las encuestas sitúan en cabeza a la ultraderechista Giorgia Meloni, líder de Fratelli d’Italia.

La media de los sondeos recientes apuntan a que podría acercarse al 23% de los apoyos, por delante del Partido Democrático (principal fuerza del centroizquierda). Pero es que a la fortaleza de Meloni se une otro 14% aproximadamente que las encuestas otorgan a la otra fuerza dura de la derecha, la Lega de Salvini. En último lugar aparece Forza Italia, partido que representa en estos momentos al centro derecha italiano. La lectura política en España mira directamente a Vox porque Meloni es el principal referente internacional de Santiago Abascal, por delante de la francesa Marine Le Pen.

La dirigente ultraderechista italiana, que a sus 29 años fue ministra de Juventud de Berlusconi, apoyó la campaña de Macarena Olona en Andalucía en un polémico y comentado mitin en Marbella. La realidad es que los resultados andaluces no fueron los esperados para Vox: crecieron dos diputados pero apenas convencieron a 87.000 electores más respecto a 2018. 

Y, sobre todo, el partido fracasó en su voluntad de entrar en un segundo gobierno autonómico después de haberlo conseguido en Castilla y León. El PP de Juanma Moreno barrió y consiguió una mayoría absoluta contundente que ha obligado esta misma semana a abstenerse a los diputados de Vox en su investidura. No tendría sentido que hubieran votado en contra. 

Vox confía en el auge de Meloni en Italia para salir de sus horas más bajas

La ultraderecha italiana, "partido hermano" de Vox en palabras de Abascal, encabeza todas las encuestas en Italia, que irá a votar el 25 de septiembre. Tras el fiasco de las elecciones andaluzas y el PP de Feijóo en cabeza en todos los sondeos, Vox había perdido foco e iniciativa política. /

Vox se encuentra en sus horas más bajas desde las elecciones andaluzas y su rival por la derecha, el PP de Alberto Núñez Feijóo, continúa la alza en las encuestas. El último CIS de hace solo unos días da a los conservadores por delante del PSOE por primera vez y deja a la formación de Abascal en cuarto lugar por detrás de Podemos. En el partido ultra no dan ninguna credibilidad a la encuesta, pero la evidencia muestra que han ido perdiendo foco. La situación en Italia lo puede cambiar todo, aunque sea en el debate público. 

Fuentes de la dirección de Vox consultadas por este diario consideran que los procesos electorales en otros países “tienen poco impacto” en los domésticos, y descartan efectos directos por lo que ocurra en el país mediterráneo vecino. Pero lo que está claro es que el socio de Meloni (hoy primera fuerza en las encuestas italianas) es Vox en España.

Meloni y Olona se abrazan en Marbella.

Meloni y Olona se abrazan en Marbella. / .

Abascal no dudó en recalcar que el partido de la ultra “es el partido hermano” y el más cercano a su formación en este momento, reconociendo que Meloni “acogió a Vox con los brazos abiertos”. “Es el partido con el que más nos identificamos”, dijo el dirigente en el mitin de Marbella del pasado mes.

Meloni tuvo un durísimo alegato en aquella intervención, muy aplaudida por parte de la plana mayor del partido (especialmente Abascal, Olona y Buxadé) que buscaba recalcar sinergias con Vox en los aspectos más ideológicos. Dijo textualmente: “Sí a la familia natural, no al lobby LGTB. Sí a la identidad sexual, no a la ideología de género. Sí a la cultura de la vida, no al abismo de la muerte. Sí a la universidalidad de la cruz, no a la violencia islamista. Sí a las fronteras seguras, no a la inmigración masiva. Sí al trabajo para nuestros ciudadanos, no a los grandes financieros internacionales. Sí a la soberanía de los pueblos, no a los burócratas de Bruselas. Sí a nuestra civilización, no a quienes quieren destruirla”. 

Muchas de las frases que la italiana dijo aquel día forman parte del discurso de Vox, especialmente en lo que respecta a endurecer el control de las fronteras y a la constante crítica a lo que Abascal también llama burócratas de Bruselas “que deciden en los despachos” por los ciudadanos. Una postura euroescéptica que constituye una de las principales diferencias con el PP, también en la época de Pablo Casado. 

En movimientos sociales como el feminismo también coincide de plano con el discurso de Vox, combatiendo lo que ambos partidos consideran “ideología de género”. Meloni es aún más explícita en lo que tiene que ver con el colectivo LGTBI, con declaraciones expresas contra sus derechos que no se han visto en España. Si hay una frase de la dirigente romana que se ha hecho viral en el país transalpino fue precisamente la de: “Soy Giorgia, mujer, madre, italiana y cristiana”. Una simple declaración de intenciones que contempla en pocas palabras el ideario completo de Fratelli d’Italia. 

La situación política italiana nada tiene que ver con la de España. La popularidad de Meloni y su fortaleza en el arco de la derecha en ese país tiene mucho que ver con ser la única fuerza que se quedó fuera del Gobierno de concentración planteado por Draghi (en el que sí entró la Lega de Salvini e incluso el movimiento 5 estrellas, que representa ideas similares a las de Podemos). Esa es la principal baza que la dirigente ultra tiene en su mano para combatir al resto de partidos en lo que tiene que ver con la gestión.

Vox es la tercera fuerza política en el Congreso tras las generales de noviembre de 2020. Desde ese momento el partido ha ido en ascenso con dos piedras en el camino: Madrid, donde Isabel Díaz Ayuso también frenó sus aspiraciones y, recientemente, Andalucía. En el partido no consideran que sea “un bache” y siguen insistiendo que la mayor de sus fortalezas es el candidato a la presidencia: Abascal.