CUMBRE DE LA OTAN

Sánchez pide orillar la "ideología" para alcanzar el 2% de gasto militar en 2029

El presidente no concreta aún el aumento de la partida de Defensa en los próximos presupuestos pero insiste en pedir a sus socios de coalición, Unidas Podemos, una "reflexión" 

Da por hecho que respaldarán en el Consejo de Ministros el cambio en el convenio con EEUU para acoger a dos buques de guerra más en Rota y señala que se aprobará "pronto" 

En el Ministerio de Defensa calculan que los dos nuevos destructores de Biden no llegarán a la base naval este año

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su comparecencia ante la prensa, al término de la cumbre de la OTAN en Madrid.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su comparecencia ante la prensa, al término de la cumbre de la OTAN en Madrid. / David Castro

La cumbre de la OTAN de Madrid concluye para el presidente del Gobierno con la afinación de un compromiso pero sigue faltando mucha letra pequeña. Ya había asegurado, tras la invasión rusa de Ucrania, que aumentaría el gasto militar, que caminaría más rápido para llegar a esa inversión equivalente al 2% del PIB. Pero este jueves, en la clausura de la cita "histórica" de la Alianza, la que ha desbloqueado la entrada de Suecia y Finlandia, la que ha alumbrado un nuevo Concepto Estratégico para toda la década, confirmó antes los medios que el Ejecutivo pretende alcanzar ese 2%, desde el 1,01% actual, en ocho años, en 2029. Sin embargo, no concretó cuánto pretende estirar el presupuesto en Defensa este mismo año, cuando tendrá que sacar las últimas cuentas de la legislatura, en las que tropezará, de entrada, con la oposición de sus socios de coalición, Unidas Podemos. Sí adelantó que quiere que ese crecimiento del gasto militar se convierta en un "acuerdo de país" que valide el Parlamento, sin atender a razones "ideológicas", y que todas las fuerzas lo apoyen, porque la seguridad "no está garantizada". 

El porcentaje del 2% del PIB nacional era una de las conclusiones de otra cumbre de la Alianza, la de Gales, de 2014. Entonces, los países miembros se comprometieron a alcanzar ese objetivo en diez años, en 2024. España está a la cola con su 1,01% de gasto, solo por delante de Luxemburgo (0,58%), aunque en realidad, según los últimos datos actualizados por la propia organización, hace tres días, solo nueve de los 30 aliados cumplen con esa orientación. Entre ellos, Grecia (3,76%) y Estados Unidos (3,47%). El Gobierno ya avisó de que era imposible conquistar el umbral del 2% en apenas dos años, porque Defensa sería incapaz de absorber ese volumen de gasto, ya que supondría duplicar los en torno a 10.000 millones anuales que tiene de presupuesto. Sánchez, por tanto, dibujaba este jueves una senda, 2029, aunque sin señalar cuáles serán las paradas intermedias. Es decir, cómo pretende ir avanzando, año a año, hacia ese objetivo. 

RECURSOS PARA GARANTIZAR LA SEGURIDAD

"No podemos dar por garantizada la seguridad. Tenemos que protegerla y dedicar recursos económicos", explicó a los medios en la rueda de prensa final de la cumbre, en el recinto ferial de Ifema de Madrid. "He reiterado a los aliados que España cumplirá el compromiso con la OTAN y también con la UE de destinar el 2% del PIB al presupuesto en Defensa. El Gobierno trabaja ya para aumentar este mismo año la inversión, y nuestro escenario, la propuesta que plantearé a las Cortes Generales, es alcanzar ese 2% en un periodo de ocho años, hasta 2029", relató. El presidente no avanzó, tampoco durante el turno de preguntas, en cuánto se sustanciará ese crecimiento del gasto de cara a 2023, que será lo más inminente que tenga que pactar. Primero, con Unidas Podemos, en el seno de su Ejecutivo (y ya los morados reiteraban este jueves su completo rechazo a ese aumento), y después con sus socios habituales. 

Sánchez desea que la propuesta que haga a las Cortes Generales sea un "acuerdo de país" que "trascienda las cuestiones ideológicas", porque con la agresión de Vladímir Putin "se ha puesto en riesgo la seguridad de Europa y de España". Era un mensaje directo, clarísimo, hacia los morados, a quienes ya había pedido una "reflexión" para que se den cuenta de que el ataque ruso ha generado movimientos "tectónicos" en todo el mundo y apoyasen el refuerzo de la capacidad de la base naval de Rota (Cádiz) acordado con EEUU. Este jueves lo repitió. Que la guerra en Ucrania, dijo, mueva a algunas formaciones "que antes tenían una visión diferente sobre la OTAN", que les haga pensar "como ejercer la disuasión y la defensa" frente a amenazas que son "reales", no "hipotéticas" y que por tanto "actúen en consecuencia". 

A PODEMOS: "REVISAR LOS POSTULADOS"

El mundo ha cambiado, en definitiva. "Nuestra obligación es revisar nuestros postulados", argumentó. Añadió que lo han hecho Suecia, rompiendo 200 años de neutralidad, y también Finlandia, pidiendo su adhesión a la Alianza, o Alemania, quebrando su principio de no aumentar el gasto en Defensa. Si Suecia, dijo, gobernada además por los socialdemócratas, que durante décadas han defendido esa neutralidad, han mudado de posición, "¿cómo no lo van a dar las fuerzas políticas españolas?". Ser "solidarios y responsables" con Ucrania implica, señaló, enviar más tropas a Ucrania, pero también garantizar mayor gasto en Defensa. "Como presidente del Gobierno y como secretario general del PSOE sabemos a qué espacio pertenecemos, a Europa y a la OTAN", remató.

El presidente tampoco arrojó luz sobre una de las informaciones que se han conocido a propósito de esta cumbre y de la presencia de Joe Biden en España y su entrevista con Sánchez en la Moncloa. En ese encuentro EEUU hizo pública la petición de aumentar la potencia militar de la base naval de Rota (Cádiz) y sumar dos buques de guerra a los cuatro que ya acogen estas instalaciones. 

Esto implica una modificación del Convenio de Cooperación para la Defensa de 1988, suscrito entre los dos países. El cambio debe ser aprobado primero por el Consejo de Ministros y ratificado después por las Cortes Generales. Por el momento no hay fecha de cuándo se impulsará este proceso legislativo, a pesar de que, en la reunión en la Moncloa con Biden y en la comparecencia posterior, el presidente estadounidense trasmitió su anhelo de que el aumento de la capacidad de Rota se ejecute “mejor antes que después"

EL CONVENIO CON EEUU, PRONTO

Preguntado por este tema, por el momento en que el Gobierno aprobará la enmienda al texto de 1988, el jefe del Ejecutivo se limitó a decir que "pronto". No obstante, fuentes del Ministerio de Defensa han enfriado en las últimas horas la llegada de dos nuevos buques destructores a la base naval. No está previsto que sean enviados en lo que resta de año porque los estadounidenses, explican, aún tienen que concretar su calendario y probablemente "tarden más de seis meses". Se ha adoptado la "decisión política", aseguran, pero falta que confirmen cuándo los mandarán. En Defensa subrayaban que en teoría no hay prisa para que el cambio en el convenio se apruebe en el Consejo de Ministros. Pero el presidente dijo este miércoles que será "pronto".

A pesar de las dudas sobre Unidas Podemos, Sánchez se mostró tajante respecto a qué hará esta formación. Ante la pregunta de si confía en que apoyen en el Consejo de Ministros el refuerzo de la cooperación militar con EEUU, respondió escuetamente que "sí".