INVESTIGACIÓN

El informático que desveló el 'CatalanGate' está investigado por el Tsunami Democràtic

El juez de la Audiencia Nacional no solicitó al CNI su colaboración en las pesquisas sobre Elies Campo

Elies Campo Cid.

Elies Campo Cid. / EPE

Tono Calleja / J. G. Albalat

Elies Campo Cid, el redactor del informe técnico que reveló el espionaje a 65 políticos y activistas independentistas catalanes a través del programa informático Pegasus, está siendo investigado en la Audiencia Nacional por el Tsunami Democràtic, según ha podido saber EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. El proceso judicial se abrió en 2019 para rastrear, entre otras cuestiones, la creación de esta plataforma independentista y quiénes eran sus dirigentes, así como su financiación y estructura interna. Las diligencias judiciales están todavía bajo secreto de sumario. El mismo Campo fue espiado con Pegasus, igual que Pau Escrich García y Jordi Baylina, que también están siendo investigados en la misma causa. El juez que la instruye no solicitó nunca la colaboración del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) en estas pesquisas concretas, aunque si autorizó la instalación de un 'software' (no se concreta cuál).

Campo es un ingeniero de telecomunicaciones barcelonés de 39 años que ha emprendido múltiples proyectos tecnológicos y ha desarrollado buena parte de su carrera en Silicon Valley, la zona de California donde se agrupan las empresas tecnológicas y centros de formación más importantes del mundo. Es un reconocido independentista integrante de la plataforma de investigación Citizen Lab -un grupo investigador de la Universidad de Toronto- cuya figura ha resultado clave en la publicación del que se conoce como 'CatalanGate'.

Según el artículo publicado en 'The New Yorker', la investigación del espionaje con Pegasus comenzó en julio de 2020, cuando el eurodiputado Jordi Solé (ERC) sospechó que su móvil había sido infectado. El político acudió al ingeniero catalán para que examinase su dispositivo y este le confirmó que había sido atacado, lo que puso en alerta a otros dirigentes independentistas. Al final, descubrió que unos 65 políticos, abogados y activistas habían sido espiados a través de este método. El mismo Campo fue espiado con Pegasus.

Estructura financiera digital

La investigación de la Audiencia Nacional sobre Campo se basa en su presunta participación, junto con otras personas, en el desarrollo de un paquete de programas informáticos con múltiples funcionalidades, entre las que se encuentra un proyecto que permitiría crear una estructura financiera digital e, incluso, la implantación de una moneda propia en una futura Cataluña independiente. Una de las posibilidades era la creación de una criptomoneda catalana. Este sistema, además, ofrecería desde una aplicación para credenciales de identidad, comunicaciones efectivas, votación digital y monedero electrónico. Los investigadores sospechas, sin embargo, que principal pretensión era crear una moneda digital. A este proyecto también estaría vinculado Pau Escrich.

Las pesquisas pretenden corroborar los pasos que dieron en su día los creadores de este paquete informático y, en especial, los contactos que mantuvieron en busca de inversores (llegaron a tener una reunión con entidades financieras) fuera de España, como en Francia, aunque también se han detectado viajes a Bruselas. Este diario no ha podido averiguar los encuentros que se mantuvieron en la capital belga. Otra de las líneas de investigación son los contactos que tuvo este grupo de informáticos con la Generalitat.

La creación de una criptomoneda ha sido uno de los objetivos del movimiento independentista. "No... si me lo explicó él... Puigdemont... cuando estuve en Waterloo [residencia en Bélgica del expresidente de la Generalitat] … la última vez me estuvo explicando todo lo que estaban haciendo en base a criptomoneda… que había aquel chico que ahora no me acuerdo como se llama". Este es un extracto de una conversación intervenida en el teléfono de Víctor Terradellas, amigo y hombre cercano a Puigdemont, investigado en Barcelona por el 'caso Voloh' de presunto desvío de fondos públicos y financiación del 'procés'. Su interlocutor era el empresario y exalto cargo de CDC David Madí, también hombre de confianza del 'expresident'.